Vecino + Peligro = -Charlotte

C A P Í T U L O 4

Capítulo 4, Sueños, fiesta y su nombre.

- ¿Que haces en mi casa? - hablo con dureza en su voz, sus ojos azules se veian bastante enojados - y sexys - me susurro mi conciencia.

Meterme a su piscina no fue una buena idea y solo hasta ahorita vengo a darme cuenta.

- Lo lamento... pensé que no había nadie y yo... - podia notar como me evaluaba con la mirada y me sentí intimidada allí parada frente a él, mojada y solo en traje de baño.

- Te enseñaré a no meterte en la psicina de los vecinos sin permiso cuando no se encuentran en casa - sonrió de forma maquiavelica y lo siguiente que sentí fue que era tomada por cintura para ser empujada a la psicina donde momentos atrás me encontraba solo que esta vez tenia un fuerte cuerpo sujetandome.

Al salir a la superficie pude tomar aire profundamente y con la mayor fuerza que pude empuje a mi vecino quien me sonreía. Aunque mojado se veia más sensual con su cabello largo mojado, voltee a verlo por última vez antes de salir nade hasta la esquina donde deje mis shorts junto a mis Vans y me coloque todo lo más rapido que pude.

- Sin ellos te ves mejor... - escuche y le mostre mi dedo medio pero el rió más fuerte.

- Eso es para que lo pienses mejor la próxima que quieras visitarme nena - me salte la muralla para regresar a mi casa nuevamente.

Definitivamente mañana mismo busco alguien que arregle el drenaje de mi piscina no pienso pasar por algo como esto nunca más aunque el calor me mate.

Soñar con esa imbecil me hizo enojar aun más por lo que hizo. Se que no debí meterme así en su casa pero hacia demasiado calor y aun no he conseguido alguien que me ayude con el drenaje de la estupida piscina.

Note que había quedado dormida en el sofá fui a la cocina por un vaso de jugo y me fui a dormir en mi habitación me cambie la ropa húmeda y continue durmiendo placidamente.

El sonido molesto de la alarma me desperto y empezaba a odiar este trabajo en la boutique de novias, es decir he aprendido mucho estas últimas semanas pero extraño dormir hasta medio día como hago los fines de semana.

Enojada me puse de pie para darme una ducha y cepillar mis dientes me quedaban 45 minutos para llegar a la tienda. Me coloque un vestido de color blanco con estampado de girasoles pequeños y unas sandalias altas de color beige tome mi casco, mi bolso y las llaves para salir.

Me gire para ver la casa de mi vecino y unos tipos fortachones iban entrando algunas cosas como alcohol, comida y altoparlantes ¡¡maldición¡¡ hoy será una noche larga si ese imbecil se le ocurre hacer una fiesta. Rode los ojos ignorandolos y prendí mi Vespa pero cuando me disponia a marcharme la voz tan familiar de mi vecino junto a otro hombre de cabello largo y barba con buenos biceps llamarón mi atención.

- ¿Como va tu problema con el drenaje nena? - lo mire boquiabierta !!HABÍA SIDO ÉL¡¡ maldito ¿como se atreve hacerme algo así? Y en VERANO. Voy a matarlos. Le di una mirada de odio al ver como se reian y me apresure a salir del lugar.

Pase el día haciendo mil cosas dentro de la tienda ayudando a Pnina y a sus clientas exigentes que las horas volarón de prisa cuando era la hora de irnos recorde la jodida fiesta de esa tonto y empuñe mis ojos de la ira al recordar que fueron ellos quienes jodierón el drenaje de mi casa.

- ¿Que sucede cariño? - paso mi jefa cerca de mi dandome un apretón en uno de mis hombros.

- Mi vecino es un imbecil y hoy hará una fiesta. - le dije buscando mis cosas.

- Pero no es para tanto Charlie solo será por esta hoy además la otra noche no lo dejaste dormir ¿recuerdas? - Pnina sonrío recordandome como tal vez mi madre lo haria y asentí forzadamente.

Suspire profundamente - Tienes razón pero si son las 5:00am le quemaré su casa. - ella solo se río y me contagio ¿de verdad yo seria capaz de eso? Obviamente no quemaría su casa pero no se va salvar de alguna travesura.

- Adios Cariño nos vemos el día de mañana - nos despedimos y fui al supermercado por algunos víveres. Tome varios helados hoy iba ser una noche larga ¡¡joder¡¡ a penas es miercoles ¿porque no quiso esperar al fin de semana? Me queje una vez más.

Al llegar vi estacionados en toda la calle gran cantidad de autos dejandome sin un maldito espacio para pasar con mi motocicleta. La música retumbaba alto por todo el lugar tanto que mis vidrios en las ventanas vibraban, como pude y sobre la acera llegué a mi hogar me cambie la ropa y acómode las compras en la alacena.

10:00pm el ruido no me molestaba, no pensaba dejar que mi vecino arruinara mi noche, continue viendo televisión.

12:00am la película que veo es demasiado buena así que los gritos de la casa de al lado no me incómodan.

2:00am no encontraba nada que ver y el helado se me había acabado, suspire frustrada y me levante para ponerme la pijama.

4:00am llevo una hora intentando dormir y le han subido más volumen a la música, definitivamentr iba vengarme y con creces.

4:30am ¡¡NO LO SOPORTO MÁS¡¡ me coloque mis Vans y en pijama salí de mi hogar con el cabello despeinado y con mis ojeras más pronunciadas de lo normal.

En la calle los autos se habían multiplicado y al parecer ninguno de mis vecinos le prestaba importancia a la fiesta de fin de mundo que se hacía en nuestra calle. Tome aire y toque el timbre repetidas veces, pronto un joven de ojos azules y piel blanca me abrió la puerta iba sin camiseta solo jeans y Converse.

- ¿En que puedo ayudarte preciosa? - detesto cuando un hombre se coloca así de baboso.

- Necesito hablar con el dueño de la casa ¿puedo pasar? - sonreí de la manera más inocentemente falsa al chico quien me devolvio la sonrisa solo que mucho más sexy.

- ¿Te refieres a Roman? - Con que así se llamaba el imbecil, asentí varias veces y me dejo pasar señalando el piso de arriba.

- Si quieres divertirte estaré aquí abajo nena. - ¿que tienen todos con ese apodo de mierda? Rode los ojos sin que me viera y subí uno a uno los escalones hasta llegar a la parte superior.