- Abby, despierta!!! Hoy hay colegio!! - Me grito mi padre desde afuera de mi dormitorio.
Me hice la dormida por un momento, pero luego insistió:
- Abby! llegarás tarde!! Son las 7:20 am !!! - Me gritó nuevamente mi papá.
Por una parte me quería levantar rápido de mi cama para ir a pasar las entretenidas materias que me gustan. Pero por otra, no tengo muchos amigos, en realidad ninguno para poder conversar en los recreos, o bromear, u otras cosas divertidas que hacen todos con sus amigos.
Me levanté rápidamente, ya que pensé "no puedo llegar atrasada el primer día de clases". Así qué me duché, vestí y tomé mi mochila y algo para comer de camino a la escuela.
De camino a la escuela, me fui pensando como sería mi día; "¿llegaría alguien nuevo a nuestro curso?", "¿me atrevería a hablarle?", "¿me respondería?".
Interrumpió mis pensamientos el timbre de la escuela, llegaría tarde. Así qué empecé a correr lo más rápido que pude.
Cuando llegué a la escuela, todos estaban felices de encontrarse con sus amigos, pero nadie de mí. Lo que me deprimió bastante.
Entonces, caminé con la mirada baja hacia la sala. Elegí un banco casi de los últimos del salón y saqué un libro que estaba leyendo.
Después de un rato, todos empezaron a subir al salón, y entró la profesora.
Habían dos chicas nuevas, las que rápidamente se hicieron amigas de otras.
La profesora empezó la clase, nos hizo callar a todos y pidió que tomáramos asiento. Nótese el sarcasmo.
De pronto, tocaron la puerta.
- Pasa - dijo la profesora - él es su nuevo compañero
La profesora pidió que tomara asiento. Y para mi buena suerte, estaba desocupado el asiento de adelante mío.
Era un nuevo compañero: chico nuevo, nuevas oportunidades para hacer amigos. Entonces pensé "no me atrevo a hablarle a mis compañeros que conozco desde primaria, y ¿me atreveré a hablarle a un chico nuevo?, y es lindo, peor aún".
Cuando tocaron el timbre para recreo, guardé mis cosas de la clase, y tomé un libro para leer en el recreo.
El chico nuevo tomó sus cosas, e inmediatamente lo aceptaron los más populares.
Me senté en un pasillo al leer. Cuando tocaron el timbre nuevamente, entré a clases y tomé asiento con la mirada baja, como siempre.
El profesor entró, y empezó a hablar todo en inglés, como hacía de costumbre. Hasta qué el chico nuevo se dio vuelta:
- ¿Entendiste algo de lo que dijo el profe? - me dijo.
Asentí con la cabeza y luego bajé la mirada, pues no me atrevía a decirle nada.
- ¿Me puedes decir que es lo que dijo?
Me quedé callada un momento, pero reuní todas mi fuerzas del interior para poder hablarle. Pero al abrir la boca...
- ¿Tienen algo que compartir con la clase? - nos interrumpió el profesor.
- Gracias, no importa - me dijo el chico.
El profesor no nos podía interrumpir en otro momento, tenía que ser ahora, justo cuando por primera vez me atrevía a hablarle a alguien.
Cuando terminó la jornada de clases, me fui a mi casa pensando en lo tonta que había sido. Me fui enojada con migo misma y retándome a la vez.
Llegué a mi casa, y mi padre no estaba, pues estaba trabajando como siempre. Saqué mis cosas de la mochila, hice mis tareas, y terminé el libro que estaba leyendo

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De la oscuridad a la Luz [Completada]
Teen FictionAbby es una adolescente de 16 años tímida, introvertida y no de amigos. Cuando llega un nuevo chico a su escuela, crea una gran cercanía con el. Será este chico el que le ayude a salir a delante con la verdad que nadie conoce sobre ella? O solo le...