—¡Hora de levantarse, tenemos juego en dos horas!—se escuchó el gritó de papá y cogí mi unicornio poniéndomelo en la cara. Así no escucharía sus gritos. —¡Campeón, princesa, nena, bebé es hora de levantarse!— volvió a gritar, esta vez más cerca. Lo que significaba que estaba en el pasillo. –Campeón hablo enserio, despierta—se escuchó como abría la puerta de bubu, lo que significaba que en menos de un minuto estaría aquí. Escuché pasos acercarse y mi puerta abrirse. –Princesa despierta—susurró moviéndome y me quejé tirándole mi unicornio—Princesa, es hora de levantarte—rio y abrí los ojos con pereza. –Tenemos juego en una hora, despierta—dijo besando mi frente.
—Eres de lo peor papi— bufé poniéndome de pie y este rio saliendo de mi habitación. Encendí la luz del baño y con pereza me lavé los dientes antes de darme una rápida ducha. Me puse mi uniforme de mi equipo y cogí el cepillo con las gomas de pelo y mi gorra antes de ir a la habitación de mamá.
—No molestes Drew, déjame dormir—bufó— mamá tapándose con la sabana entera y papá rio abrazándola. Papá no entendía que mamá odiaba que la levantaran. No la culpaba porque el llorón de cosita la mantenía despierta por la madrugada. –Vete idiota—se quejó empujándolo fuera de la cama haciéndome reír.
—Mi amor, no me trates así—se quejó papá haciendo que mamá le diera la espalda. –Hieres mis sentimientos—dijo y mamá rio.
—Claro, como tus sentimientos me darán mis diez horas de dormir ¿No?—resopló mamá dándose la vuelta y papá besó su frente.
—Debemos irnos, falta una hora y media para el juego—dijo y mamá asintió recatándose de nuevo. —¡Señora Bieber!—gritó haciendo bufar a mamá. Era gracioso cuando papá la llamaba así.
—Ya ya me levanté—se quejó mamá poniéndose de pie. Reí al ver como papá se quedaba mirándole el trasero cuando esta entraba al baño.
—Eres un ligón papi—reí entrando a la habitación dándole una nalgada y este se volteó a verme.
—No soy ligón princesa, es que ¿Acaso no viste lo sexy que lucía mamá?—preguntó y asentí con una sonrisa. –Diablos, me dan ganas de ir y llenarla de besos—se quejó haciéndome reír. A papá le costaba apartar las manos y la mirada de mamá. Sin duda para papi no había alguien más que mamá. –Ven aquí—dijo y le di el cepillo con las gomas.
—¡Papá tengo hambre!— se escuchó el gritó de Andrés y ambos reímos. —¡¿Dónde está el desayuno?!—volvió a gritar. Bubu era un gritón de lo peor. Por todo gritaba mientras que yo chillaba por cualquier cosa.
—Oye, yo no voy hacer el desayuno—dijo mamá saliendo del baño y sonrió al verme. –¿Lista para batear trasero?—preguntó y asentí con una sonrisa. –Volviendo a ti—señaló a papá que sonrió sin dejar de peinarme. Sabía que estaba haciéndome coletas, pero no podía quejarme. Mamá me mataría si lo hacía porque eso haría sentir mal a papá. Una vez lo hice y papá no paró de quejarse de lo terrible que era como padre y muchas cosas más. –Yo no pienso hacer el desayuno—se cruzó de brazos y papá sonrió pícaramente viéndola. —¡Justin!—gritó al darse cuenta que papá miraba sus pechos. ¿Qué puedo decirles? Mi papá es todo un ligón. –Increíble—bufó caminando al closet.
—Se enoja porque me quedo mirando lo sexy que es ¿Puedes creerlo princesa?—preguntó papá y reí negando. –Quieta, casi termino—dijo y mantuve mi cabeza quieta mientras terminaba de hacerme las coletas. Al menos eran bajas y así podía ponerme la gorra del equipo. –Listo princesa, ahora ve y dile al gruñón de tu hermano que se prepare cereal—dijo y asentí antes de salir corriendo a la cocina en donde bubu miraba mal la nevera mientras tenia Esther en sus brazos.
ESTÁS LEYENDO
Troublemaker is Back {Julieta Bieber}
Humor-Soy Julieta Bieber y soy un problema-sonrió la niña sin saber que sus palabras ya estaban causando problemas. +++++ ¿Qué tal? Bueno, primero que nada quiero aclarar que esta idea salió de la nada. Pensé que todas quieren ver a Justin como de papa...