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POV Omnisciente

Luego de aquél incidente, el pequeño moreno y el demonio de este andaban siempre juntos. Las únicas veces que se separaban, era cuando Dark Jaime quería ver si sus amigos estaban bien y cosas así, y cuando Jaime humano tomaba el control del cuerpo.

Habían pasado cuatro meses desde aquella marcha LGBT, en el cual en ese tiempo tuvieron muchas citas con el moreno y los dos estaban encantados con el otro.

Claro que todavía no le decían nada al enojón humano, porque lo encontraban más sencillo que decirle y que comenzara a decir que el demonio había manipulado al moreno o algo así. Este último de verdad quería a Jaime, y si es que no estuviera loco por Dark, este hubiera sido su pareja ideal.

Eso sí, estaba algo confundido.

Jaime y Dark usaban el mismo cuerpo, entonces había una posibilidad de que estuviera atraído también por el primero en ser nombrado?

Claro que esa duda no se la había dicho a Dark, con el cual todavía no sabía qué eran pero tenían algo, casi formal, así que eso no le importaba.

El pequeño moreno, ese día, sintió unos besos en la parte de atrás de su cuello, causando que comenzara a despertar para luego sonreír.

-Despertaste, cariño?.-Preguntó Dark, ya que no podía ver el rostro del moreno porque este le estaba dando la espalda.

-No.-Respondió Nicolás, provocando que su demonio sonriera un poco.

-Qué lástima, porque le tenía una gran sorpresa a mi pareja pero creo que no importa.-Dijo Dark Jaime, como si en verdad no importara, causando que el pequeño moreno se girara de inmediato y que lo mirara.

-Estoy despierto.-Dijo el moreno, observándolo por unos segundos y acurrucándose contra él.-Qué sorpresa?

-Interesado.-Murmuró el enojón, dándole un leve beso en la frente para después desaparecer, causando que el moreno se quejara.

-Mi escaldazono demoníaco.-Susurró el pequeño moreno, abrazándose a sí mismo y cerrando los ojos por unos segundos.

A los pocos minutos, sintió como alguien se acostaba al lado suyo otra vez, causando que abriera los ojos y viera a su demonio. De inmediato notó como este último le estaba entregando un anillo, provocando que se sorprendiera en el instante.

El anillo era completamente negro, igual que los ojos de Dark Jaime, haciendo que sonriera un poco y que lo tomara para observarlo.

-No es un anillo cualquiera.-Dijo Dark, informándole aquello, con una pausa.-Nadie tendrá un anillo igual a este porque me demoré mucho tiempo en colocarle algo especial.

-Qué cosa?.-Preguntó Nicolás, bastante curioso y encantado con el regalo de su demonio.

-Colócatelo y pone tu mano encima de mi torso.-Dijo Dark Jaime, no diciéndole nada más mientras sonreía un poco.

Nicolás se colocó el anillo para después hacer lo que Dark le decía, causando que notara como ahora había una marca que decía "N.G.".

-Tiene algo de mis poderes.-Dijo el enojón, explicándole, tomándose un momento para luego seguir hablando.-No todos, pero te van a servir de mucho.

-Pero te quitó algo de poder?.-Preguntó el moreno, completamente asombrado por la sorpresa de Dark.

-No, amor.-Respondió el señor Navarro, diciéndole la verdad a su moreno.-Así que tranquilo.

-Espera, te marqué como tú lo hiciste conmigo.-Dijo el pequeño moreno, recién dándose cuenta de aquél detalle.

-Me pareció injusto que tú no más la tuvieras, y como sé que a veces te incómoda eso, yo quise una también.-Dijo Dark, siendo sincero con él.-Mucho mejor que un tatuaje.

-Muchas gracias, Dark.-Dijo Nicolás, con una pausa.-De verdad, no era necesario.

-Lo era para mí.-Dijo el recién nombrado, acercándolo más a él.-Te gusta?

-Claro que sí.-Respondió el moreno, como si aquello fuera completamente obvio.-No me lo quiero sacar nunca.

Dark besó levemente la mano del moreno para luego acariciar esta.

-Me alegro que te haya gustado.-Dijo Dark Jaime, observándolo por varios segundos para luego acercarlo más a él.-Sigues teniendo sueño?

-No.-Contestó el pequeño moreno, siendo honesto con él, tomándose un momento.-Después de esta sorpresa, ya no. Eso sí, estoy algo molesto contigo.

Los ojos de Dark se volvieron oscuros y su piel más pálida sin que se diera cuenta.

-Por qué?.-Preguntó el enojón, en un tono neutro para que no se le notara la preocupación.

-Te fuiste justo cuando te estaba usando de escaldazono y tuve que estar minutos sin ti.-Dijo Nicolás, provocando que Dark Jaime se relajara al escuchar que no era nada serio.

-Pero fue para buscar tu anillo.-Dijo Dark, diciéndole la verdad a su pareja.-Y me demoré porque estaba en el Infierno, literalmente.

-Fuiste al Infierno? No creí que en verdad podías ir.-Dijo el moreno, bastante sorprendido por haber escuchado aquello.-Cómo es?

Dark lo observó por varios segundos y habló.

-Es un lugar al cual nunca te quiero llevar.-Dijo Dark Jaime, tomándose un momento para luego seguir hablando.-No hace calor, como todos lo dicen, es un lugar más bien frío, pero no cualquier frío, sino ese que tú crees que te llega hasta los huesos y cada parte de ti. Hay muchas como... habitaciones pero que no son cómodas y sólo sirven para torturar a gente en realidad hasta que desean no sentir más y... si es que tienen suerte, se convierten en demonio.

-Y si no la tienen?.-Preguntó el pequeño moreno, mirándolo por varios segundos, queriendo saber aquello ya que nunca habían hablado de eso.

-O los siguen torturando por la eternidad, de diferentes formas y mucho más dolorosas, o los desechan en el Purgatorio.-Dijo el enojón, acariciando la espalda de su humano y acercándolo más a él.-Así que nunca te haré un tour por ese lugar.

-No es que quiera ir tampoco.-Dijo Nicolás, siendo honesto, no queriendo imaginarse un lugar así.

El pequeño moreno se acurrucó contra él mientras que Dark lo tapaba más para después abrazarlo.

-Te quiero.-Murmuró el moreno, haciendo que Dark Jaime se tensara sólo por unos segundos para luego relajarse.

-Yo también te quiero.-Dijo Dark, después de varios segundos, siendo también la primera vez que le decía algo así a alguien más.-Más que nada en el mundo y eternidad.

El pequeño moreno lo observó por varios segundos y le dio un leve beso en los labios para después abrazarlo.

Demons (Jainico).Donde viven las historias. Descúbrelo ahora