No Girls Allowed «JaeYong»

8. Pelea En El Río

Jae quería sentarse al lado de TaeYong, pero una de las amigas de Lauren ya estaba allí cuando subió al bus, así que no le quedó de otra más que obedecer a Ten, palmeando el asiento libre a su lado.

Encaraban las espaldas de Hansol y Johnny, ya que eran los últimos en entrar, sin embargo, Jae tenía buena vista de su pequeño flechazo y Rita. La chica se deslizó cerquísima a TaeYong causando a Jae hervir en celos, pero se la pasó mirando la pantalla de su teléfono, mientras Lauren y Yuta se llenaban de babas dos asientos delante al resto del grupo.

—¿Ella lo ama? —preguntó Jae observando a la pareja.

—¿Que qué? —Ten se burló—, sólo se divierten, además, Yuta es genial en la cama —Ten hablaba de ello como lavarse las manos, y Jae tomó un respiro.

El bus iba despacio, y se estancó con al de tráfico en el centro de la ciudad, así que Jae se calló y observó a TaeYong y a la chica a su lado. Hacia todo lo posible para captar su atención, pero él era como una roca.

—Yo creo que TaeYong es gay, no le interesan las chicas en lo absoluto —susurró Ten y Jae sintió que sus mejillas empezaban a calentarse.

—Nope —negó con su cabeza.

—Ay vamos, ella es atractiva, un chico normal al menos le miraría las piernas, tiene lindas piernas —Ten levantó sus cejas.

—Sipe, muy lindas —Jae asintió.

Ten soltó una risa, pero entonces un mensaje apareció en su teléfono y él lo abrió. Jae dio una mirada para ver a una chica en la pantalla, y Ten escondió el texto rápido, se concentró en la ventana y mordió sus labios. Jae vio lágrimas formarse en el borde de los ojos del chico.

—¿Quién es ella? —preguntó Jae.

—Mi hermana —Ten negó con la cabeza—. Estoy tan lejos de casa... —tomó un profundo respiro—. Como sea.

Jae estaba atónito al descubrir, que incluso el estúpido matón también tenía sentimientos. Todo el mundo era traicionado por la fe en su propio universo e incluso cuando todos los demás experimentaban el mismo dolor, todas las personas se sentían solas en la vida.

—¿Tienes hermanos? —preguntó Taeil.

—Nope —Jae negó.

—Debes sentirte solo —susurró el otro chico.

—Algunas veces, aún así, sigo teniendo a DoYoung y Taeil —Jae dijo el último nombre sintiéndose más que preocupado.

—Yo sólo tengo una hermana y la extraño mucho, y a mis padres, y mis abuelos —Ten miró fuera de la ventana—. Pero la escuela de artes puede acercarme a cumplir mi sueño, para ser un cantante, así que estoy dispuesto a aceptar el costo.

Jae asintió, en verdad que no sabía qué decir.

El bus se detuvo treinta minutos más tarde y ellos caminaron hacia el río. El sol estaba cayendo y enormes flores de loto comenzaban a mostrarse.

—Es tan hermoso —susurró Ten.

El chico se mantenía al lado de Jae, detrás de todo el grupo, Hansol alzaba a una de las chicas y bromeaba, diciéndole que la lanzaría al agua, lo que causó mucho ruido.

Yuta y Lauren se detuvieron en unos barandales tomando selfies, mientras TaeYong intentaba deshacerse de la chica rubia, que le hablaba todo el tiempo.

Pronto el rapero se acercó hasta Jae y Ten con su acosadora personal.

—¿Cómo vas? —lo miró.