Kihyun caminaba paso a paso por una casa desconocida. Sus piernas temblaban, parecía que había empezado un poco más el frío porque le salía vapor de la boca. El lugar se notaba habitado por una familia o alguien muy cuidadoso, estaba bastante limpio, acomodado y era amplio. El sonido del timbre empezaba a enloquecerlo y cuando estuvo cerca se escuchó la clara voz de una persona.
—Gunnie, ábreme de una vez no me hagas buscar las llaves no tengo ganitas. — la voz suave pero algo gruesa de un chico. Pronto la puerta empezó a abrirse. El peli rosa tragó saliva con fuerzas y cuando el pomo giró por completo hicieron contacto visual. Fueron segundos.
Era el chico que estaba al lado de Minhyuk en la discoteca, fácilmente reconocible, apenas alto, de ojos muy rasgados y cabellos rojos. Se miraron mutuamente y enseguida Kihyun le estampó la lámpara, haciéndolo caer al suelo. No iba a olvidar su expresión. Ojos muy abiertos y sorprendidos, labios entre abiertos y cejas alzadas. Claramente el chico no tenía idea qué hacía él ahí y en las pocas milésimas de segundos le vio asustado y temeroso, pero no podía confiar.
Empezó a correr, el Sol lo cegó y aún así sus piernas empezaron a ir más y más rápido. Estaba descalzo, solo con unas medias. Era Seul, estaban en Seul. Conocía la calle, conocía el parque de un costado.
Su corazón empezó a latir desenfrenado y corrió hasta que la gente empezó a rodearlo. Sonidos, música, era tarde y probablemente fin de semana. Pidió ayuda en silencio, pero nadie lo miraba, parecían inversos en su propio mundo y pronto sus piernas le hicieron perder el equilibrio. Se halló a si mismo desmayado sobre la acera. Su corazón incapaz de soportar todo el recorrido.
'A solo tres cuadras del centro de Seúl fue encontrado el desaparecido Yoo Kihyun de hace un mes. Su parte médico es restringido pero como se puede observar en los videos que han mandado los netizens el muchacho se hallaba en clara desnutrición. La familia y amigos aún no han querido declarar.'
Changkyun temblaba en un costado del pasillo médico, luego de un mes estaba abrazado a Hoseok, apretado como si quisiera metérsele dentro. Sus lágrimas no habían parado de salir y el rubio solo le sujetaba, tratando de calmar la respiración, temiendo que terminara desvaneciéndose él también. Su cuerpo estaba débil hace un mes y su mente peor, todo el avance que habían hecho había terminado hecho trizas.
— Deja de llorar. Te hace mal y ya el frijol está mal. Así no vas a solucionar nada, vamos. Solo cálmate, eso es, eres un buen lobito siempre. — le movía un poco, el castaño tenía toda la cara roja y las mejillas infladas tratando de contenerse. Asintió en silencio pero solo dejó de llorar, no se movió en absoluto de su espacio entre los brazos ajenos. Necesitaba que alguien lo apretara hasta que todo el dolor se fuese de su cuerpo y cayera en la realidad de que su mejor amigo había vuelto.
Hyunwoo había llegado quince minutos más tarde por haber estado lejos de la zona. Había acostumbrado a salir a manejar, con la loca idea de encontrarse al menor. Su respiración agitada, su cuerpo temblando y sudado, con el cabello desparramado hacia atrás. La familia del menor estaba en un costado, escuchando al médico hablando. Su condición no era riesgosa, solo estaba anémico, muy flaco y necesitaba reposo. El exceso de ejercicio podía hacerle daño. Habían deducido por las marcas de su cuello, muñecas y tobillos que había estado con movilidad restringida durante todo ese tiempo. Tardaría en volver a normalizarse, pero no se iba a morir y ya muchos lo daban por muerto, con lo cual era mejor que nada.
A la madrugada el peli rosa finalmente abrió los ojos. Los primeros en entrar fueron los policías. Kihyun lloraba pidiendo a su madre, pero nadie podía hablar con él antes de que declarara. Así que no dudó un segundo y lo lanzó todo. Rápido y con tartamudeos, incluso aseguró haberle roto una lámpara en la cabeza. Lo que sea con tal de que lo dejen ver a las personas que ama. Un mes que había parecido un siglo. Ahora lo podía sentir bien en cada poro de su cuerpo.
