Capítulo 44

33 11 11
                                    

POV Patry

—¿Estás segura de que quieres manejar? —preguntó Tommy repetidas veces mientras cargaba a un inconsciente y ensangrentado Ryan sobre sus piernas.

—¿Te puedes callar?, trato de encender esta cosa.

Llevaba un rato tratando de descifrar cómo hacer funcionar al auto, ya que, no teníamos las llaves, aparentemente se le habían caído del bolsillo a Ryan mientras caminaba o en el lapso de tiempo en que ocurrió el accidente.

—¡Listo! —anuncié, luego de unir unos cables tal y como me había dicho Tommy.

—Señor, te pido que nos cuides y mantengas a Patry con los ojos en el camino y las manos en el volante, amén. —dijo Tommy levantando ambas manos.

—Ay, no seas exagerado, he manejado un par de veces. —me quejé mientras quitaba el freno de mano.

—¿Y cuántas veces chocaste?

—Cinco en total, pero no pasa nada, el hospital queda cerca de
aquí. —giré la cabeza para poder verle la cara y efectivamente su expresión era una de horror, lo que causó que me riera escandalosamente.

Pisé el acelerador e inmediatamente todo en mí se tensó, traté de relajarme para que Tommy no notara mi incomodidad, pero no funcionó.

—¿Llegaste a ver qué le pasó? —pregunté, adelantándome a cualquier sermón que me podía dar Tommy.

—No, cuando salí a buscarlo no le encontré por los alrededores del callejón y decidí irme por un atajo a la calle principal, pero antes de llegar me lo encontré ahí tirado y lleno de sangre, no tenía con qué llamar a la ambulancia así que comencé a gritar auxilio y ahí llegaste tú, las personas de esta ciudad son muy extrañas, ven a una persona en esas condiciones y les importa un pepino.

—No tiene sentido... fíjate, su auto estaba en perfectas condiciones y estacionado a un lado, nadie le prestó atención así que no fue un accidente en el que estuviera implicada otra persona, y sólo sus brazos están sangrando, saca tus propias conclusiones.

Hablé con un tono misterioso y parecido al de los miembros del FBI, mientras que buscaba un lugar en el que estacionar el auto lo más rápido posible.

—Discutimos sobre eso más tarde, llevemos a Ryan dentro. —indicó Tommy mientras acomodaba a Ryan en el asiento para luego abrir la puerta.

En camino a la entrada del hospital pude ver a lo lejos que un hombre nos observaba, pero en los dos segundos que me tomó el girarme para anunciarle a Tommy, el hombre ya no estaba.

A paso lento y con la confusión palpitante nos adentramos al hospital e inmediatamente llegaron unos enfermeros y se llevaron a Ryan en una camilla, me quedé con la mirada perdida en el pasillo por el que se fueron hasta que encontré un asiento vacío al lado de una chica rubia.

—Disculpa, ¿está libre ese asiento? —le pregunté ya cuando estuve frente a ella.

—No, mi novio imaginario está sentado ahí.

Por su tono serio solté una pequeña risita y me di la vuelta con la intención de buscar otro asiento, pero una carcajada me detuvo.

—Estaba jugando, mi novio desapareció el mismo día en que le enseñé la prueba de embarazo. —bromeó.

Mis ojos viajaron a su vientre y se podía notar el pequeño bulto, sonreí tímidamente y me senté a su lado.

—¿Así que estás aquí por el chico que trató de suicidarse?

Sus palabras me dejaron helada, había considerado esa idea, pero no pensé que fuera tan obvio ante los ojos de las demás personas, y eso que tan solo le vio por un par de minutos, que fue lo que tardaron los enfermeros en llegar con la camilla.

—¿Por qué piensas que trató de suicidarse? —hice caso omiso a su pregunta.

—Pues eso supuse, tenía los brazos ensangrentados y después de ver 13RW no me quedó otra cosa qué pensar.

—Ya, claro...

Hubo un silencio incómodo entre nosotras hasta que la chica me tocó suavemente la mano y me miró, pude ver que sus ojos eran color verde oscuro y resaltaban varios lunares debajo de ellos, me sonrió de manera tranquila y sorprendiéndome, me abrazó.

—Lamento mucho lo de tu hermano, Patry. —la chica se separó de mí y dejándome con miles de dudas se fue de allí.

—¿Cómo supo mi nombre...?, ¿cómo supo que era mi hermano...? —le pregunté al aire, atrayendo la mirada rápida de varias personas sentadas a mi alrededor.

Me levanté de allí y dispuesta a ir en busca de Tommy le pregunté a la secretaria sobre el número de la habitación en la que habían hospitalizado a Ryan, luego de un pequeño interrogatorio me dirigí a la habitación número 320B, donde me encontré a un Tommy durmiendo plácidamente en una esquina, sonreí para mí misma y volví la mirada hacia Ryan, quien me observaba con los ojos medio abiertos y una expresión cansada.

—Ryan... tú... este, ¿intentaste suicidarte?

El Callejón de Corazones © [COMPLETA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora