No Girls Allowed «JaeYong»

26. Fiesta de Cumpleaños

Las dos enormes fiestas fueron planeadas por el mánager.

La fiesta oficial tomó lugar en el edificio de grabación de la compañía; desde semanas antes, Jae notó los enormes avisos publicitarios alrededor de la ciudad. Se sintió extraño siempre que veía chicas tomándose selfies con los póster de TaeYong en las estaciones de tren, pero intentó adaptarse, y estaba demasiado sorprendido cuando una invitación directa llegó hasta su casa, incluyo un pase VIP.

La mamá de Jae estaba de mal humor acerca de la fiesta, pero DoYoung le explicó que a Jae por sí solo le tomaría una vida entera conocer productores y mánagers, así que de todas formas lo dejó ir.

—Intenta no impresionarlos con tu "R" —dijo cuando detuvo el auto al lado de la compañía, sus palabras llenas de veneno una vez más. Jae tragó en seco.

Dejó el auto y se aferró a la invitación y el pase VIP con fuerza. ¿Era broma?, ¿en serio lo dejarían entrar? Llevaba un traje negro, junto a un pequeño moño con su mejor camisa, Ten había decidido peinarlo con bucles, y aunque Jae se sentía un poco extraño, Taeil y DoYoung le aseguraron que se veía sexy, así que decidió confiar en sus amigos.

La tarde era fría, pero Jae estaba casi que mojado por el sudor cuando llegó hasta la entrada y se detuvo junto a dos gorilones de seguridad.

Carros lujosos aparecieron junto a la alfombra roja y un montón de fans esperaban afuera junto a varios reporteros, de modo que los flash de las cámaras iluminaron la noche con cada aparición de un nuevo artista.

—Aquí —Jae susurró cuando le entregó la invitación a uno de los gorilas.

El hombre la leyó y le dio una mirada al pase que tenía en las manos.

—¿Puedo...? —Jae asintió. El hombre escaneó el pase con una máquina y fingió una sonrisa.

—Por favor pase —dijo alejándose, entonces Jae se dio cuenta de que el único camino a seguir era el mismo de la alfombra roja.

Caminó por ella con piernas temblorosas y algunos flash de cámaras golpearon su rostro así que se movió rápido, ocultando su rostro, terminó estrellándose con un cantante famoso y su novia.

Susurró un suave "pefdón" y desapareció dentro del edificio. Los guardias detenían cada invitado en el camino hasta el elevador y Jae casi temblaba.

La última vez que estuvo allí, TaeYong lo había besado por primera vez, una sensación placentera bailaba en su estómago mientras caminaba tras la pareja al elevador.

Su pase fue revisado cuatro veces más antes de que finalmente entrar a la enorme habitación en el último piso, con candelabros de cristal y largas mesas llenas de comida que él ni sabía que existía. Los gigantes ventanales exponían el contorno del cielo de la ciudad y Jae se sintió en algún otro lugar. Veía celebridades, personalidades de televisión y algunas personas mayores, probablemente, productores. Las paredes estaban decoradas con fotos de TaeYong y sus álbumes de platino estaban colocados sobre las paredes como en un museo.

—Es el futuro de la música en nuestro país —dijo un hombre mayor, quien se detuvo al lado de Jae.

—¿Disculpe? —murmuró el chico.

—Soy David Jacksonville —el hombre alzó su mano y Jae la estrechó.

—JaeHyun —susurró.

—¿Una nueva súperestrella o sólo un trainee? —preguntó el hombre.

—¿Yo? —Jae dio miraditas alrededor y supo que esta actuando súper idiota—. Un amigo de la escuela.

—Interesante... —el hombre lo observó con ojos entrecerrados, Jae sintió que quería desaparecer, pero entonces todos empezaron a aplaudir, y su corazón corría cuando cuatro guardaespaldas llegaron escoltando al invitado más especial de la noche, viéndose de alguna manera hastiado de toda esa locura.

