Inazuma Eleven - El síndrome de Estocolmo - Axel [Lemon]

El síndrome de Estocolmo II ~ Los depredadores // PRÓLOGO

Narra Axel:

Me encontraba tumbado en aquella cama tan familiar, aquella que compartí durante tanto tiempo con Lía. Decidí recostarme un poco, encendí la pequeña lámpara de mesa que había al lado y cogí mis gafas redondas y el periódico de la cama. Dirigí la mirada a Lía para comprobar que no la hubiese despertado con la luz o algún movimiento. Seguía dormida, con una adorable cara de felicidad. Me reconfortaba su cercanía, la confianza que tenía depositada en mí. Sonreí para mis adentros. Realmente me gustaba. Mucho.

Me puse las gafas y desdoblé el periódico. Sonreí al leer los titulares. Aparecíamos en portada, e incluso nos habían dedicado varías páginas de un reportaje.

Había sido perfecto. No tanto para mi hermano, pero la verdad, me daba igual.

Empecé a leer: Resuelto el caso del Depredador. Después de muchos quebraderos de cabeza, la policía consiguió dar con el paradero del verdadero criminal, quien se ocultaba en casa de su víctima, Lía, una estudiante de piano. El modus operandi fue el usual... El verdadero Depredador, Alex Zabel, murió de un disparo cuando trataba de escapar de la casa de su víctima... Su hermano gemelo, Axel, puede vivir ahora tranquilamente de nuevo, ya que no volverá a ser confundido con el difundo asesino en serie.

Me acordaba del día en que me entrevistaron para la televisión, los periódicos... Era noticia. De nuevo. Sabía que estaba hecho para ser conocido, del modo en que fuese. Me mostré muy triste y compungido, como se esperaba que me encontrase.

Conseguí convencer a Lía de que realmente yo era Axel, su Axel, su asaltador de cada. Lo cual es verdad. Fue un fallo haberme reído en aquel momento, pero la felicidad de verme impune me pudo. La gloria y el orgullo de haber realizado alto tan imposible no me dejaba dormir.

Recordaba aún como empezó todo.

Era un adolescente, tenía 17 años. Había invitado a casa a la chica que me gustaba, no éramos oficialmente novios, pero se nos podía considerar como tal. Ella aceptó. Era fácil suponer para qué era.

Empezamos viendo una película, la abracé y la acerqué a mí. Nos besamos durante un buen rato, comencé a deslizar mis brazos por su cuerpo. Recorrí su espalda, luego los pechos y le quité la camiseta. Se resistió cuando quise quitarle los pantalones, pero finalmente accedió. Introduje unos dedos en su sexo. Fue entonces cuando todo se torció. Comenzó a negarse y a decirme que no quería que lo hiciésemos. No pude aceptar un no por respuesta, así que terminé forzándola y haciéndola mía. Fui salvaje y brusco, se lo hice con intensidad y repetidas veces. Fue realmente placentero. Más aún porque era virgen. Terminó llorando a mares y empezó a amenazarme con denunciarme. Entré en pánico, quería que se callase y pensar con tranquilidad. Pero no callaba, sólo lloraba. Así que me acerque a ella y la cogí del cuello, y zarandeándola le dije que se callase y dejase de llorar. No lo hizo. La ira se apoderó de mí, empecé a hacer fuerza con las manos y para cuando me di cuenta, ella ya estaba muerta. Se llamaba Lía, también.

Entonces entró mi hermano y se asustó al ver que Lía no reaccionaba. Aún así no fue difícil convencerlo de que me hiciese casi y me ayudase a deshacerme del cadaver. Decidimos dejarlo lejos de mi casa y destruir su móvil. Tuvimos suerte porque nadie de sus conocidos ni familia sabía que estaba conmigo. Ella no había querido contarle a nadie nuestra relación, ask que nadie sabía que había estado conmigo.

Nos interrogaron porque oficialmente éramos solamente compañeros de clase y amigos. Fue largo, perocuando la tormenta pasó y no fuimos descubiertos, la satisfacción fue inmensa. Así fue cómo comenzó todo.

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Holaaaa a todooos^^

Pues otra vez aquí. Como muchos pedisteis que hiciese una segunda parte y no habían entendido bien qué pasaba realmente, he decidido hacer una segunda parte para explicar todo un poco.

Relataré los crímenes cometidos por los Depredadores, así que espero que lo disfrutéis ;))

Muchas gracias y hasta la próxima.