"Noche de chicas"

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"Y el  valiente gorila Shango entro por la princesa Antonella" le contaba una historia Santiago a los pequeños Hugos  y a los que no se llamaban así en mi familia, mecía al bebé de mi hermana para que se durmiera pero aun me seguía mirando y jugando con mi collar.
"Pero el monstruo Estef  lo retuvo" rodé los ojos, había inventado una historia donde nosotros eramos los principales y Estef  el villano.

—¿ Y qué pasó? — Pregunto mi sobrina de cuatro años — Cuenta Santiago.

—Shango corrió hacia él y luchó por ella, Estef perdió y huyó del lugar como un cobarde, Shango tomo a la princesa y se la llevó a un castillo de muchos pero muchos plátanos y... Vivieron felices por siempre —Los niños se alegraron, saltaban de la emoción por el  final.

—Creo que tu novio sabe contar buenas historias para niños pero a mi me aburrió — Hablo mi primo.

— No voy a pelear contigo porque solo eres un niño de quince años.

— Me quedo callado si me dejas salir —

— No— seguí meciendo al bebé que seguía entretenido con mi collar — Siéntate en un lugar y quedare tranquilo, ya vienen toda la familia para almorzar, es un almuerzo previo del matrimonio no lo arruines con tus bromas pesadas—

— ¿Pasa algo? — Santiago rodeo su brazo por mi cintura y miro a Hugo, él se fue — Déjalo esta en su etapa de adolescencia.

Mi familia llegó junto con los padres de Estéfano, Estéfano y Jane.
Ellos hablaron con sus padres de todo lo que paso y aceptaron su compromiso, así que mañana se casan. Sus padres de Estef quisieron que se casaran lo más pronto posible para que el  niño tenga su apellido cuando naciera.

—Buenas tardes— Saludaba uní por uno a todos los presentes —Hola Estef, ¿Como estas?

— Bien, creo — Me sonrió — Me voy a casar con alguien que no amo, debo de sentirme bien ¿No?.

— Estef, si no quieres hacerlo sólo diles.

—No quieren, ellos quieren que me case con ella si o si —

— Vamos, siéntense ya es hora de comer —Su padre nos interrumpió.

Me senté junto a Santiago y como era de esperar Estéfano se sentó a mi otro costado.

—¿ Donde van a vivir?— Comenzaron con sus típicas preguntas de padres a yernos, Estef  no respondía se quedaba callado, Jane era la que respondía por él.

Jane me tomo por el brazo y me llevo a la sala después de haber almorzado— Voy hacer una fiesta de despedida de soltera, vamos a ir a una casa de una amiga.

— Las fiestas no se me dan- Ella me miro - Bueno siempre salgo peleando con algún hombre por intentar tocarme, así fue la fiesta anterior y por no hacerle caso a Santiago me peleé con él.

—Tranquila solo va haber mujeres.

— Confió en ti Jane.

La noche llegó le conté de la fiesta a Santiago,me dijo que también le habían dicho lo mismo, bueno mi cuñado lo quiere llevar.

— ¿No va haber hombres verdad? — Me abrazó por la cintura mientras me colocaba mis aretes.

—No, ya te dije solo chicas— me volteo para mirarlo a los ojos —Y allá, no abra mujeres ¿No?

—No lo sé cariño— Me sonrió picarón, yo lo mire seria, él se rió — No sé.

—¡Santiago vayámonos!— Gritaron desde abajo.

—Ya me voy adiós— Me besó — ¡Diviértete! — Me dijo mientras bajaba las escaleras.

—Vamos, todos los hombres ya se fueron, es hora de ir a la casa — Mi prima tomo su abrigo — ¡Ya! —Subimos a su carro para ir a la fiesta— Estef me dijo que no quiere casarse ¿Te dijo eso a ti también? —Asentí — Él esta loquito por ti Antonella— Sonrió.

Infinitos besos para AriesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora