32. Quiero aterrizar en tu corazón-Larry Stylinson 💕 Terminada.

II.

Tras regresar a los Ángeles unos días después y de que Jennifer se quedase en Londres pues no podía moverse hasta estar fuera de peligro, Harry y el resto de la tripulación volvieron a sus casas.

El marido de la azafata junto con sus padres viajaron hasta allá, para estar con ella pies estaba muy delicada, sus compañeras sabían que ya no volvería, por lo que estaban sin compañera para el siguiente vuelo que tenían por destino.

...-Jennifer estará de baja el resto del embarazo. Ahora me imagino que enviarán a alguien para ocupar su puesto - Dijo Gloria a Greta, otra de las azafatas, mientras se tomaban un café.

-Ha tenido mucha suerte, por poco pierde al bebé por no dejar el trabajo y cobrar el 100% del sueldo.... Pobre  seguro que les hace mucha falta, ahora tendrá muchos gastos.—dijo Greta.

-Si seguro que sí.  Bueno, ver a quien nos mandan en su lugar. Espero que no sea una novata, odio tener que explicarles todo de nuevo y siempre suelo trabajar el doble hasta que cogen el ritmo.-volvió a decir Gloria molesta.

Unos días después.

...-Hola señor, soy Louis Tomlinson y me han destinado para cubrir una baja en este vuelo.

Harry se giró al escuchar la voz a sus espaldas y ante él estaba un chico con los ojos azules más hermosos que había visto nunca.

-Ho-Hola, soy el comandante Styles mucho gusto— dijo extendiendo la mano para estrechársela al nuevo auxiliar—Bienvenido a bordo.

Gloria, Greta y las otras dos auxiliares además de Kevin el copiloto, también se presentaron y saludaron a Louis.

...-Bueno señores, nuestro vuelo está a punto de salir. El trabajo nos espera-dijo Harry cogiendo su maleta.

Los demás miembros de su tripulación lo siguieron hablando y sonriendo al nuevo compañero, mientras el ojiverde los escuchaba sin prestar demasiada atención.

...-¿Eres de aquí Louis?-preguntó Gloria.

-No, yo nací en un pueblo de Inglaterra.... Me vine para aquí con once años, ya que mis padres se separaron y a mi madre la trasladaron a los Ángeles.-explicó sonriente el auxiliar de vuelo.

Los pasajeros subieron y los chicos y las chicas empezaron su trabajo, atendiendo amablemente y entonces Gloria respiró tranquila pues vio que Louis venía de otra compañía aérea y sabía muy bien lo que tenía que hacer.

Esta vez el vuelo fue a Roma, era largo de unas 12 horas pero a Harry le apasionaba su trabajo y no temía nada, además ya había recorrido prácticamente todos los continentes del mundo.

Después de varias horas de vuelo y de hacer todas las comprobaciones pertinentes, Harry puso el piloto automático un rato, para así mientras poder ir al servicio y comer algo.

Al pasar hacia el baño, el comandante vio a Louis que lo miraba fijamente pero lo ignoró, al regreso volvió a mirar donde Louis estaba y este lo miraba de nuevo pero esta vez el ojiazul le sonrió.

Cuando el piloto se sentó en su asiento, este les trajo la bandeja de la comida.

-Que aproveche señores-dijo con una sonrisa de oreja a oreja mirando a Harry.

-G-Gracias Tomlinson-dijo el Comandante embobado.

El ojiverde respiró de nuevo cuando el auxiliar se fue pues sus ojos tan azules lo hacían perder el rumbo e irse a la mierda y no sabría que hacer si Louis continuaba mirándolo así.

Tras terminarse la comida, Kevin recogió las bandejas y las dejó a un lado para que luego el auxiliar se las llevase y después volvió a los controles junto a su comandante quien desconectó el piloto automático y cogió de nuevo los mandos del avión.

-Es lindo el nuevo auxiliar ¿no le parece?-habló Kevin.

El comandante lo miró y encogió los hombros, al mismo tiempo que Louis regresaba a por las bandejas pero se quedó escuchando tras la cortina.

-Yo si creo que es muy lindo. Quizás le pida una cita-dijo el copiloto convencido.

-No te recomiendo salir con alguien del trabajo. Luego si sale mal se enrarece el ambiente y se va todo a la mierda. Tu tranquilidad, tu carrera, etc.... Ti vida se volverá un infierno-refunfuñó el comandante.

-Pero aún así merecería la pena, ¿De veras no ha visto esos ojos, esa cara y ese culo?.—Kevin se relamía pensando.

-Si los he visto pero aún así no te lo recomiendo-dijo Harry seriamente.

Louis se quedó intrigado pues porqué el comandante estaba tan seguro de lo que pasaría, el ojiazul pensó que quizás le habría sucedido eso alguna vez y por eso hablaba así.

-Buff...por un culo así, me conformaría con pilotar una bicicleta por el resto de mi vida, se lo aseguro-dijo riendo Kevin.

-Tu mismo, yo jamás me arriesgaría a perder mi trabajo por echar cuatro polvos-dijo Harry sin inmutarse.

Louis tosió molesto y entró a la cabina del avión, rápidamente recogió las bandejas y se fue, ya que hubiese preferido no haber escuchado nada.

-¿Qué le pasa a ese comandante?, ¿por qué cree que solo sirvo para cuatro polvos?—refunfuñaba el ojiazul volviendo a su puesto bastante molesto y decepcionado— ...menudo imbécil, ¿qué se piensa?. Si yo quisiese, estaría besándome los pies.