— ¿Confías en mí, no? ¿Crees que podrías hacerte daño de verdad? Responde. — si los ojos hablaran Kihyun ya estaba muriendo, puteando y cayendo por un décimo piso del terror que estaba teniendo. Pero tenía que responderle. Y, sinceramente, el peli rosa creía que le podía dar su corazón como david jones y dejárselo sin miedo a que se perdiera. Se mordió los labios y despacito los separó.
— Confió en ti. Nunca me harías un daño que verdad. — le respondió tembloroso y antes de cerrar la boca pronunció un 'amo' muy suave y muy dulce, lleno de expectativa. Hyunwoo le dio una sonrisa a cambio y dejó caer el lubricante sobre el miembro ajeno.
Me corro, me corro. No puedo.
Kihyun cubrió su boca con ambas manos tratando de controlarse, sus piernas le temblaban como hojas al viento, quería correrse. Miró al techo esperando que las rodillas siguieran haciéndole caso. Un momento después gritó y apoyó las dos manos en la cabeza ajena. Una vara se le hundía en el pene.
— Es un plug de silicona uretral, el más pequeño del set que viene. Recién comprado e higienizado. Te dará placer cuando lo mueva y mientras te retiene la eyaculación. Tiene textura para que no lo puedas sacar a menos que lo muevas, como un tornillo. — la voz de Hyunwoo era profunda y le hablaba con calma mientras movía el objeto, metiéndolo y metiéndolo hasta que solo se observó una bolita en el final. Las piernas del peli rosa fallaron cuando la sensación de llenado le inundó y el moreno le sujetó por las nalgas, ayudándole a quedarse parado. Se fue levantando hasta sujetarle de la cintura y le alzó contra el pecho. Se acercó y empezó a lamerle los labios, besándolo muy cuidadosamente. Kihyun le siguió el beso desesperadamente, tratando de hallar algo ahí. Le succionaba la lengua y la masajeaba en bombeos suave. En algún momento le llevaron a la cama y Hyunwoo lo separó para mirarle. Era sencillamente hermoso, su cuerpo pequeño temblaba entre sus brazos y se mordía los labios reprimiendo los jadeos. Finalmente lo volteó, algo triste por no poder seguir apreciando su expresión. Le ayudó a poner el torso sobre la cama y las piernas las ubicó sobre las almohadas separadas, cuidando de que su miembro no toque ninguna sino que quedaba en el espacio entre las dos. Kihyun se dedicó a quejarse pero sin hablar y Hyunwoo le acariciaba la espalda con mucha calma.
— Voy a metértela hoy, aguanté varias semanas, ¿crees que estás listo? Mueve la cabeza. —
No tienes idea de lo que te estoy esperando.
Kihyun asintió sin pensarlo un segundo, varias veces y alzó más las caderas, Hyunwoo dejó salir una risa y le besó una de las nalgas, verlo tan entregado le daba ternura, pero no estaba seguro de que lo estuviese pensando bien. — Está bien, voy a prepararte, siéntete libre de avisarme si duele o si estoy cerca de alguna parte que te de más placer. Tu cuerpo es tan pequeño y hermoso. — suspiró y se levantó, acercó un pote de lubricante a su entrada y dejó caer una buena cantidad, empezó a meter los dedos, abriendo el agujero en forma de tijeras hasta que lo vio lo suficientemente abierto para entrar sin problemas. Estiró las nalgas con ambas manos y su miembro comenzaba a hundirse en las paredes apretadas. Era delicioso y quería empotrarlo hasta el hartazgo, pero no quería hacerle daño. No quería en absoluto que su primera vez con él fuese dolorosa.
Le esperó paciente cuando terminó de meterse, se apretaba con fuerzas los labios y sus músculos se contraían, aguantándolo con paciencia. Cuando el menor movió sus nalgas en busca de más se las sujetó y lo separó, luego lo estampó duramente contra sus caderas haciéndolo gemir, logrando que un sonido de piel contra piel se haga presente. El moreno se dispuso entonces a golpearle un par de veces con todo el miembro de lleno en su interior, sus testículos le rebotaban y la sensación le hizo estremecer. Kihyun se volteó un poquito, queriéndolo ver y la imagen le excitó un poco más si es que era posible. El chico estaba embistiéndolo como un oso y sentía su miembro rebotando excitado, demasiado necesitado para ser real.
