Mi Sirvienta

Capítulo 21

*NARRA JENNIFER*

Sentí como Samantha se tensaba y tomaba mi brazo con fuerza.

-No dejes que me lastime de nuevo Jenn, por favor- susurró y hablo tan rápido que casi no le entendía.

Me separe lentamente de ella y la coloque detrás de mí y mire a Christian seriamente.

-¿Qué haces aquí?- dije firme y lo mire con los ojos entrecerrados.

-Vine a ayudarle a tu madre. ¿Me vas a explicar que está pasando?- dijo desesperado. Dejó las bolsas en el suelo con brusquedad y miro con veneno a Samantha.

-Nada que te importe- dije y tomé fuertemente la mano de Samantha. Mire a mi madre que estaba en silencio en el marco de la puerta de la entrada principal.

Lamentaba mucho que estuviera pasando por todo esto y más en su propia casa.

-Jennifer, no empieces. Dime ahora mismo porque te estabas abrazando con esta....- dijo y calló para mirar por mi hombro a Samantha.

-¿A esta que? Vamos dilo- dije retándolo.

-A esta maldita per*ra que arruinó mi vida y mi matrimonio. ¿Ya te vino a contar el chisme?- dijo mirando a Samantha con veneno. Esta sollozó detrás de mí.

-Eres un maldito cobarde e irrespetuoso. Que no se te olvide que es una mujer a la que le estás diciendo eso que sería lo mismo si me lo dijeras a mi, que también soy mujer. ¿Acaso dejaste que te explicara su parte de la historia?- dije mirándolo mal. Este había callado por completo, no mostraba ninguna emoción en su rostro.

-¿Le contaste estupida?- dijo de mala gana y se acercó para tocarla. Pero claramente no lo permití.

-No des un paso más si no quieres que te reviente las bolas- dije cubriendo a Samantha que sollozaba fuertemente.

-¿Por qué mier*da la defiendes? ¡Ella arruino nuestro matrimonio!- gritó y tomó sus cabellos frustradamente.

-¿Y a ti por qué mier*da se te ocurrió golpearla? ¡Es una mujer! ¿Igualmente me golpearías a mí también?- dije y lo mire dolida. Este negó con la cabeza sorprendido.

-Nunca te tocaría amor, nunca en mi pu*ta vida. Eres mi vida, jamás te tocaría ni un solo cabello sin tu permiso- dijo y tomo mis mejillas entre sus manos.

-Entonces, ¿por qué la golpeaste Christian? Eso es un gran delito, fácilmente ella te podría demandar por haberla tocado pero no lo hizo porque te ama!- dije mirándolo mal y quite sus manos bruscamente de mi cara. Este suspiro fuertemente.

-No lo hizo, no porque me amara, sino porque yo le dije que no lo hiciera. Si me enteraba que le decía a alguien la mataría con mis propias manos- dijo y la miro con veneno.

-Todavía tiene tiempo- dije mirando a Christian fijamente. Este me miró incrédulo.

-No lo haré- dijo Samantha con miedo. -No lo haré porque no quiero tener más problemas. Sé que Christian nunca te tocaría Jenn, él lo acaba de decir, así que no quiero que él se quede por muchos años en la carcel, quiero que disfrute de su familia y de su matrimonio. Yo después de este día, desaparece para siempre- dijo y nos miró a los dos con tristeza.

-Esta bromeando. La conozco y sé que es una maldita zor*ra que miente en cada momento en el que tiene oportunidad- dijo Christian y miró fijamente a Samantha y después me miró a mi.

-¡No es una broma! Te puedo jurar que después de este día no me volverán a ver nunca más. Me iré muy lejos de aquí- dijo mirando hacia el suelo.