Billie.
Miércoles por la mañana. Un horrible día lluvioso. Hasta creo que la humedad arruina mi cabello.
—¡Billie, hijo, a desayunar!
Es el quinto llamado de mamá, ajusto mi corbata roja en la camisa negra, y arreglo una vez más mi cabello. Mis ánimos hoy están por el suelo, soy ese tipo de persona que se deprime por la lluvia.
Debería estar feliz por el beso que Alissa me robó ayer, y es que estoy feliz, pero el clima me baja los ánimos. No tengo idea de por qué, pero me siento desanimado, y eso es extraño en mi caracter.
—¡Billie!
—Ya voy —respondo, en un susurro que seguramente mamá no puede oír.
Ajusto mi cinturon negro con tachas y tomo mi mochila, salgo de la habitación y bajo las escaleras, hasta llegar a la cocina.
—Buenos días —saluda mamá—. Veo que te gustó la corbata que te compré, te queda maravillosa con esa camisa.
—Buenos días —susurro, ignorando su comentario acerca de la patética corbata roja, que pese a que odio, no pude evita ponerme.
Supongo que me queda bien, ¿no?
—Hoy irás caminando, tu padre enfermó —dice mamá.
Maldigo por lo bajo. ¿Caminar en la lluvia? Eso sí es jodido.
—Puedes usar el paraguas de tu padre.
—¿El verde?
—Si. Ese.
Vaya. Mal día para mi.
—Entonces me voy ahora —murmuro. Mamá toma otro sorbo de café y me mira.
—¿Tan pronto? No has tomado tu desayuno.
—Se me hará tarde —respondo, y sin esperar respuesta salgo directo hacia afuera, sin antes colocarme mi chaqueta.
El paraguas verde me parece tan patético que decido no usarlo, pero termino tomándolo. No quiero mojarme.
Lo abro con la misma dificultal de siempre y lo coloco sobre mi cabeza. Efectivamente mi cabeza no se moja, pero mis pies sí, y eso me jode.
—Maldito clima —susurro. Es increíble la forma en la que un día está soleado y otro día está lluvioso.
¡Fantástico! (Supongo que notas mi sarcásmo, ¿no?).
—¡Hey, Billie!
Miro a los lados, donde podría provenir la voz, y me encuentro con mi amigo rubio. El maldito Mike.
—¡Creí que irías en auto! —grita, mientras se acerca hacia mi, con un rompevientos azul. Completamente mojado— ¡Pensé que tal vez podrían llevarme al instituto!
—¿Por qué gritas? —pregunto.
—No lo sé.
—Vamos caminando, papá está enfermo —digo. Mike asiente y comenzamos a caminar.
El bendito paraguas solo alcanza a cubrirme a mi, bien podría cubrirnos a ambos, pero no quiero llegar al instituto con Mike pegado a mi costado como en una escena romántica de esas películas que suele ver papá a veces.
—Hoy tenemos exámen —dice. Y creo oír la risa de Elmo y Satanás riéndose de mi.
Definitivamente, hoy no es mi día.
—Al diablo —maldigo.
Este día no podía empezar mejor.
* * *
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Ordinary World. [Billie Joe Armstrong] #FueledByPremios2018
Fiksi Penggemar[Cariño, no tengo mucho, pero lo que tenemos es más que suficiente]