Un momento más tarde los dedos del mayor se bajaron y empezaron a mover el plug de su pene, despacio y tortuosamente. — Solo te pueden entrar cosas hoy. Ya te dije que quiero que te corras por tu próstata. — comentó y con el índice golpeó el aparatito de silicona y lo volvió a dejar a donde estaba, provocando unos gritos del chico. Luego de eso empezó a buscar su punto bueno por dentro, removió a los lados y en un rato de ir experimentando varios ángulos el peli rosa se retorció y alzó las nalgas mucho más alto. — ¿Aquí te gusta? — Kihyun asintió aunque no le hubiesen dado permiso y recibió una nalgada fuerte como respuesta que lo hizo gritar muy agudo y se arqueó hasta sentirse romper. Su cuerpo quedo tembloroso, una descarga total que le había llegado desde su interior hizo apretar con fuerzas el pene de Hyunwoo, haciendo que éste se percatara que acababa de que acababa de llegar al orgasmo sin que nada saliera de su miembro.
El moreno sonrió triunfal y siguió penetrándole, se movía con bastante fuerza, siguiendo en el estímulo de ese punto que se frotaba con todo su miembro sin detenerse y provocaba que los sonidos abandonaran los labios ajenos sin poder conectar ni dos neuronas. Kihyun quería gritarle que parara, que ya no podía más, pero solo se apoyaba más contra el colchón, hundiendo la cabeza mientras gemidos de placer le inundaban la boca. Pasaron varios minutos hasta que Hyunwoo se corrió en su espalda, manchándole absolutamente todo el cuerpo. Acarició su trasero con cuidado antes de hablar.
— Gírate. — su voz le hizo asustar y un tembloroso peli rosa terminó por voltearse, su rostro estaba rojo y su miembro seguía parado por la fuerza que hacía el plug. Le sonrió de lado y sujetó la base de su miembro con una mano y la punta del aparato con la otra. Le masturbó la uretra por unos segundos y luego sacó el aparato de la extensión. Kihyun no había parado de chillar y retorcerse cuando sucedió eso. — Mira esto. — Hyunwoo se acercó y apretó el rosado miembro entre sus manos, lo bombeó dos veces y al moverlo a los lados el liquido blanco hizo presión. Kihyun abrió los ojos muy grandes y se torció hacia atrás, estaba llegando al clímax otra vez en menos de diez minutos. Sus piernas se estiraron para todos lados y cuando la presión del líquido apareció por completo gritó y saltó en la cama. Empezó a llorar del susto, mordiéndose los dedos con pena. — ¿Te gustó? Ya puedes hablar tranquilo, ven, abrázame pequeño, no llores. — Kihyun acababa de entrar en un laberinto y se le abrazó rápido y tembloroso, frotando el rostro contra su pecho. — Sí, me dio miedo. Me cansé mucho... — susurraba bajito, sabía que luego de portarse bien podía hablar en la cama y nunca lo desperdiciaba. Repartió besos por toda la piel oscura y le miró atontado, su cuerpo no paraba de temblar. Hyunwoo sonrió y lo escondió en las frazadas, acurrucándolo de frente contra su pecho. —Duerme tranquilo entonces. Ahora apagaré la luz. — le acarició los cabellos y el peli rosa no tardó en caerse muy suavemente dormido en sus brazos.
HICE COMO TRES MIL PALABRAS DE PURO LIMÓN QUE ONDA 😱😱😱😱😱😱😱😱
No me arrepiento de nada (?) los subo al mismo porque no me entraba en uno xDLes dejo al bebe.
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Café y Lágrima [Wonkyun|Showki]
FanfictionKihyun es un estudiante de música que trabaja en el restaurante de su mejor amigo, en la zona céntrica de Seúl. Hyunwoo es dueño de una discoteca gay que está a dos cuadras. Hoseok es dueño de otra que está a quince cuadras. Changkyun es estudiante...