No Girls Allowed «JaeYong»

30. El Nuevo Rey

Y así, el primer día de escuela llegó y ellos se encontraban en los pasillos de nuevo. El año pasaba rápido y como los exámenes finales se aproximarían, tenían clases adicionales en sus asignaturas favoritas. Los chicos necesitaban escoger entre la lista que les habían entregado y Jae se encontraba sentado en un círculo sobre el suelo, a su lado DoYoung y Taeil y en frente Ten, cuando trataba de poner un símbolo al frente de todas las clases que le gustaría estudiar con más esfuerzo este año.

Cada vez que algún estudiante nuevo aparecía al inicio del pasillo él alzaba la cabeza con nerviosismo, pero TaeYong no había llegado aún. Vio a Hansol y Johnny, ambos viéndose extrañamente perdidos sin Yuta, pronto, decidieron pasar el receso caminando detrás de Mark como sombras, así que Jae asumió que necesitaban un líder y estaban dispuestos incluso a aceptar a alguien de primer año en reposición de Yuta.

—Y listo —DoYoung, quien había hecho un plan detallado de todas las actividades que quería hacer ese año fue el primero en estar listo, pero Jae comenzaba a sentir que su cabeza dolía de nuevo, como en la fiesta de TaeYong.

Quería elegir técnica vocal y danza pero no estaba seguro de poder manejar ambas.

Una nueva persona apareció en la cumbre de las escaleras y Jae miró, pero se decepcionó una vez más, pero entonces volvió a ver, dos veces, oh, él había visto esa cara antes. Observó al delgado chico, quien miró del papel en sus delgadas manos a los corredores a su alrededor tenía cara de estar completamente perdido. Jae recordó al chico con el que Yuta lo había forzado a hablar en la fiesta, pero ahora su lindo cabello oscuro se había ido, y Jae podía notar hebras de cabello rubio-pollito trepando por su gorra de baseball, sin embargo, nunca en un millón de años ese color iba a poder encajar con la siempre bronceada piel y los enormes ojos oscuros.

—Espefen un momento —Jae se puso de pie y se apuró hasta el chico.

Se detuvo justo a su lado y el niño necesitó un momento para reconocerlo.

—Fiesta —murmuró, Jae sonrió porque el chino había aprendido una nueva palabra—. JaeHyun —repitió su nombre y Jae asintió.

—Es Jae pafa los amigos —dijo.

—Amigo... ¿Tú? —el chico mostró todos sus pequeños dientes en una sonrisita y Jae asintió.

—¿Puedo? —Jae señaló la hoja en sus manos y Sicheng accedió.

Entonces Jae tomó el pedazo de papel, leyéndolo. Resultó ser que eran compañeros de clase y Jae palmeó su hombro llevándolo hacia su grupo de amigos.

—Este es Sicheng, mi amigo de china no entiende absolutamente nada pefo es muy lindo —dijo Jae y Sicheng asintió con energía.

—Hola —Ten hizo una reverencia y DoYoung se puso en pie para estrechar su mano a la par que soltaba un hola en chino, lo que causó que Jae abriera su boca de lado a lado.

—Quería ser amable, es la única palabra que conozco —explicó su amigo, mientras el chico rubio daba brinquitos y aplaudía con sus manos felizmente, porque acababa de escuchar su propio idioma.

—¿Qué estás haciendo acá? —le preguntó Taeil.

Pero Sicheng miró a Jae cuestionando y él suspiró. Sería un año largo.

—Tú aquí... ¿Por qué? —dijo DoYoung enfatizando cada palabra y Jae negó.

—Baile, trainee, DL Records —respondió el chico sonriendo amplio.

—Vaya, este pequeño no sé ni contar hasta tres es trainee en la compañía de TaeYong —Ten abrió su boca—. Me rindo en la vida —añadió y arrojó su lista por el corredor.

—¿Mal? —preguntó Sicheng mirando a Jae.

—No —Jae negó con la cabeza—. Está un poco ffustfado con la escuela —explicó Jae, sabiendo que de todas maneras el chico no iba entenderle, pero el rostro de Sicheng se iluminó y él asintió una vez más.

—Aprender tu lenguaje. Mal —hizo una mueca.

—Ay, no te pfeocupes, vas a hablaf y entendef pfonto —Jae dio una palmada en su hombro.

—¿Es de primer año? —preguntó DoYoung.

—No, tiene mi edad —murmuró Jae, los ojos de DoYoung se abrieron allí.

—Pero parece como de trece —el pelirrojo negó—. Creo que tenemos otro problema para añadir al grupo de los perdedores, bienvenido seas a casa, Sicheng —DoYoung imitó la acción de Jae have unos segundos y le envió una sonrisa adorable a Sicheng.

Jae le indicó al chico que se sentara y pronto retornaron a las listas, Jae puso una equis junto a la clase de canto y la de baile.

—Algo bueno es que Yuta se ha ido, y va a ser genial sin él —comentó Ten apoyado en la pared—. No bullying, no bromas estúpidas y nada de molestarnos.

—Si —Taeil, Jae y DoYoung estuvieron de acuerdo.

Se sentía tan bien estar sin Yuta, se había ido hace sólo una semana y ellos no habían siquiera escuchado una sola mala palabra en la escuela.

—¿Y quién es ese? —preguntó Taeil mirando hasta las escaleras, los chicos siguieron su mirada.

Jae se giró y dio de tope con un par de zapatilla de diseñador, pantalones negros rasgados a juego con una chaqueta de cuero, gafas oscuras, y una ancha sonrisa como para comercial de dentífrico. El chico tenía una contextura fuerte y cabello café chocolate. Se movía por el corredor como si la escuela estuviera en la palma de sus manos, y DoYoung sólo fue capaz de dejar su mandíbula descolocada.

—Ni idea, alguna otra súperestrella que habrá sido enviada de vuelta al colegio —susurró Ten.

—¿Ese? —Sicheng habló, la atención de todos encima suyo—. China también, Kun, trainee DL Records —comenzó a explicar, Jae pasó sus ojos de Taeil a Ten, hasta DoYoung.

—Pues no se ve muy amable —susurró Ten, Jae reconoció que era verdad.

Tal vez se trataba de la sonrisa falsa y la manera en la que caminaba tal vez el chico era tan buena persona como Sicheng, pero de alguna forma Jae tuvo un presentimiento terrorífico recorriendo su columna vertebral hasta la base.