3: "Cuando te conocí"

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Me desperté a causa de que los rayos del sol daban directo a mi cara, al abrirlos completamente note que había una persona junto a mi….

-Hola, dormilona, ¿como amaneciste? –Dijo Susi, es mi enfermera desde que llegue la primera vez al hospital, Alta, blanca y palida, tenia el pelo agarrado en una coleta su pelo era de un castaño oscuro, con el sol se le podían percibir pequeños reflejos amarillentos, Y su mirada color miel que siempre se mostraba pasiva.

-¿Y…? – interrumpió mis pensamientos

-Eh. Si ¿bien y tu? –dije un poco distraída, y tallandome mis ojos

-¿Pensando en él otra vez, no? y..dime ¿que hicieron anoche? – me dijo mientras me cambiaba el suero.

-¿QUE? ¿Con quien? … ¿¡anoche!? ¿Susi a que te refieres?-pregunte un poco confundida.

-Velo tu misma, ahí esta- Me señalo con la mirada hacia el sillón que estaba a un lado de mi cama.

Y si ahí estaba, un bulto acostado en forma de cuchara en el sillón, podía notar sus perfectos y despeinados rizos, era Harry.

-¿Cuanto tiempo lleva aquí?- le pregunte

-Creo, me dicen, puede ser, que se quedo aquí toda la noche…es guapo eeh, no tienes malos gustos-

-¡Oh! Ya para- le dije aventándole mi almohada

Ahora resulta que todo mundo ya sabia que me gustaba Styles, ¿acaso era tan obvia?

-¿Enserio se quedo toda la noche? – Le dije algo asombrada, y sin poder creérmelo aún

-Si, toda, ¿cuéntame que hicieron? –Me dijo Susi mientras rejuntaba la almohada del suelo que recién le había aventado

-Nada supongo…-dije rascándome la cabeza tratando de recordar alguna cosa de anoche.

(Narra Harry)

Recostado en mi cama, me adentraba en mis pensamientos, porque no dejaba de pensar en Nataly, me había afectado casi no verla, Ya no recordaba a la sonriente Naty, a la entusiasta y segura, Ahora la veía pequeña, y con la gran necesidad de protegerla, en verdad me había afectado demasiado verla en ese pequeña y fría habitación estos últimos meses, no sabia lo que tenia y al parecer nadie sabia, o tenían miedo de decirlo, me mataba no poder tenerla aquí y abrazarla, me mataba no poder estar junto a ella en este momento y decirle lo mucho que la quiero, nose que seria mi vida sin ella, ella es mi todo, conocía absolutamente todo de mi era mi mejor amiga desde los 7 años, y sin ella que? … que pasaba? A quien le iba a llamar cuando estuviera triste, con quien me iba a desahogar, con quien me desvelaría con una sonrisa en mi rostro, con quien me reiría si no es con ella.. Ya! Contrólate – me decía a mi mismo, si fuera algo grave ella ya me lo hubiera dicho no?…..Ella saldría de ese lugar pronto lose, ella es fuerte, pero me mataba cuando ella me decía que no, que no lo era, y que ya no aguantaría esto, nose a que se referia, pero no podía permitir de que perdiera la fe, y menos de que me viera a mi perderla… Debia ser fuerte por los dos… como ella lo fue hace años conmigo.

(Flashback)

-¿Que te sucede, vecino? – me pregunto, una niñita que se acercaba lentamente hacia mi de aproximadamente de mi edad, 7 años.

-Porque lo dices? – que pregunta tan tonta, porque mas me iva a preguntarme eso, si estaba sentado en la banqueta con los ojos hinchados y no paraba de llorar..

-Emm… soy Nataly, mucho gusto – me dijo con una sonrisa en su rostro, era hermosa, tenia unos bellos ojos azules y tenia su pelo castaño amarrado en una trenza y con un lindo moño azul, el cual combinaba perfectamente con su vestido..

