CAPÍTULO ONCE

14 2 0
                                    

Reacciona

Las criaturas se lanzaron inmediatamente directo a mi chaqueta, que yacía colgada enmedio del charco asesino. De el comenzaban a salir los picos negros afilados a muerte, literalmente a matar. Parecían un vídeo de naturaleza, de esos en se puede ver en cámara rápida como crece una planta. Cómo del suelo va surgiendo un pequeño tallo verde (en este caso negro), y se va expandiendo hacia donde el sol lo dirija.

En este caso, más bien crecen a todas direcciones y a una gran velocidad. Va tan rápido que parece un abrir y cerrar de ojos. Pero mi mente lo interpreta diferente a como lo hace mi vista, va deteniendo milisegundo a milisegundo. Observando como el plan que ha ideado Richard parece que ha dado resultado. Se puede percibir como entra cada espina en todas partes del cuerpo de las bestias. Estás no producen sonido alguno de dolor. Pero sé que han muerto inmediatamente puesto que dejan de moverse.

Veo como Richard toma uno de los bidones de gasolina y la comienza a tirar por el borde de la pequeña construcción que hay debajo nuestro.  Mis sentidos se activan al ver que una de ellas está olfateando el aire, mientras el líquido del segundo contenedor se derrama encima de las criaturas que no han muerto por las espinas. Parecen más ocupadas por alcanzar el cebo. Las ha bañado a todas. No ha quedado ninguna sin estar empapada. Saca un encendedor que tenía guardado en su bolsillo izquierdo. Gira la rueda, generando un chispa potente que inmediatamente se convierte en una llama y lo deja caer en la gasolina. Oigo a la criatura que estaba olfateando el aire dar un gruñido. En un instante las llamas se expanden a cada rincón del callejón. Las veo quemarse lentamente. En cambio las otras yacen entre las espinas del charco.

Entonces él me grita:

-¡Tenemos que salir de aquí ahora! Hay un tanque de gas que está en esa casa, esto va a explotar.

Las veo quejarse. Por primera vez siento lástima por algo que intentó matarme. En cierto sentido, es como si mi corazón las estuviera perdonado por quererme lastimar. Una lágrima se me escurre por la mejilla derecha. Richard toma mi mano y me jala.

-¡Tenemos que irnos! ¡Reacciona Laurie!  -ordena Richard, mientras se oye a una de las criaturas subir al otro tejado dispuesta a perseguirnos aun estando bañada en llamas.

Mi cuerpo responde de manera inmediata dando la vuelta y siguiendo sus pasos. Pero mi mente no. Seguimos corriendo, pero es como si mi mente no estuviera allí. Todo parece una película que repiten una y otra vez en las salas de cine. Es como si mi vida estuviera en una pantalla. Parece que fuese todo planeado. Me siento pérdida. Recuerdo que alguien dijo que todas las cosas están quietas y en movimiento al mismo tiempo. Nada de lo que nuestros ojos ven en este mundo es cien porciento real. No sabemos en verdad nada de manera absoluta.

Si eso es cierto, ¿nada de lo que haga importa? ¿Toda mi vida no vale nada? En caso de que eso fuera verdad, ¿Eso no significa que estoy en alguna clase de ilusión? ¿Será esto un sueño? ¿Será alguna alucinación? Ya tiene días que mis pastillas se han acabado. Quizás mi mente ha creado toda esta situación.

Un estruendo anuncia que la criatura ha aplastado un automóvil al bajar a perseguirnos. Las llamas, que estaban contenidas son esparcidas por la criatura mientas intenta alcanzarme. 

Doblamos en una esquina y luego en otra. Corro lo más veloz que puedo. Siento las fuertes pisadas de la criatura correr tras nosotros. Se oyen demasiado cerca, casi como si estuviera sobre mi.

Estamos en a punto de llegar a otro callejón, las llamas se esparcen con rapidez por donde la criatura ha pasado, doblamos nuevamente antes de entrar al callejón, casi como si volviéramos al lugar del charco, las criaturas aun siguen vivas, o eso creo. Richard me toma del brazo y me guía entrando en una casa cuya planta superior está en llamas. 

Las criaturas están cerca. 

-Sígueme iremos al jardín -dice abriendo las puertas de la casa que ha comenzado a hacer ruidos por el calor de las llamas, las cuales se expanden por las escaleras que lleva a la planta superior. Un crujido ensordecedor cubre el ambiente.

Las sombras han roto la puerta. Y no puedo moverme. Las veo son muchas.

Una cálida mano toma mi brazo y me lleva a rastras. La casa se llena con furiosas llamas que se expanden con intrepidez.

Las criaturas, aun en llamas se acercan con velocidad, volteo a ver quien me lleva... Es Richard salvándome una vez más, me lleva justo al jardín. El me abraza y se lanza al suelo, evitando que de mi cabeza contra el piso. 

Una sombra se arroja sobre mi, la veo acercarse en el aire luce como si flotara directo a mi cara. Un estruendo ensordecedor seguido del derrumbe de la casa completa, evitan que siga con su objetivo. Veo los escombros que quedan, y una enorme ráfaga de humo negro ser expulsada de los restos. Creo que son las sombras que estaban dentro.

Puedo ver el suelo cubierto de pasto, cenizas y escombros, mientras mi mente vaga. Es como si estuviera en modo automático. Veo que Richard se ha levantado del suelo, se encuentra a mi izquierda, justo frente a mi. 

Estoy sobre el pasto, casi en posición fetal. Richard me observa y me habla, chasquea tres veces con los dedos pero no puedo entender lo que dice. Cada chasquido me hace percibir una brillante luz a través de un cristal transparente. Todo se ve tan deslumbrante y pasa tan rápido que a penas lo puedo apreciar.

Richard aún continua hablándome puedo verlo pero no tengo reacción alguna.

-Laurie... -es lo único que puedo escuchar- Laurie... Laurie...

Él me toma de los hombros y me ayuda a levantarme pero no logro comprender que me dice. El toma mi mano, se ve bastante preocupado. Y expresa:

-Laurie... Despierta.

Y por fin mi mente vuelve en sí. Y veo una explosión unas calles más atrás.

-¿Hemos destruido a las sombras?

-Me asustaste, pensé que te había perdido para siempre-dice mientras me rodea con sus brazos-. Nunca me hagas eso otra vez Laurie.

-Trataré de que no pase de nuevo...

-Mejor sigamos buscando a tus amigos. ¿A donde nos dirigimos ahora?

-A las afueras de Rougeville... -respondo.


BORRADA (Incluye Soundtrack)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora