Rachel volvió al Campamento Mestizo la semana pasada. Mis días se habían vuelto tan rutinarios, las pesadillas se habían ido finalmente. No había más mensajes a través de mis sueños y odiaba no tener noticias sobre él.
—Si sigues sin dormir te hará daño—Dijo una voz a mis espaldas.
—Si sigues escondiendote en las sombras terminarás con mi espada en tu pecho—Le susurré a Nico Di Angelo, volteé hacía él y vi como asentía lentamente.
—Todo irá bien ¿entiendes?
—Han pasado semanas, Nico.
—Lo sé Reyna, pero se que esta bien o por lo menos aún no esta muerto, eso lo puedo sentir.
Él se acercó hacía mí y una leve sonrisa apareció en sus labios, era muy raro verlo sonreír pero cuando lo hacía era tranquilizador. Siempre me hacía bien tenerlo como mi confidente. Me acompañó hasta mi dormitorio y después de dejarme ahí se marchó con Will.
Cerré mis ojos y ahí estaba él. Apolo estaba ahí. Mi corazón se agitó al verlo, pero después de varios segundos de admirarlo me di cuenta en la condición en la que se encontraba. Estaba montado en un ¿grifo?
Él y Calipso. Vi como apuntaba con su arco a una dirección mientras estaba arriba del animal. La flecha dio en su, lo que creo era su blanco.
Animales salían de las celdas que se encontraban abajo y pisaban a un hombre, que por su aspecto, no se la había pasado nada bien.
El grifo en una maniobra atrapó en sus garras el pequeño cuerpo de una chica, Apolo ayudó a esta a subir y ponerse a bordo. La niña que vestía un vestido verde con un pantalón amarillo y unas zapatillas rojas le gritó:
—¡Te dije que te fueras!
Luego de esas palabras, ella envolvió sus brazos a su alrededor y él correspondió. Se veía feliz, realmente feliz. No había palabras para expresar este momento que estaba viendo.
Y es así como Apolo había recuperado a su amiga, a su compañera que en su momento lo había traicionado pero que hoy, se había reivindicado, ayudándolo, a él y a Calipso de lo que pudo haber sido su muerte inminente.
Apolo había recuperado a quien sería su gran compañera en su camino de vuelta al Olimpo. No había duda, la chica que estaba abrazando era ni más ni menos que Meg McCaffrey. Su aliada.
[...]
MEG COME BACK!
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Waiting For Superman (ReynaxApolo)
Fanfiction¿Qué pasaría si un día el amor de tu vida desaparece sin dejar rastro y después de algún tiempo aparece de la mano con otra? Mientras la guerra contra Gea sucedía, Reyna se encontraba en una gran batalla con ella misma pero finalmente decidió darse...
