Ya es de mañana cuando Emma y Regina aparecer para recoger a Henry y Roland en casa de Rumpel. La alcaldesa les explica los dos muchachos, ansiosos y recién levantados, que Zelena y el bebé están bien, pero que necesitarán quedarse un tiempo más en el hospital. El pequeño Hood comienza a llorar y la morena lo coge en brazos.
«¿Qué ocurre, cariño?»
«Mamá Zel, tía Gina, no quiero que ella se vuelva una estrellita igual que mamá Marian» esconde el rostro en el cuello de ella y llora. Emma y Regina se miran y la reina lo aprieta más entre sus brazos
«Roland, mi amor, no pienses en eso. Te prometo que nadie te va a quitar a Zelena, ¿entendiste? Ella está bien y se va a poner bien, así como tu hermanito que está dentro de ella. Pronto ella va a casa con tu papá y contigo» le acaricia la espalda intentando calmarlo
«¿Lo prometes?» hipa entre lágrimas y la sheriff seca su rostro con cariño
«¡Lo prometo!» Roland la abraza de nuevo con toda la fuerza de sus bracitos
«¡Gracias!»
Las dos les dan las gracias a Gold y a Belle por haberse quedado con los niños y salen, Regina con Rolan en sus brazos, y Henry abrazado a Emma. La rubia y su hijo conversan con la mirada, el muchacho de verdad quiere saber si su tía está bien y ella le guiña un ojo, señalando a la morena, que va delante. Los dos sonríen cómplices y orgullosos de Regina. La rubia se demora un tiempo más observando a la morena con el pequeño en sus brazos, pensando en cómo llevaría a Henry cuando era un bebé y un pequeño deseo comienza a germinar en su interior.
Los cuatro pasan la mañana entera en casa tras un super desayuno en Granny's. Después del almuerzo, a la hora de visitas en el hospital, Regina y Emma los llevan a los dos para que vean a Zelena, que se emociona al recibir el cariño de su sobrino en un largo abrazo y a cierto muchachito en su cama, que, con todo cuidado, se acurruca a su lado para no hacerle daño al bebé en su barriga.
La alcaldesa conversa con los médicos que se encargan de su hermana y le garantizan que está bien, el estar un día más ingresada es solo una precaución hasta que el bebé esté completamente estable y para que la hechicera no pase por ninguna situación de estrés.
Al caer la tarde, Emma, Regina, Henry y Roland van al loft de los Charming. Al saber lo ocurrido con la Wicked Witch, Mary los invita a que pasen un rato distrayéndose y porque echa de menos a toda su familia reunida. David, Henry, Emma, Roland y Mulan organizan un mini campeonato de videojuegos. El pequeño contagia a todos con sus carcajadas y su simpatía, más tranquilo después de ver a Zelena y entender que ella volvería a casa el lunes con Robin.
Snow, Elsa y Regina se encargan de las cosas en la cocina y se turnan agarrando al pequeño Neal que se divierte pasando de brazo y brazo. Mills aprovecha el momento e intentan descubrir algo sobre el tal baile que Mary Margaret está organizando y que será el jueves siguiente.
«Está bien que hayas sacado el tema, Regina. Necesitaré tener acceso a tu casa para organizas las cosas con la decoración y el buffet durante el día» sonríe la profesora
La alcaldesa revira los ojos para la diversión de las otras dos. Siente que hay algo más tras el baile, pero no logra descubrirlo. Y, al contrario que en su pasado, no iba a arrancar ningún corazón para saberlo.
«Claro, puedes coger las llaves de tu hija, yo estaré trabajando todo el día en el ayuntamiento, como de costumbre» resopla mientras se dirige al horno, metiendo en él la primera pizza.
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Dark Paradise
Hayran KurguTraducción del fic portugués del mismo título escrito por brullf. Emma Swan toma el lugar de Regina Mills y es arrastrada por las tinieblas, convirtiéndose en la nueva Dark One para que la alcaldesa pueda, finalmente, tener su final feliz. La reina...