Aprendiendo a Amar

Capítulo 61

Capítulo 61

>>Sami<<

Bella me miraba confundida, creo que no creía lo que estaba diciéndole, me senté en la cama, ella hizo lo mismo y quedamos frente a frente

- No sé si entendí bien o me estás haciendo una broma – sus ojos se clavaron en los míos - ¿Queres que nos vivamos juntas?

- Sí, me refiero a que somos buenas amigas, la pasamos bien y más cuando tenemos sexo – se rio – Vos queres salirte de tu casa y yo quiero ser independiente

- Claro que quiero, seria genial compartir casa con vos – me abrazo y rápidamente se separó - ¿Dónde nos mudaríamos?

- Mis padres tienen varias propiedades, puedo decirles que me den una así no pagamos alquiler – recordé que en mi laptop tenía una carpeta con imágenes de las propiedades de mis padres, la abrí y busque la carpeta - ¿Cuál te gustaría?

- La que vos elijas, solo quiero compartir más tiempo con vos Sami – me acostó en la cama – Esto deberíamos celebrarlo

Sonreí y ella me beso poniéndose sobre mí, su rodilla presiono mi sexo y solté un gemido que se ahogó en su boca, mordió mi labio inferior y con su lengua recorrió mi cuello, fue bajando hasta mi pecho derecho y metió el pezón en su boca, levante mi cabeza para poder verla, se me hacía muy sexy verla chupar y lamer mis pechos, ella cambio metiendo ahora el izquierdo en su boca, lo mordió suavemente y al escuchar mi gemido lo libero. Siguió bajando, se detuvo en mi pelvis al dar un beso y cuando estuvo frente a mi sexo creí que atacaría mi clítoris pero su lengua fue a mi entradita y hacia presión, sentí muy rica la acción y se lo hice saber pidiéndole que no se detuviera. Continuo durante varios minutos hasta que sentí dos dedos entrar, los movía adentro tocando mis paredes vaginales, me estaba desesperando, quería que los metiera y sacara, que lo haga más fuerte, sentía una presión en mi sexo y necesitaba liberarlo

- Cogeme Bella – suplique y escuche una perversa risa

Por suerte no me hizo desearlo más, sus dedos entraban y salían de mi interior con velocidad, mi espalda se arqueo y ella bajo el ritmo, no me quería dejar llegar, la mire y sonreí, sin dejar de penetrarme metió mi clítoris a su boca y lo succionaba, sentí la necesidad de gritar de placer y lo hice, mi voz retumbaba en la habitación, me estaba enloqueciendo y ella lo sabía. Cada vez que iba a conseguirlo se detenía o bajaba la intensidad. Estuvimos por más de treinta minutos de esa manera hasta que mi cuerpo no resistió más y soltó un gran orgasmo. Estaba agotada, jamás me había quedado satisfecha al primer orgasmo pero este fue demasiado intenso, quería hacerla mía a Bella pero realmente no podía ni moverme, sentía cansado mi cuerpo, ella se dio cuenta así que se acostó a mi lado, agarro la sabana y nos cubrió a ambas, me abrazo y puso su cabeza sobre mi pecho, cerré mis ojos tratando de calmar aun mi respiración y no se en que momento me quede dormida.

Sonó la alarma de mi celular, la apague y mire a mi lado a la hermosa mujer que me acompañaba, estaba con su rostro hacia el otro lado, dormía profundamente, bese su espalda creyendo que eso la despertaría pero ni siquiera se movió. Acomode su cabello y siguió igual así que le hable al oído varias veces hasta que abrió sus ojos, le dije que se fuera a bañar mientras le buscaba algo de ropa para que se ponga, aun dormida se fue a mi baño, me levante y busque en el closet una blusa violeta, un jean azul clarito y un conjunto de ropa interior que aún estaba en su cajita ya que lo había comprado hace poco y decidí regalárselo. Entre al baño, deje una toalla y pense en salir pero como ella ni se percató que había entrado abrí lentamente el cancel y al verme sonrió