Trolls

Lectiones Amoris 1 [corrección🆙]

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La semana había pasado volando, Poppy no había estado más que contenta con aprender con la reina, cada tarea tenía un perfecto 💯, ahora que aprendió el abecedario y las vocales, el lunes vería como formar palabras.

El jueves, las aves le dijeron que si ella quería, que no tuviera la pena de pedir su ayuda si se complicaba con algo, Poppy les agradeció con un sonrojo, aprendía paso a paso, como con manzanitas y peritas.

Cuando tocó la puerta del hogar de la reina, se arrepintió de haberlo hecho, el que abrió fue Ramón quien tenía una cara de amargura y enojo horrible. Aprendió a ser "amable" con las aves y la reina pero ¿tendria que hacer una excepción con Ramón?

Ella a punto de hablar, Ramón la dejó pasar, él al momento de cerrar la puerta se dirige a otro lugar, Poppy fue al cuarto donde eran sus clases, entró, acomodó sus cosas y esperó a que la reina llegase, pero no, Ramón entro y en la mesa puso un enorme libro que hasta la mesa tembló.

- mi abuela no está, estará afuera unos meses, así que yo seré tu maestro a partir de ahora, no acepto errores, no puedes preguntar nada, tus trabajos tienen que estar impecables y por cada error romperé tu hoja

Poppy asintió con ira en los ojos pero también con miedo.

- bien, comencemos...

Odiaba a Ramón, simplemente lo odiaba, Ramón le dijo que copiara tal cual un texto de 30 lineas, ella con mucho esfuerzo trató de hacer su letra lo mejor posible, pero el resultado fue, bueno...

Le dolían los ojos, a cada rato se tallaba cada uno para ver mejor, pero el picor era fuerte, no se había dado cuenta cuando Ramón le arrebató la hoja, este miró su trabajo con total desagrado y frente a ella lo rompió.

- está horrible, vuelve a hacerlo

Poppy se levantó de la silla rapidamente y se hincó ante los trozos de papel rotos, ella quería llorar,

- pe-pero Ramón...

- harás lo que yo te diga o, puedo decirle a mi abuela que te deje de enseñar, tu decides - dijo Ramón saliendo del cuarto

Ella se levantó llorando, tomo otro papel e inició a escribir otra vez, en la hoja caían sus lágrimas, el ardor pasó a irritación, no podía tener los ojos abiertos, tenía los ojos entrecerrados y con lágrimas, así menos podía ver.

Unos minutos despues regresó Ramón y su presencia no ayudó para nada, se sentía impotente y débil, cuando término, Ramón le quitó nuevamente la hoja y la vio, igual que al inició la volvió a romper.

- ¿que tan difícil es hacerte entender que tu letra es horrible?

Poppy bajó la vista no dejaría que la viera llorar, no de nuevo.

- los niños trolls tienen mejor caligrafía y ortografía, tu por otro lado apestas para algo tan fácil

Ramón iba a dejar el cuarto, cuando fue empujado a la pared, su rostro y sus manos estaban sujetas, volteó su rostro y vio a Poppy quien le miraba con rabia.

- no me conoces, nadie en todo el bosque me conoce ¿con que derecho me dices esas cosas? ¡Tu no has pasado lo que yo he vivido!

- ¿¡entonces porque sigues igual!? ¡Si querías aprender lo basico, debiste pelear por ello! ¡Eres una conformista y apática!

- ¡mentira! ¡Siempre peleé por mi y para mi, ellos no quisieron darme la oportunidad! ¡Tu aquí lo tuviste todo porque eres "alguien importante" un titulo no dice nada si tienes la capacidad para gobernar y dirigir la aldea!

Ramón liberó sus manos, se dio la vuelta y ahora el rostro de ella chocaba con la pared.

- ¡tu no sabes mi preparación para ser rey, yo mismo me auto-eduque y estoy muy orgulloso de eso! ¡Tu decidiste alejarte de tu gente, tu los despreciaste y los hiciste a un lado!

- ¡porque ellos hicieron lo mismo! - Poppy lloraba de rabia - ¡toda mi niñez viví en el bosque, ninguna escuela me aceptó por ser gris, no tengo una identidad que diga quien soy!

- ¡fue tu culpa por  no buscar ayuda!

Ramón jaló su cabello y ella chilló dolorosamente, el troll azul vio que entre sus dedos había tiras y tiras de hebras grises, a ella se le estaba cayendo el cabello.

- vete ya, solo he perdido mi tiempo con una ignorante como tú

Ella salió corriendo de la casa, llegó a su casa árbol y se encerró en todo el resto del día y otra vez, no había comido nada, lo más probable es que despertaría en la madrugada y como siempre, sin antojo de comida.

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