El poder en uno

Destino

Se miraron en silencio hasta que a un lado de él apareció la mujer que inició ese desastre: Aledis.

Ella entrelazó sus dedos y puso la otra mano en el pecho de Ian mientras veía a Sakura con burla.

—Mira, amor, ella vino a nosotros tal como Reiku predijo —se burló.

Sakura los vio con dureza.

—Fue real, ¿eh? —gruñó con ojos entrecerrados.

Vio un destello de algo en la mirada de Ian, pero desapareció rápidamente.

—Tan real como lo de Nessa y Zia... Sabes que está viva, ¿no? —preguntó Aledis con ironía.

Sakura miró con sorpresa a Blai y él confirmó la información con un movimiento de cabeza.

Aledis bostezó y le dio un arma a Ian, era igual a la que Egan usó en el hotel.

—Por si empiezan a regresar —murmuró, luego la vio con desagrado—. No es nada sin sus poderes.

Sakura la vio con dureza y la otra desapareció en las sombras, luego miró a su alrededor. ¿Dónde estaba Egan?

Ian le hizo un ademán con el arma para que se levantara, y aunque miró a Blai con preocupación, obedeció.

Si casi ex sacudió la cabeza y la tomó del brazo con brusquedad.

—Eres predecible, sabía que vendrías aquí apenas pudieras.

Sakura lo vio con enojo.

—¿Por qué me ayudaste a escapar?

Ian prácticamente la aventó al suelo, ella giró y lo miró con cierto odio.

—Sabía lo de sus poderes, Reiku no me creyó, debía demostrarlo.

Ella empuñó las manos, lo que daría por tener alguno de sus poderes en el momento.

—Por eso el avión llegó ahí —murmuró.

Ian la vio impasible, Reiku había corregido el error y ya no sentía nada por ella.

—Tarde o temprano se iban a encontrar, sólo les di un empujón —alegó con una sonrisa.

Sacó su celular y lo miró, Reiku comenzaría el proceso con Zia en cualquier momento.

»Tienes suerte —continuó al apuntarle con el arma—. Tu amado tiene toda una vida de sufrimiento por delante, tú tendrás la fortuna de morir en el acto.

Sakura levantó el rostro en ademán de desafío, Blai presenció todo desde su posición con impotencia, estaba tan débil que no la podía ayudar.

Ian bloqueó su aparato y lo guardó, era hora.

—No te preocupes, esto no dolerá —se burló y ella no vaciló.

Pero antes de que disparara, un abundante chorro de agua apareció y lo llevó contra la pared. Sakura volteó con sorpresa, Egan tenía la mano extendida y de ella fluía el agresivo líquido.

Ian hizo la cabeza hacia un lado para evitar ahogarse y Egan subió un poco su mano para hacer justo eso, pero antes de alcanzar el rostro de su contrincante, el lugar tembló y se escuchó un gran estruendo a lo lejos, el gemelo se fue de lado e interrumpió su ataque.

Tierra cayó del techo que se cuarteó y las luces se apagaron.

Sakura aprovechó la oscuridad y gateó hasta donde pudo vislumbrar la figura de Blai.

—Tienes que detenerlo —susurró cuando ella lo ayudó a incorporarse.

Sakura asintió rápidamente, volteó a si espalda y no encontró a Ian. El lugar estaba totalmente oscuro pero luz entró desde la puerta.