Díaz. [Marco & tú]

•48•

Star arrastró a ___ dentro de la casa. Tendrían una pijamada y la castaña iría quisiera o no. La chica suspiró al ver a Marco observándola.

- Hola. –saludó con una pequeña sonrisa, sacudiendo su mano. El chico le respondió igual, pero con una sonrisa de oreja a oreja.

___ se metió a la habitación de Star, esperando no volver a cruzarse con Marco en toda la noche. Lo cuál sería casi imposible, puesto que estaba en su casa. El chico, por su parte, quería todo lo contrario a ella, porque quería recuperarla pero sabía que no sería fácil. Se había comportado cómo un idiota.

- ¿No crees que es un buen momento para reconciliarte con Marco? –preguntó Star. ___ negó con la cabeza.

- Le quiero, pero... -Janna la miró atentamente, mientras la seguía abrazando por detrás. – Me lastimó, y mucho.

Las dos chicas asintieron. Kelly llegó unos minutos después, trayendo con ella bolsas de comida chatarra que todas comieron.

Una maratón de películas de vampiros. Eso fue lo que eligieron, ___ prefería a los hombres lobo pero no le disgustó la idea. Suerte que no era Crepúsculo.

___ decidió bajar por los cereales de Star. Se subió sobre la encimera para alcanzar la alacena que la rubia le había dicho. Cuándo logró tomar éste, tambaleó y por poco cae hacia atrás. Ese "por poco" fue unos segundos porque terminó cayendo de trasero al suelo.

Se levantó dando un quejido.

- ¿Estás bien? –Marco apareció en el marco de la cocina, luciendo algo alterado. – Escuché un ruido y...

- El suelo quiso besar a mi trasero. –dijo ella divertida.

"Yo también querría".

Marco suspiró, acercándose a ella hasta el punto de que sus respiraciones se mezclaran.

- Lo siento, ___. –murmuró, cerrando los ojos. – Pero me haces demasiada falta y... -tomó aire. – Entiendo si me odias luego.

El chico pegó sus bocas con desesperación, tomando a ___ de la cintura y esperando que ella no se separara. La chica trató de forcejear, pero simplemente extrañaba demasiado el sabor y los movimientos de los labios de Marco. La deliciosa sensación de besarlo.

Pasó sus brazos alrededor del cuello de él, pegando sus cuerpos. Las manos de Marco bajaron al trasero de ella y lo masajeo, un jadeo salió de los labios de ___, antes de que enredara sus piernas en la cintura del moreno.

- Me... -beso – haces... -beso, beso – falta... -dijo el chico. Ella afirmó con un pequeño quejido. – Lo lamento. –volvió a hablar, ahora separando sus bocas.

- Cállate. –susurró ella, poniendo un labio sobre los del moreno. – Sólo cállate y bésame. –volvió a empujar sus bocas en un beso desesperado.

El chico jadeó en el beso cuándo ella pegó sus pechos al de él.

Las manos de Marco se adentraron en la blusa de __ y lugo en su sujetador, comenzó a masajear los pechos de ella aún sin abandonar sus labios. ___ ahogaba sus gemidos contra los labios del moreno, y eso sólo hacia que se volviera más loco.

Marco separó sus labios de los de ___, para ver a la chica toda sonrojada y jadeando. Alzó las cejas y ella asintió. La tomó de la mano y subió las escaleras hasta su habitación.