"Escapando te encontré" Victuuri [Yuri On Ice]

Capítulo 25: Lo que nos cuesta decir

Sí que tardé, pero aquí tienen un nuevo capítulo, estos días estuve medio perdida en mi misma, algo deprimida y prácticamente ahogándome en un vaso de agua. En fin, espero que les guste y que no tenga tantas faltas de ortografía n.n

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Yuuri miró con atención al peliplateado, pero nada más por momentos ya que cada tanto desviaba su mirada por la vergüenza que le había causado lo que habían hecho momentos antes y ni él sabía por qué motivo había acortado la distancia para... besarlo. Estaba seguro que sus mejillas estaban extremadamente rojas, sentía un pequeño cosquilleo en sus labios y pensaba que el corazón se le iba a salir del pecho por lo acelerado que estaba. 

Ese había sido su primer beso aunque hubiera sido solo un pequeño roce, era un beso de todas formas ¿Contaba cómo uno no? Suspiró y miró nuevamente nervioso al ojiazul, sin haberse dado cuenta del momento exacto en el que había vuelto a apartar su mirada del otro chico. No sabía por qué estaba nervioso, si era por el tema del beso o por lo que había sentido y pensado Víctor al respecto o por lo que les iba a contar el otro patinador, lo más probable era que se tratara de una mezcla de todo eso.

El pelinegro estaba siendo paciente para saber por una vez lo que tanto le costaba decir a esa persona que hacía que sus emociones se descontrolaran y provocara un desastre en su mente, también si estaba a su alcance poder ayudarlo o al menos darle ánimos y apoyarlo. El japonés vio como el mayor desviaba por un momento su mirada de la de él, algo que no solía hacer y luego suspiraba, parecía tener una pelea interna con él mismo y se percató un poco de los nervios que tenía por los movimientos que éste hacía. Por un instante pareció que el ojiazul iba a comenzar a hablar, pero en el momento de abrir su boca ni una palabra salió, ningún sonido, nada de nada. Eso solamente logró que el menor se preocupara aún más de lo que estaba, desesperándose un poco.

Víctor se regañaba mentalmente, ya había decidido contarle todo a Yuuri, sin embargo le costaba decirlo ¿Tan difícil le era hablar? ¿Por qué justo tenía un nudo en la garganta? Nunca le había costado decir algo, no tenía problemas al respecto y a veces los demás hasta se cansaban que hablaba tanto, por ese motivo lo que le pasaba no era para nada normal. Quizás debía tranquilizarse, al parecer no estaba de esa forma, algo que no se había dado cuenta o solamente lo ignoraba... había muchas cosas que no prestaba atención para nada y más si era algo que lo llegara a afectar. También estaba la forma con que lo veía el pelinegro, esa mirada tan atenta y penetrante que le hacía sentir que podía llegar hasta su alma y leerla con facilidad, aunque todavía no le quedaba claro si este podía interpretar en realidad lo que mostraba su interior.

- ¿Estás bien Víctor? Te ves perdido en ti mismo- Dijo Yuuri preocupado mientras reprimía el impulso de acariciar el rostro del mayor.

- S-sí, estoy bien- Dijo el ojiazul en voz baja, para después aclararse la garganta.

- ¿Seguro....? –Lo miró sin creerle de verdad-Sé que hay cosas que nos cuesta decir y...

- Yuuri- Lo interrumpió, para luego estufar- Estoy bien, yo puedo hacerlo- Dijo Víctor, no era como si no fuera capaz de hablar, solamente había sido algo que le había pasado de improviso.

- Entonces...

- Yuuri, no me apures- Lo interrumpió nuevamente mientras fingía estar molesto, haciendo que el menor riera levemente.

- Bueno, te escucho- Dijo el pelinegro, para después sonreír.

- Supongo que tendría que comenzar a explicar lo de... la mejilla – Dijo el peliplateado mientras señalaba esa parte de su cara- El... golpe que me dieron...