Marcela García es una joven de 26 años de origen Mexicano, la cual decide trasladarse a la ciudad de París, para cumplir un sueño y una meta que siempre ha tenido, estudiar en una prestigiosa escuela de diseño de modas.
La vida le pondrá...
Otro mes más. Hoy regresa Ryan después de un mes fuera por cuestiones de trabajo, al igual que Mark, con sus asuntos personales. Me levanto con mucha flojera para tomar una refrescante ducha. Me ponga ropa interior normal, así como un conjunto "sensual", hoy quiero lucir preciosa.
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Tomo mi desayuno, termino de arreglarme y me dirijo a Carter Corporation, iniciando una nueva semana. *********** Subo las pequeñas escaleras y me adentro al edificio, paso por recepción para saludar a mi bella rubia.
•Yo: Hola.-le abrazo-. •Lisa: Hola cariño. ¡Vaya, que hermosa!.-me toma de las manos-. •Yo: Gracias, pero no más que tú.-sonrío-. •Lisa: Deberías apresurarte o Cassidy te comerá viva.-dice con tono burlón.-y por cierto, mátalos con tu escote .-me guiña-. •Yo: Seguro.-frunzo el ceño.-Cheez Felipe?-. •Lisa: No, los chicos quieren ir a comer comida basura.-dice triste-. •Yo: Vale!.-digo adiós-.
Me encamino para tomar el elevador. Las puertas están por cerrarse, pero una mano la detiene. Me sorprende ver quienes son.
•Sr.Carter: Buen día señorita.-se acerca para saludarme-. •Yo: Buen día señor.-digo feliz-. •Ryan: Buen día Señorita García.-mira indiscretamente mi escote con deseo-. •Yo: Hola, buen día.-le miro-. •Sr.Carter: Venía a despedirme de usted.-me toma de la manos, haciendo que lo mire.-Es una mujer muy agradable.-sonríe-.
•Yo: Oh!, muchas gracias. Me alegra haber trabajado con usted.-sonrío, suelta mis manos-. •Ryan: Me alegro que se haya portado de maravilla señor.-se dirige a su padre de forma indiferente-. •Sr.Carter: Es una lastima no volverla a verla. Espero un día acepte un café y retomar nuestras platicas.-dice sonriente-. •Yo: Por supuesto!, estaré encantada.-volteo a ver a Ryan, mirándonos de una forma muy extraña, como si no comprendiera lo que sucede.
•Sr.Carter: Debo reconocer que escogiste a alguien con mucho talento y no solo una cara bonita. Aunque Marceline es muy bella e inteligente.-ambos se miran serios-.
-¿Marceline?-
Ryan no dice nada, solo nos miramos. Su padre me toma de las manos otra vez, haciendo que le mire. Me agrada mucho este gran hombre. Las puertas se abren. •Yo: Bueno Señor Carter. Me despido de usted.-digo sonriente-. •Sr.Carter: Oh no!. Insisto venga a mi oficina.-me toma de la mano, dejándome salir primero-.
Caminamos hasta el despacho de Ryan. Entramos y el Señor Carter me ayuda a tomar asiento. Decide sentarse en el sillon de cuero de su hijo, mientras que él toma lugar a mi lado.
•Sr.Carter:Bien, dire dos cosas. Por favor, tratemonos de "Tú".-me mira fijamente-. •Yo: No señor, eso no es correcto-. •Sr.Carter: Que linda!. Insisto en que lo hagas.-asiento con la cabeza.-Segundo, llamame Maximilien o Max. No quiero confusiones en cuanto al nombre de pila.-mira a Ryan un breve segundo-. •Yo: Esta bien Max.-digo un poco incómoda-.
Volteo a ver a Ryan, quien parece desconcertado por las palabras de su padre. •Sr.Carter: Bueno, me alegra haber conocida a tan linda, modesta e inteligente señorita.-se levanta y hacemos lo mismo.-Hasta luego Marceline.-tiende su mano, la cual estrecho-.
