Capítulo 41. Fiestas.

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Capítulo 41.

Ya había pasado una semana desde que habíamos vuelto de la casa de playa de Tom.

Hoy era 24 de diciembre, y como todos los años, mi mama organizaba la fiesta para la familia. Ayer habíamos hecho de todo con los amigos, y hoy tocaba con la familia.

- ¿Como alguien puede sobrevivir a tanta fiesta? - dijo mi hermano Jimmy mientras se sentaba para comer el desayuno.

- oh, créeme Jimmy, dentro de unos años amaras las fiestas - dijo mi hermano Kian, quien había llegado hace unos minutos a la casa.

- pero si ya las amo ahora.

- no estoy hablando de éstas fiestas, Jimmy - Kian elevó sus grandes cejas.

- déjalo al nene quedarse nene, Kian - reí y seguí comiendo mi desayuno.

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- ¡Tom! Pusiste mucha vainilla.

- ¡pero dice una pizca!

- ¡eso no es una pieza, son como tres!

- uy... creo que perdí la cuenta entonces.

Reí y negué con la cabeza.

- faltan dos horas para que empiece la cena y todavía no terminamos la base.

- vamos a llegar - Tom beso mi frente.

- estoy algo nerviosa - dije mientras me fijaba lo que habíamos hecho este bien.

- ¿por qué?

- tu familia y la mía, juntas, noche buena.

- va a estar todo bien.

- ya se, lo peor es que se que va a estar todo bien, pero me pongo nerviosa igual - reí y coloque la harina en una taza.

- es raro, eso si.

Asentí y coloque la segunda taza de harina en la mezcla.

- ¿estás segura que eran dos tazas?

- si... dice "dos tazas de harina"

- es que quedo muy...

- ¿duro? - dije tratando de mezclar.

Tom rió y me abrazo por detrás.

- ¿y si compramos una torta mejor?

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- Tom, deja de mirarme - dije mientras me maquillaba frente al espejo.

- te ves tan linda.

Quería mantenerme "enojada" pero su comentario hizo que me derritiera de inmediato.

- que cliché que eres - Tom rió y se paró del asiento y se acercó a mí. Me abrazo por detrás y beso mi cuello - Tom...

- shhh - siguió besando mi cuello.

- me tengo que terminar de preparar... - Tom seguía ignorándome besando mi cuello. Y aunque mi cabeza me decía que tenía que parar mi cuerpo no respondía a las órdenes de mi cerebro.

Diablos.

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- te dije que no teníamos tiempo - dije subiéndome al auto en el lado del copiloto.

- eso no lo decías hace unos minutos... - Tom se puso el cinturón y me miró pícaro.

- cállate y enciende en auto - puse cara seria pero sin poder evitarlo una risa salió de mi boca.

Salimos del departamento nuevo de Tom y nos dirigimos hacia mi casa donde se encontraban nuestras familias.

Al llegar, bajamos la torta que habíamos comprado con Tom para el postre, ya que le que intentamos hacer había sido todo un fracaso.

- hola ma - salude a mi mama una vez que entre a mi casa.

- hola hija - me dio un beso en la frente - hola Tom - Tom sonrió - ¿por qué tardaron tanto?

Yo lo miré a Tom y pude sentir como mis mejillas tomaban un color rosa, pero él fue rápido y le contesto a mi mamá que nos habíamos olvidado de comprar la torta. Mi mama asintió y fue a dejar el postre en La Cocina.

Suspiré y lo miré a Tom quien reía - te voy a matar - la risa de Tom me contagio y entramos al living donde estaban todos.

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- feliz navidad, amor - dije y Tom puso su mano en mis hombros.

- feliz navidad, darling - sonrió y unió nuestros labios con un beso.

- ¿donde está mi beso de feliz navidad? - Kian se puso entre nosotros y puso sus brazos en cada uno de nuestros hombros.

- Kian...

- ¿que? Les estoy demostrando cuanto los quiero - nos abrazo más fuerte y reí.

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Después de dos semanas de no poder ver a Angie ya que se había ido de viaje para ver a sus tíos para las fiestas, decidimos pasar año nuevo juntas con Tom y Harrison como el año anterior.

Después de cenar con mis padres y mis hermanos, nos encontrábamos en un parque, donde todos los años la gente se juntaban y tiraban petardos a las doce de la noche.

- faltan solo cinco minutos - Tom puso su brazo al rededor mío - como cambian las cosas en un año - yo lo miré y sonreí asintiendo.

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¡Feliz año nuevo!

- ¿me aceptarías un beso de año nuevo, Reedus? - yo sonreí al recordar las mismas palabras de Tom hace un año.

Asentí y uní nuestros labios mientras Tom ponía su mano en mi cintura.

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Yo tiro de tom hacia mi, agarro su camisa y tiro de él imposiblemente más cerca. Mis uñas están dejando unas líneas rojas, enojadas en sus hombros mientras que lo empujo más cerca mío. Sus labios rastreaban mi hueso de mi pecho, mi hombro, mi cuello. Yo jadeo silenciosamente, un pequeño aliento escapándose de mi.

- Tom...

Sus labios rozan mi oído. Él respira hondamente. Yo tira de su camisa. Me deja en breve, tirando de su camisa sobre su cabeza y que aterriza en alguna parte cerca del armario.

Él está de vuelta en mi cuello antes de que parpadeo. Mis manos encuentran su cabello, tirando suavemente.

- Bésame. Ahora - yo susurro.

Y eso hace. Con una prisa y profundidad y sigue mordiendo mi labio y colocando su lengua en mi boca. Él gentilmente coloca sus manos en mis muslos que están entre su cuerpo.

Con un moviendo rápido Tom saca mi corpiño observándome detenidamente cada detalle de mi cuerpo.

- eres hermosa, ángel.

young love - tom holland Donde viven las historias. Descúbrelo ahora