— Lo siento, pero si esto es verdad vamos a tener que traer a un psiquiatra antes de que puedas ver a alguien. — las lágrimas que Kihyun no había largado durante tres semanas ahora caían a cántaros. Le dolía la garganta de hablar y su voz seguía sonando ajena a él. Y lo peor era que tenía ahí, a una puerta de distancia a todo lo que necesitaba. Lloraba impaciente, se sentía enloquecer. Fueron horas pesadas, peores que sesiones con el proyector. El dolor era mucho más real y poderoso.
— Por favor, déjennos entrar a hablarle. Solo pudimos verlo dormido. Por favor. — la señora Yoo era una mujer menuda y hermosa, sus lágrimas eran igual de dulces que las de su hijo. O al menos Hyunwoo creía eso y pareció tener efecto porque cinco minutos más tarde el médico psiquiatra salió y dejó pasar a todos de a uno.
— ¿Son Hyunwoo está por aquí? — el peli negro no tardó en responder. Lo llevaron a una habitación y en el camino los policías fueron contactados con otros por el comunicador. En la casa en donde Kihyun había estado se encontraba una persona gravemente herida y un supuesto testigo. Habían incautado todo y era claro que el peli rosa había sufrido un secuestro. ¿Por qué? ¿Por qué sin pedir recompensa al menos? Nada tenía sentido y lo tuvo menos cuando las palabras del médico salieron como dagas hacia su cabeza.
'Me temo que ha sufrido un condicionamiento hacía usted. ¿Cual era la relación qué tenían? Cuando les mostramos las fotos fue al único que reaccionó de manera negativa. ¿Quiere escuchar el audio?'
La voz de su pequeño estaba allí en un celular, bajita y arrastrando palabras, parecía que le costaba formular. Lo que le habían hecho, la aparente razón. El dolor que había sentido. No se calló nada. Hyunwoo sintió las lágrimas caer por sus mejillas muy rápidamente, una a una se le arrastraban hasta caer sobre su pantalón.
— ¿Hay solución, no? ¿Quién es la gente que hizo esto? Quiero que mueran en la cárcel. Por favor, necesito verlo. He esperado más de un mes para encontrarlo. — los labios de Hyunwoo se habían hinchado por las lágrimas haciendo que su aspecto se vea completamente adorable, como un oso gigante. Totalmente contrario a su apariencia habitual. El médico le dijo que era demasiado pronto. Así que eso le quedaba, no verlo. No verlo y seguir aguantando con la sola satisfacción de que estaba vivo y no había muerto como muchos decían.
Al otro lado de la habitación, Changkyun estaba arriba de la cama del peli rosa, llorando una vez mas, con un Hoseok enojado que le sujetaba la cintura para que no hiciera peso en la pequeña pulga que ahora parecía más chiquita que antes. Kihyun también llorisqueaba y se abrazaba al chico con cuidado, hundiendo la cabeza en su cuello.
— Changkyunnie, no aplastes a Kihyun por dios. — el castaño se removía tratando de quitar a su novio del medio, quien finalmente le movió al suelo dejándolo abrazar al peli rosa pero con los pies sobre el suelo. El rubio tenía lágrimas en los costados, pero trataba de controlarse, no quería sumar más a ese mar nuevo que estaban haciendo. Las noticias del médico eran buenas y malas por doquier y realmente le preocupaba saber que Hyunwoo no era capaz de verlo. ¿Quién podía ser tan cruel? ¿Quienes eran los causantes de todo eso? Las noticias sobre el culpable estaban a punto de llegar. Y la situación pronto se volvería un nuevo título en las noticias.
Quiero que sepan que me costó horrores escribir todo esto ;0; saben lo mucho que me gustan las cosas rosas y hermosas. Pero 😭 bueno. Esperaremos a ver que tanto tiempo dura la maldad que le hicieron ;0;
Creo que empezaré otro one o two shot Wonkyun. Porque quiero desahogarme (?)
BEBE HERMOSO ;0;
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Café y Lágrima [Wonkyun|Showki]
FanficKihyun es un estudiante de música que trabaja en el restaurante de su mejor amigo, en la zona céntrica de Seúl. Hyunwoo es dueño de una discoteca gay que está a dos cuadras. Hoseok es dueño de otra que está a quince cuadras. Changkyun es estudiante...