•24•

3.9K 292 34
                                    


Marco suspiró. Había peleado con ___ por una estupidez. El hecho de que ella lo haya celado con Jackie. Era entendible, puesto que había hablado todo el día con la de mechón agua marina, cuándo su novia estaba realmente triste porque sus padres habían vuelto a irse.

La chica no le había hablado desde que salieron de la clase y la había escuchado sollozar en la habitación de Star, minutos antes de que la rubia saliera y le abofeteara la cara.

Era su primera pelea y por unos estúpidos celos. Él la había celado con Justin y la chica se lo tomó realmente bien, diciendo que lo entendía y que por favor no tomara aquella conversación cómo una "pelea".

- Star. –llamó a la rubia, tocando la puerta de su habitación.

- No aceptamos idiotas. –gritó la ojiazul desde dentro de la habitación.

- He venido a arreglar las cosas con ___, abre por favor. –pidió el moreno.

Star miró a la castaña, pidiéndole permiso. Ella asintió con la cabeza, limpiando todo rastro de lágrimas con la manga de su sudadera púrpura.

- Haces algo y llamaré Pony Head. –lo amenazó la rubia, saliendo de la habitación. Marco asintió frenéticamente antes de entrar en la habitación.

Se sentó delante de ___, la chica tenía su vista fija en las pantuflas rosadas que estaba utilizando, mientras abrazaba una almohada fuertemente contra su pecho. Marco suspiró, tomándola de las mejillas haciendo que ella lo mirara. Un sonrojo se apoderó de las mejillas de la chica cuándo el moreno sonrió, dándole un suave beso.

- Lo siento, sé que estuve mal. –se disculpó luego de haber separado sus labios.

- No te preocupes, ya pasó. –dijo la chica.

- Debía haberte prestado más atención. –se lamentó el chico, tomándola de las manos. – Tus padres se acababan de ir de nuevo y yo... -los labios de su novia le impidieron continuar la oración.

Se apoyó en sus codos, sintiendo las manos de la chica en sus hombros y el cuerpo de ella entre sus piernas. ___ se separó lentamente, sin abrir los ojos. Sonrió al hacerlo y tomó el labio inferior de Marco, tirando de éste hacia abajo.

- He dicho que está bien. –murmuró ella, antes de morderle el lóbulo de la oreja. – Gracias por preocuparte por mí. –sonrió, antes de volver a besarlo y empujar su lengua dentro de la boca del moreno.

Marco la sostuvo contra su cuerpo, sintiendo a la chica colocar sus brazos alrededor de su cuello y entrelazando sus piernas en la cintura de Marco. Tiró de la capucha de la sudadera de él, colocándola sobre su cabeza e inclinando su cabeza hacia un lado. Díaz estaba a punto de enloquecer, le encanta esa chica y el que actuara con iniciativa lo volvía loco. Sintió las manos de ___ recorrer sus brazos y luego su pecho, bajando hasta su abdomen. Marco quiso que ella bajara más por unos segundos, razonó que eso no sería bueno. Trató de apartarla un poco para que no tocara eso. No midió dónde estaban sus manos y terminó poniendo sus manos sobre los pechos de ___, provocando que ella se sonrojara.

- ¡Lo siento, lo siento, lo siento! –repitió el moreno con un notorio sonrojo en sus mejillas. ___ sonrió con maldad.

- No vayas tan rápido, Díaz. –dijo divertida.

- Yo no... -observó la sonrisa de su novia y frunció el ceño con diversión. – ¿Jugaremos así? bien. –empujó a la chica debajo de su cuerpo antes de comenzar a besar su cuello, escuchando risitas por parte de ___, y cuándo mordisqueaba un gemido.

Star decidió dejar de escuchar a través de la puerta cuándo escuchó los gemidos, sonrojándose hasta las orejas al imaginar a sus dos mejores amigos haciendo eso.

Pero fueron sólo besos, besos que enloquecieron a ambos. Y los dejaron con ganas de más. Mucho más.

Díaz. [Marco & tú]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora