Hiccup había perdido la noción del paso del tiempo.
Había momentos en los que sentía que había estado atrapado en este infierno por años.
En ocasiones, se despertaba de un sueño inquieto, lleno de sueños, murmurando el nombre de Astrid, y extendiéndose hacia ella,esperando que estuviera allí.
Parecía que sólo había pasado un latido de corazón desde que había tenido a Astrid en sus brazos....
Con frecuencia, después de haber tenido ese sueño, abria los ojos para ver los muros opacos de su celda, y se sorprendió y entristeció cuando la verdad de sus circunstancias lo absorbió de nuevo...
Fue en esos momentos en los que alcanzó sus puntos más bajos.
Hiccup trató de no dejar que Viggo se diera cuenta de lo afectado que estaba por este encarcelamiento y aislamiento, pero tenía la sensación de que no había tenido mucho éxito en ocultarlo, a juzgar por la habitual actitud de superioridad en el rostro de su torturador.
El silencio absoluto que lo rodeaba cuando Viggo no estaba en la celda jugando "el juego" había empezado a comerlo por dentro...
Hiccup ansiaba oír el sonido de una voz amistosa, o la música melodiosa de una de las canciones que Heather les cantaba a los niños mientras los ponía en la cama.
Al principio, él cantaba suavemente las canciones para sí mismo, pero su garganta inevitablemente comenzaba a doler mientras contemplaba no volver a ver a su sobrina y sus sobrinos otra vez, así que tarareaba las melodías.
Lo tranquilizaba un poco cerrar los ojos mientras zumbaba las canciones de cuna y, inconscientemente, Hipo se balanceaba de un lado a otro, girando sus dedos en su pelo como solía hacerlo su sobrino menor.
Una pequeña parte de su mente reconoció que estaba perdiendo el control sobre la realidad, pero parecía impotente para detener la lenta caída en la locura.
Incapaz de ver el mundo exterior, sus días y sus noches se mezclaban y nunca sabía cuándo vendría Viggo.
A veces, parecía que había visitado a su prisionero en lo que debía ser la mitad de la noche, despertando a Hipo de lo que le parecía un poco de sueño.
Había intentado juzgar cuántos días había estado aquí, y no pudo siquiera aventurar una conjetura.
Parecían años ...
Hiccup succionó con un sobresalto cuando se le ocurrió un nuevo temor.
Vigco tenía la intención de matarlo y Hipo lo sabía.
No le temía su propia muerte, tanto como odiaba la responsabilidad de estar en las manos de Viggo...Pero, ¿y si Grimborn decidiera arrastrar a mas personas con su locura?
Hiccup no creía que pudiera soportar eso.
Realmente se volvería loco, lo sabía...
Hasta ahora, su tortura parecía haber evitado cualquier daño permanente aunque Viggo se aseguró que le doleria como el infierno,pero Hiccup temía que algún día decidiera hacer algo aún más terrible que las palizas.
¿Y si decide cegarme?
¿O me paraliza?
Si me Quita mis piernas, o mis manos ...
La retórica de Viggo variaría desde recuerdos inocentes del tiempo de un hijo con su padre, hasta diatribas llenas de vitriolo contra el hombre que consideraba responsable de la muerte de esa inocencia.
Fue en esos momentos en que las palizas se tornaron particularmente viciosas, y en esos momentos dolorosos, Hipo casi deseaba la muerte.
La única cosa que mantuvo esas súplicas de derramarse de su boca fue que él no quería que Viggo tuviera esa satisfacción.
ESTÁS LEYENDO
susurra tu debilidad (hiccstrid)
FanfictionPrimer lugar "Premios Dragonite 2017" categoría "Hiccstrid Modern" -susurra tu debilidad y te presto mi fuerza- Un amor Un conflicto Una muerte Un peligro... Un romance es algo maravilloso sin duda, y más aun para dos personas solitarias como lo son...