-Harold.- le dije, un poco triste

-Lindo nombre – me dijo todavía con su sonrisa en el rostro, sentándose a un lado de mi

- Me puedes decir Harry- Le dije mirándola con una sonrisa un poco finjida

- ¿Y? ¿Me vas a decir que tienes?- me preguntó curiosa.

No le respondí, decidí callarme en vez de decirle, que no tenía ganas de hablar con nadie.

- Si no quieres, no importa, vivo al lado asi que si quieres puedes venir….- señalo su casa con una sonrisa de oreja a oreja ¿Qué esa niña, nunca dejaba de sonreir?- me dije a mi mismo.

-Ok, vamos- le dije, mientras me paraba, de alguna manera, me saco de mi tristeza, nose como lo logro, nadie me la podía quitar.

-Si vamos- dijo mientras se paraba y me dirigía hacia su casa..

-¡¡Mamá!! , tengo un nuevo amigo- grito en cuanto toco el interior de su casa , al llegar lo primero que vi fueron sus hermosos sillones color hueso, con almohadas verdes sobre ellos.

-¡Que bueno pequeña!- dijo una voz femenina que venia de el piso de arriba

-¿Quieres jugar? – preguntó, mientras sacaba de el cajonero un twister.

-Si – dije emocionado -es mi juego preferido-

-También el mío – con una sonrisa de oreja a oreja

Era de verdad muy divertido, ella era pequeña asi que le costaba demasiado tocar algún color, yo solo me reía, y le hacia bromas sobre su pequeño cuerpo, ella solo me veía desafiante y me decía “Ve y aprende” 

yo solo reia, y giraba la ruleta para ver en que color nos tocaría.

-Nata… ¿Hola?- me observo de pies a cabeza, supongo que ella era su mamá, era ella solo que en adulta y en vez de ojos azules, los de ella eran de un color miel.

-Hola mami , ella es mi mami Harry – me dijo, manteniéndose en su posición de juego

- Hola mami de ____- dije un poco incómodo ya que mi posición no me favorecía.

-Dime Martha – Me dijo sonriente

-Ok-is- respondí antes de caerme y tirar a Nataly al suelo.

-Naty, tengo que ir con tu papá, tengo que cuidarlo, hay comida en el microondas y leche en el refrigerador, cuídate hermosa vuelvo antes de lo que te imaginas- Le dijo a Nataly lanzándole un beso y saliendo por la puerta rumbo a su coche.

Hubo un silencio incómodo, después de que salió Martha.

-¿Qué tiene tu papa? – dije, rompiendo el silencio

-Ah.. él esta enfermo, pero se pondrá mejor ¡ya veras!- me dijo con la mirada baja.

-Mis padres se están divorciando- dije, lo que me estaba matando antes de que Nataly llegara, se lo tenia que decir a alguien y con ella me sentía agusto, sabia que era de confianza, tenia a alguien en quien confiar.

-Harry- dijo mientras me abrazaba, nunca antes me habían abrazado de esa manera – Todo, estará bien – me dijo, mientras besaba mi frente, era un poco raro, jamas una niña había hecho eso por mi, jamas..

-Gracias… ¿quieres quedarte a dormir en mi casa? – vi como se le iluminaba su cara.

-¡Enserio! nunca me habían invitado a quedarme a dormir en ninguna casa- me dijo emocionada y sin dejar de sonreir, estaba empezando a acostumbrarme a esa sonrisa.

- Voy por mis cosas, al ratito llego a tu casa, a y te tengo que dar algo- me dijo mientras se dirigía a la cajonera y sacaba dos pequeños radios-

-Ten para que estemos siempre comunicados – me dijo mientras me lo entregaba.

- Ok.. te veo alla y gracias – dije mientras salía por la puerta

-¡DENADA! – sentí como su grito palpito en mis tímpanos.

(Fin de flashback)

Please...don't forget meDonde viven las historias. Descúbrelo ahora