Después de horas concentradas y mezclando ingredientes entre lecciones de alfabeto rúnico, las propiedades mágicas de cada sustancia usada, además de manipular la intensidad de la magia usada en cada movimiento, Emma comienza a sentir dolor de cabeza y nota que su estomago ruge. Mira hacia Regina y se pregunta cómo ella consigue saber todo aquello y actuar como si estuviese preparando la receta más sencilla del mundo.
«¿Cuántas pociones exactamente conoces, Regina?» la salvadora se sienta en una banqueta y la observa limpiar todo y guardar lo que no había sido usado, cosa que la morena hace con extrema dedicación.
«No sé a ciencia cierta, un par de cientos» dice sin alzar la mirada
«¿Cientos?» la rubia la mira boquiabierta
«Sí, ¿por qué el asombro?» cierra la bolsa con sus ingredientes
«¡Eres la misma Hermione Granger!» elogia
«¿Quién?» la alcaldesa la mira directamente por primera vez
«La brujita más increíblemente inteligente de Hogwarts» sonríe
«Swan, ¡no sé de lo que estás hablando!» pone la mano en la cintura y la mira, seria
«¡Cielos! ¿No has leído Harry Potter?» se asombra
«¿No me digas que eso es lo máximo que has leído de libros de magia en tu vida, Emma?» arquea la ceja, irritada
«Para que te enteres, majestad, he vivido 28 años de mi vida como una persona completamente normal, sin contacto alguno con personajes, quiero decir, personas de cuentos de hadas, seres mágicos, y nunca soñé que yo misma tendré...esta cosa...esto...»
La reina cierra los ojos y respira hondo por un momento
«Swan, ya es tiempo de que aceptes quién eres y dejes de jugar con tu magia» pronuncia en tono serio «Esto aquí» muestra la poción «No es una fantasía de adolescentes. Esto aquí realmente existe, funciona, es poder materializado» mira a la otra nerviosa
Emma solo abre los ojos de par en par, encarando a la morena, hacía un tiempo que no la veía de aquella forma, tan irritada por algo. La sheriff sabe que para la alcaldesa la magia es algo muy serio, que ella había estudiado con ahínco muchos años y a lo que más se había dedicado durante toda su vida.
«Yo...discúlpame por bromear con eso, en verdad no era mi intención, ni nada, solo comenté lo de Hermione porque la considero increíble y super inteligente, como tú, y recordé que Henry siempre cuenta que eres buena en química y siempre lo ayudas con la tarea» dice algo sonrojada queriendo que la rabia de Regina desaparezca.
Las palabras de Emma desarman a la reina por completo. ¿De verdad está escuchando aquello? ¿La salvadora se había referido a ella como "increíble y super inteligente"? Su mirada hacia la otra madre de su hijo se suaviza.
«Está bien...» responde por fin tras unos buenos segundos de silencio, dejando a la rubia aprensiva, en su mejor estilo Regina Mills
«¿De verdad? ¿No me vas a castigar ni nada?» bromea Emma, haciendo que la morena frunza el ceño
«¡No me des ideas, Swan!» usa su tono provocador, causando un estremecimiento en su interlocutora, que traga en seco.
«Ahm, en realidad, quería darte una...» pasa la mano por su cabello, ocultando su incomodidad
«¿Una idea de castigo? ¡Me encantaría!» continúa provocando
«No, Regina, no es un castigo para mí» revira los ojos y su estomago ronca, haciendo que Emma se ponga roja como un tomate y la alcaldesa se divierta
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Dark Paradise
FanfictionTraducción del fic portugués del mismo título escrito por brullf. Emma Swan toma el lugar de Regina Mills y es arrastrada por las tinieblas, convirtiéndose en la nueva Dark One para que la alcaldesa pueda, finalmente, tener su final feliz. La reina...
