Demons (Jainico).

19.-

POV Omnisciente

Dos semanas después

Las cosas estaban muy tensas en realidad en la casa de Nicolás, la cual era de Dark. Manuel no se iba de esta nunca, menos Edgar, y obviamente Jaime vivía ahí, así que el moreno evitaba salir de su habitación mientras estos siguieran en el living o simplemente abajo.

El pequeño moreno, ese día, bajó la escalera sólo para abrirle la puerta a sus nuevos amigos, a los cuales había invitado para no sentirse tan solo.

-Así que estos son tus amigos.-Dijo Manuel, mirando mal a todos ellos mientras notaba como uno, quien era Gabe, escondía algo detrás suyo.

-Sí, ellos son.-Dijo Nicolás, casi gruñendo, tomándose un momento para luego seguir hablando.-Los que no me golpean.

Fernando frunció el ceño pero no dijo nada.

-Vamos arriba.-Dijo el moreno, guiándolos mientras notaba como sus mejores amigos miraban atentamente a los nuevos.

-En serio? Traes droga acá?.-Preguntó Edgar, intentando no enojarse más de lo que ya estaba.

-Sí.-Respondió Gabriel, no teniendo miedo del ruloso para luego reír un poco, por lo tenso que estaba este para después subir.

-Lo mataré.-Gruñó Manu, sintiendo una especie de furia en todo su cuerpo, combinado con impotencia por no poder alejar al moreno de ellos, y del mundo de las drogas en realidad.

-Inténtalo, cariño!.-Gritó Gabe desde arriba para después cerrar la puerta de la habitación del pequeño moreno.-Agh, esto has tenido que soportar todo este tiempo?

-Sí.-Respondió Nicolás, siendo completamente sincero con él mientras se recostaba en la cama, provocando que todos hicieran lo mismo, cayendo apenas.-No había ido a la casa porque no quería aprovecharme o algo parecido, así que decidí esperar un poco.

-No tuviste que esperar, Nico, hubieras ido no más.-Dijo Fernando, siendo sincero con él.-A ninguno nos hubiera parecido como si te estuvieras aprovechando, mucho menos si nos hubieras explicado lo que pasaba acá.

-Y bueno... creí que podría dormir si es que ustedes están.-Dijo el moreno, con una pausa.-Suena estúpido pero... siento que ustedes no me dejarían.

-No lo haremos.-Dijo Crowley, por fin hablando, levantando un poco más la cabeza para verlo.

-Y si quieres, duerme no más.-Dijo Balthazar, también hablando finalmente, con una pausa.-Pero colócate al medio para que te hagamos un sándwich.

El moreno rió, algo cansado y lo hizo, sintiendo como lo abrazaban de inmediato, y que los que quedaron en las esquinas, abrazaron a los que estaban al lado del pequeño moreno.

El pequeño moreno se sintió algo relajado y se acurrucó contra Gabriel para después poder dormir tranquilamente por fin.

Al principio, ninguno de sus nuevos amigos tenía sueño, pero al ver al moreno tan tranquilo y pacífico durmiendo, se relajaron y durmieron sin darse cuenta en realidad.

-Te juro, Edgar, que si se están drogando...

Manu se quedó callado cuando abrió la puerta y notó que todos estaban haciendo cucharita, causando que estuviera bastante sorprendido. Notó la bolsa que había llevado Gabriel en el piso y la tomó cuidadosamente para ver qué había.

-Palomitas y papas fritas? En serio?.-Cuestionó Manuel en un tono bajo, suspirando y dejando la bolsa donde estaba mientras notó como su novio y amigo veían toda esa situación.-No trajo drogas, sólo comida.

-De verdad lo hacen sentir bien?.-Preguntó Jaime en un susurro, observándolos por unos segundos.

-Creo que sí.-Respondió Edgar, no queriendo que despertaran.

-Nosotros qué hacemos mal?.-Cuestionó el enojón, tomándose un momento para luego seguir hablando.-Hicimos lo mismo con él.

-Le recordamos a Dark.-Susurró Manu, sintiéndose muy mal y saliendo de la habitación, provocando que lo siguieran y que el enojón cerrara la puerta.-No ha olvidado en ningún momento a Dark y nosotros hacemos que se lo recordemos aún más, cuando le decimos que lo supere y weas así. Debemos dejarlo hacerlo a su manera.

-Drogándose?.-Preguntó Edgar, no estando muy seguro de todo aquello.

-No sé si es lo único que hacen.-Dijo Yelo, con una pausa.-No estoy seguro de eso y tampoco sé qué tienen ellos que lo hacen sentir mejor, pero si es eso lo que lo hace sentir así, entonces... que lo haga. No digo que confiemos en ellos de inmediato, de hecho, hablaré con ellos en algún momento pero... están logrando más de lo que nosotros pudimos hacer, y en dos semanas hicieron todo ese avance.

Se quedaron callados por unos pocos segundos.

-Esta va a ser la única vez que lo diré pero... hubiera sido bueno que Dark nunca hubiera desaparecido de mi mente.-Dijo Jaime, siendo completamente sincero con ellos.-Yo ya estaba acostumbrado a que él tomara el control de mi cuerpo y Nicolás hubiera seguido siendo feliz.

-Ya no hay nada que podamos hacer respecto a eso, Jaime.-Dijo Edgar, diciendo la verdad, con una pausa.-No tenemos ni siquiera una pista o algo que nos diga si Dark sigue existiendo o si desapareció. Nada. Además, él sabría si el Nico está muy mal y vendría o no?

-Si está mal físicamente, no psicológicamente.-Lo corrigió Manuel, sabiendo bastante de aquél tema.

-Pero cuando lo golpeaste...

-El Nico ni sintió dolor, estaba todavía con unos pocos efectos de la heroína.-Dijo Manu, ya sabiendo lo que iba a decir.-Pero si están pensando en hacerle algo de daño al Nico, no dejaré que eso pase.

-Manu, qué...

-Si Dark no está aquí, entonces yo me encargaré de cuidarlo.-Dijo el recién nombrado, interrumpiendo a su novio.-No lo marcaré, claramente, pero si él necesita ayuda, estaré ahí sí o sí, aunque sinceramente, con lo enojado que está conmigo, no creo que lo haga.

-Jaime, no tienes una conexión con Dark o algo parecido? Como él te poseyó, puede ser que le puedas hablar como antes lo hacían.-Dijo Edgar, queriendo solucionar todo eso.

-Eso pasaba porque él estaba en mi mente.-Dijo Jaime, no creyendo en eso, aunque tampoco lo había intentado porque antes no creía que la situación fuera tan complicada.

-Pero qué tal si se puede así?.-Cuestionó el ruloso, intentando pensar en algo más.

-Podría averiguar.-Dijo Manu, tomándose un momento para luego seguir hablando.-Seré demonio pero no sé todas esas cosas, porque yo no tengo otro yo y creo que nadie más en el Infierno o demonios tiene. La mayoría se convirtió en el Infierno. Si averiguó algo, vengo, pero no hagan nada sin mí.

Y luego de eso, Manuel desapareció.