Se veía increíble en una cazadora de jeans lujosa a par con una camiseta de diseñador y jeans negros. Su cabello estaba peinado pero mantenía esa apariencia mullida, recorrió el lugar con su mirada, hasta que encontró a Jae y sonrió ampliamente.

Jae sonrió de vuelta sintiendo algo quemar en sus mejillas.

TaeYong caminó hasta unos hombres de apariencia en verdad importante e hizo una venia. Estrechó un montón de manos y habló con cada persona por unos cuantos segundos, hasta que al fin se detuvo en frente de Jae.

—Estoy tan feliz de que vinieras —TaeYong lo encerró en un abrazo amoroso, tanto, que Jae se sintió como la persona más especial de aquel enorme salón—. La segunda fiesta será mejor —sonrió—. Oh, David —TaeYong hizo una reverencia, cuando se alejó de Jae, que de pronto se sentía muy vacío.

—Hola. He conocido a tu amigo —dijo el hombre, TaeYong miró a Jae.

—Un amigo muy especial. Espero que también me pueda hacer un favor especial más tarde —dijo.

Jae sintió que tenía algo de calor. ¿Un favor especial?, ¿más tarde? Cómo qué... ¿Sexo de cumpleaños?

—Ah, es éste amigo —el Señor Jacksonville alzó sus cejas.

—Si —TaeYong sonrió—. Jae, siéntete como en casa, sé que es difícil, voy a tener mucho por hacer, pero cuando la fiesta oficial acabe soy todo tuyo —TaeYong parpadeó. Jae tragó.

Estaba tan no listo para ser todo suyo. No se había preparado nunca mentalmente.

—TaeYong... Tu regalo —dijo estirando su mano con una pequeña bolsa fuera.

La bolsa había sido capciosamente revisada por los guardias en el camino hasta allá, y Jae sintió que estaba haciéndolo todo mal.

—Los regalos después —TaeYong sonrió tan típico de él y caminó hacia el resto de los invitados.

—Ven, voy a presentarte gente importante —el Señor Jacksonville palmeó el hombro de Jae y desde que el chico no logró hacerse mejor compañía sólo lo siguió.

Así que acabó conociendo al dueño de la compañía y CEO, dos productores principales, un mánager de giras y unas cuantas de sus celebridades favoritas. Pronto se encontró en una mesa redonda con el Señor Jacksonville, una supermodelo, y D.O de EXO, uno de los más importantes cantantes del país.

El CEO dio un discurso y le contó a los invitados sobre el segundo álbum de TaeYong "La Vida Comenzó Aquí", Jae podía sentir su corazón fanboy latir ruidosamente.

—El álbum estará listo en otoño, y antes de que termine el año será lanzado —dijo, Jae casi tenía lágrimas de emoción—. Ahora, escuchen a nuestra estrella —el hombre aplaudió, los asistentes corrieron tras bambalinas a prepararlo para el show.

Pronto, TaeYong salio a escena y rapeo, elevando el ambiente del lugar, mientras que Jae no podía hacer que sus manos dejaran de aplaudir.

Estaba tan feliz por ser la única persona fuera de la industria musical que había sido invitada. Su madre le envió un mensaje u preguntó cuánto más tardaría, a lo que Jae dijo que le tomaría mucho más tiempo.

Se sintió orgulloso, cuando TaeYong acabó con el mini concierto y agradeció con una reverencia.

La fiesta oficial tuvo fin, Jae habló con las personas en su mesa, hasta que un sonriente TaeYong se le unió. Se movió hasta una silla vacía justo al lado de Jae y apretó su mano bajo la mesa.

—Lo voy a secuestrar un momento —anunció, se puso en pie mientras Jae se volvía terriblemente rojo, pero aun así lo siguió.

Dejaron el salón de baile, se movieron a través de largos corredores hasta el ascensor. Lo tomaron hasta el piso de salas de práctica y estudios y Jae tragó.

—No hay cámaras en los estudios —susurró TaeYong. 

Jae difícilmente y era capaz de seguir respirando.

¿Dolería?, ¿sería genial?, o, ¿sería un desastre?