La Elegancia Al Caminar [YAOI]

¡Samantha, buenas tardes!

La chica caminaba por la mansión con varios libros en mano, se dirigía a la biblioteca para colocarlos en su lugar correspondiente, pero de la nada dos niñitos aparecieron en su campo de visión.

- ¡Charles, Ken! -Exclamo ella.- ¡A la cama, ahora mismo! Su madre se va a enfurecer y ustedes podrían causarse heridas, ¿Qué creen que hacen despiertos a estas horas? Es recién la mitad del día, el sol esta en el centro del cielo y sus rayos solares son mucho más potentes a estas horas.

Ambos niños se quedaron quietecitos escuchando el pequeño sermón que les daba Darlene, pero lo ignoraron y se excusaron.

Charles hablo primero.

- Ken quería ir al baño, y yo no quería que se hiciera pipi en mi cama, y tu sabes que él le tiene miedo a la luz, así que quise acompañarlo, o si no se haría en mi cama.

Darlene suspiro cansada, dejo los libros sobre una pequeña mesita de noche que se encontraba en aquel pasillo y tomo una mano de cada niño.

- ¡Yo no quería hacer pipi! -Exclamo Ken.- Lo que sucede es que Charly es malo y quería asustarte, ya que él sabia que a esta hora tu tenias que estar despierta para ordenar la mansión.

- ¡No es cierto! -Reclamo Charles.

- ¡Si lo es! -Contradijo Ken.

- ¡Que no!

- ¡Que si!

Darlene sonrió dulcemente. Le hubiera encantado tener ese tipo de discusiones con sus hermanos. Discutir por cosas sin importancia, tan chiquitas que en verdad no importan, pero lamentablemente los Blaked's no le quisieron dar esa oportunidad.

Cargo a Ken sobre su abdomen con un brazo, ya que era el menor, y con su mano libre sujeto firme la mano de Charles.

- Ken, iras a hacer tus necesidades tengas o no tengas ganas.-Luego miro a Charles.- Y tu, Charly, tomaras un poco de agua tibia para que te baje un poquito el sueño, ¿si?.

Los dos niños afirmaron con su cabecita contentos. Darlene podría llegar a ser como una segunda madre como ellos, aun que también les gusta molestarla con Vayron.

Darlene llevo primero a Ken al baño, el cual pudo hacer solo sus cosas sin ayuda. Mientras que Charles esperaba al otro lado del baño, Darlene le trajo el baso con agua tibia de la que prometió y se la dio de beber.

*

En la mansión Blooded, la pequeña hermana de Yassir salió de su cuarto dando ligeros y cortos pazos hacia las escaleras.

Esta era su rutina de todas las mañanas. Tenia esperanzas de ver a Elaya cerca del jardín de la mansión, quizás sentado sobre algún árbol, acostado en el césped o vagando entre las flores. Pero esta mañana no seria así.

A pesar de que intentara no provocar ruido al pisar los escalones de las escaleras, igualmente no pasaba de desapercibida su presencia.

Al llegar al primer piso camino lentamente hacia la sala de estar, se sentó en el suelo y dio un suspiro.

- Hace frio...

La chica sintió el ruido de un puerta abriéndose. Se asusto.

Se puso de pie de inmediato, pensando que Megan había vuelto después de todos estos días, pero no era ella.

- ¿Kain? -Hablo claramente, intentando no temblar de los nervios.- ¿Eres tu?

Nadie le respondió. Ni una voz contesto su pregunta.