Nightmare | Synyster Gates.

Capítulo 40 | Final.

Se recomienda escuchar la canción con el capítulo.

Sus movimientos se volvieron lentos como si tratara de torturarme, encaje mis uñas en el cuando aumentó la velocidad.

-Ay casi, cariño.- Dijo, tomó de mis caderas, sentía que iba no podía mas. Tres penetraciones y llegué al orgasmo antes que el.

Hizo movimientos lentos mientras besaba su cuello pero llegué a la zona por arriba de su oreja y se quejó.

-¡Auch! Ten cuidado cariño.

-¿Que tienes en el cuello?

-Nada, cariño... estoy lastimando.-Note un moretón justo a lado de su cuello.

—¿Porque tienes un moretón en tu cuello...?.- Me levanté de la cama y Brian se cubre.

—Dejame explicarte, _____ no es la que piensas.

Me levanté de mi cama, me puse una chamarra y unos leggins. Noté en la mesita de noche algo diferente y tomé, al parecer a Brian se le fue el color de la piel.

—Este sostén no es mío.- Nos miramos ambos, pero de inmediato Brian baja la cabeza, molesta se lo avente en la puta cara y salí corriendo.

-____, escucha por favor.- Dice Brian Molesto.

Salí de casa llorando, destrozada y saber a dónde carajos ir. Fui a la playa y senté llorando sin parar pero sentí su presencia y me empecé a dar manotazos al aire.

-¡Tu, hijo de puta! ¡Por eso olías diferente anoche! ¡Soy una gran idiota! No me toques.

—_____, favor... escúchame.

—¡No! ¡Tu mentiste, en mi cara! Jamás te he importado, ella tenía razón tú no me amabas.

—¿De quién hablas? Claro que te amo, preciosa.

— Te acostaste con Michelle para variar en mi puta cama, realmente no haces...¿A que estamos jugando? Ni siquiera somos pareja, nunca me presentado como tu novia ¿Que soy para ti? Una amiga con derechos, eso creo.

—Escucha ____, Claro que me importas...

—Estoy harta de ilusionarme como una puta adolescente, haz lo que quieras, no me importa solo quiero que te vayas.— Me levanté de la arena y me fui a casa.

Noté que Brian no me siguió, se quedó mirando el amanecer. Entre a la casa y Jimmy estaba sentado en el sillón.

—Escuché todo.— Suspiró fuerte con una copa de vino que bebió con desagrado.

—Jimmy, ya no bebas...no te hace bien.— Dejé a un lado la copa y me acosté en su pecho.

—Jimmy te amo tanto...quiero que hagas a Layla la mujer más feliz , dile a Layla que amo mucho.

—¿Tomaste a tu decisión?.— Besa mi frente.

—No te gustará, si te digo...por favor quiero que sean felices sin mi, pronto volveré.

— A Layla, no le gustará pero...no yo te puedo obligar a quedarte.

— Quiero que les digas a todos que estarán en mi corazón y los amo.

—¿Y a Brian?.— Sin darme cuenta ya estaba llorando sin parar.

—Tu sabes, lo que pienso.

(...)

Llegó la noche de ese mismo día, junté todas mis cosas. Mi habitación quedó igual que cuando llegué, alguien tocó la puerta.

—Jimmy, aún no estoy lista.— La puerta se abre y mis ojos se llenaron de lágrimas.

Me acerqué a el, no dijimos nada, sólo juntamos nuestras caras sin pegar nuestros labios.

—No tienes que hacer esto.

—Tengo una vida allá, serás más feliz con ella...yo lo sé porque lo veo en tu mirada cuando la miras.

—No es cierto, no sabes lo que dices ____...— Nuestros labios se juntaron por última vez pero está vez yo fui la que paré.

—No hagas las cosas más difíciles, ya me quedaron claras tus intenciones.— Cuando traté de tomar mis maletas, Brian acaricia mi vientre con ternura.

—Adios, Brian Haner.—  Tomé mis maletas y bajé las escaleras. Jimmy me esperaba en su carro, subí a él, traté de no mirar a los lados.

Jimmy dió marcha, alejándome de la casa.

—¡______!.— Podía escuchar como la voz de Brian pronunciaba mi nombre lejos.

—Cometes un error, pequeña.— Dice Jimmy.

—No, Jimmy...Brian tiene que estar con Bitchelle... digo Michelle.

(…)

Llegué a la antigua casa de Layla en Alburquerque, así Brian no podría encontrarme hasta que las cosas se calmarán.

Me sentía aún mareada por el vuelo, dejé mi maleta a un lado para elegir mi pijama. Tomé una de las camisas grandes que tenía, era de Brian me di cuenta porque aún llevaba su aroma.

Mientras sacaba el humo de mis pulmones por el cigarrillo, derramaba lágrimas.

“Please don't take my sunshine away”

Pronunciaba la letra de la canción, terminé de llorar, fui a la cama,  acomodé mis sábanas y traté cerrar los ojos. El aroma de Brian me ayudó a dormir, podía sentir su presencia aún que no era así.

FIN.

YA ESTÁ DISPONIBLE LA SEGUNDA TEMPORADA.