Epílogo

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Epílogo:

La caja permaneció encima de mi cama, esperando por ser abierta, más no podía. Tenía miedo

Me senté a un lado de esta y la puse sobre mis piernas, después me llene los pulmones con aire de valor. Y empecé a contar con los ojos cerrados 3…2…1.

Los abrí lentamente y miré el contenido. Por inercia tuve que sonreír al encontrar la blusa que le había dado cuando fui audicionar para TXF, no podía creer que todavía tuviera aquel vejestorio. Tome la blusa y la pegué a mi pecho cuando el recuerdo se poso en mi mente del día en que se la vi puesta. La deje de lado y seguí buscando en la caja.

“Leeme” leí hasta el fondo de esta, debajo de un sobre color amarillo, de esos que te dan para guardar fotografías. Saqué el sobre color hueso de la caja y me le quede mirando.

¿La vas a leer o no, Harry?. Rasgué el sobre y saque de el una hoja, estaba escrita por los dos lados y doblada en 4 partes. Me armé nuevamente de valor y la desdoble. “Hola mi amor… - la doble nuevamente de golpe al leer la primera línea que, fue lo suficiente para destrozarme aún más.

Deje a un lado la carta y me encerré en el baño. Aún no podía creerlo. ¡¿Porqué?!. Maldecía a todos, a Dios, a su puta enfermedad y en especial me maldecía a mí. Todos los días me levantaba diciendo que esto era una pesadilla, y que cuando me despertará, ___ estaría a mi lado, pero por más que lo desee no es así y nunca más será así.

Me miré al espejo. – Eres un desastre – mojé mi cara y la talle para volver a verme. – Deja llorar, Harry. Basta. – me dije negando con la cabeza. – Ya…ya…ya – sollocé mientras tallaba mis ojos que, no paraban de desparramar tristeza.

-¡Harry! – gritó mamá, más no le respondí. -¡Harry! – volvió a gritar. Y yo volví a fijar la vista en mi reflejo. 

Anne entro al baño unos minutos después. – Pense que ibas a hacerte daño – comentó. 

- No creo que eso me traiga a _____ de regreso mamá. –dije y Anne me estrecho entre sus brazos. - ¿Qué se supone que debo de hacer ahora? ¿Pretender que jamás la conocí, olvidarla y vivir mi vida normal como si no hubiera pasado nada? Porque no puedo. – sollocé.

- Nadie dijo que tenías que olvidarla, Harry. – me tomo la cara entre sus manos. – Pero…tienes que seguir adelante – negué. Bajo mi cabeza y beso mi frente. “Tengo que seguir adelante…¿cómo demonios haré eso?”.

………

Al entrar de nuevo a mi habitación me acosté en la cama. Miré mi buró, en el cual estaba el portarretratos que me había dado Allie. – Te extraño – le dije a la foto. 

Miré al techo y traté de no pensar en cosas malas de mí, pero no lo logre. Simplemente me sentía exhausto de pensar que podía cambiar las cosas, cansado de pensar en cosas repugnates sobre mí. Harto de vivir.

Quería morir. Extrañaba abrazarla, extrañaba su voz. ¿Por qué mierda no esta aquí?. Miré la foto y la tiré por un impulso, cosa que hizo que el portarretratos junto con la foto calleran al suelo. 

-No..no..no..no – exclame, al ver los macarrones desparramados por el suelo y a la foto con un doblez en una de las esquinas, que se había salido de este. Me levanté y me agaché para juntar el portarretratos y la foto y ponerlos nuevamente en el buró pero algo más tomé cuando los junte. La carta, había caído al suelo y sobre esta había caído el portarretratos. 

Me levante y me senté en la cama con la carta en mi mano, y decidido la desdoble y empecé a leer. 

“Hola mi amor: 1 de enero 2012.

Please...don't forget meDonde viven las historias. Descúbrelo ahora