Hamilton Pleasures |Serie Hamilton| [TERMINADA] #0.5 <SIN EDITAR>

Capitulo 15: Hace 5 años.

No esperaba esto, realmente no.
Que haces cuando el hombre con el que has estado fantaseando se encuentra tumbado en tu cama totalmente desnudo?

Tirártele encima, obviamente.

Pero como soy rara, me puse arreglar mi ropa para mañana.

-No piensas acostarte conmigo? -su voz salió como si estuviera dolido- Ya estoy listo para ti, linda. No tienes que menear el trasero de esa forma mientras haces lo que sea que estas haciendo.

Meneo mi trasero? Vaya, no me había dado cuenta.

-Que me vendría mejor?  -me doy vuelta y le enseño dos blusas- Cuello en V o Cuello chino?

Me mira sorprendido unos segundos pero luego sonríe

-Cuello chino. No tienes demasiado busto para el cuello en V.

Bufo molesta pero es porque tiene razón. A veces envidio a Alaska por tener un cuerpo muy bien proporcionado mientras yo solo tengo la parte del trasero.

Guardo la blusa y tiro la otra en el sofá individual que esta a la par del armario. Saco un pantalón negro, unos zapatos rojos y lo tiro al sofá.

Siento unas manos en mi diminuta cintura, un cuerpo fuerte detrás de mi y su hombría entre mi trasero.

-Ya no aguanto, Lucia. -gruño- Me tienes adolorido.

Me separe de él, cerré el closet y me voltee a verlo.
El hombre esta muy bien dotado.
Me desnude en menos de un segundo y me tire encima de él, enrollando mis piernas en su cadera. Un minuto después y me estaba follando contra la pared.

Al finalizar nuestra 3 ronda, me acomode en sus brazos. La ultima roda fue en la cama, ya que ninguno podía mantenerse de pie después de la ronde en la pared y el escritorio.

Nunca había conocido a un hombre que me hiciera sentir tan...satisfecha.

-Eso a sido muy bueno -admitió- Mejor de lo que esperaba.

Sonreí traviesa y me acerque a la mesita de noche, estirándome por encima de él. Abrí el cajón y saque unas esposas y un lubricante. Me senté ahorcadas suyas y le enseñe las esposas.

-Todavía no acaba, sexy.

Por supuesto que no acabo ahí...

Una noche paso a ser varias noches. Todo estaba de maravilla con Lucas. Habíamos hecho de todo en todos lados y él se mostraba tan radiante cuando cruzaba por la puerta principal. Éramos felices así, haciéndonos compañía por las noches. Estaba empezando a gustarme...mas que gustarme era otro sentimiento mas profundo.

-Lucy, eres demasiado increíble para ser verdad -susurro en mis labios- Me traes loco con tu cuerpo.

Nos fundimos en un beso apasionado, luego hicimos lo mismo que las noches anteriores.

Hasta ese día en el hospital...

-Es que ese es tu plan? -me miro con odio- Embarazarte de mí para reclamarme y quitarme dinero? Eres una interesada como todas. Por un momento creí que lo nuestro era...

Bufo molesto. Yo no sabia si echarme a llorar o darle un buen puñetazo en su cara de ricachón.

-No quiero un hijo tuyo! -grite- Ni siquiera quiero volver a verte! -me miro con dolor o eso creí por un segundo- Lo "nuestro" se termino acá, Hamilton.

Luego nadie dijo nada...Alaska llego con Chase, Dimi y Derek. Dimi se miraba fatal y paso a la par mía sin mirarme, Derek solo me sonrió, Alaska y Chase se quedaron un rato hablar conmigo.

Salí de ese hospital sin mirar atrás.

Adiós, Lucas.

Los días siguientes no fueron tan diferentes a los anteriores salvo que cuando llegaba a casa, estaba sola. Espere hasta la 2 de la mañana a que Lucas tocara la puerta y me pidiera perdón. Pero por supuesto, eso no ocurrió.

Nunca fui importante para él. Solo fui la chica con la que se acostaba todas las noches.

Yo fui la estúpida que se enamoro...

Salía de fiestas, me acostaba con chicos. Hasta tuve un trio con dos hombres muy buenos, aunque para mi gran suerte -nótese el sarcasmo- los tíos terminaron disfrutando ellos dos. Resultaron mas gay que otra cosa.

Es mas, una semana después, me mandaron mensajes agradeciéndome por esa noche. Ahora son novios!

Lucas no volvió aparecer en mí vida mas que la vez que lo vi en la empresa hablando con Marcus.

Todo empeoro en la boda de Dimi, cuando apareció del brazo de esa chica. Lo peor fue cuando Alaska me conto quien era y...que estaban comprometidos.

Lucas se va a casar.

Las palabras quedaron rodando por mi cabeza toda la ceremonia hasta la fiesta.

Chase le pidió matrimonio a Alaska, estaba feliz por ellos pero también sentía celos.

De repente entendí que estaba muy por afuera de ese mundo. El mundo de los cuentos de hadas donde encuentras al hombre perfecto, se enamoran, se casan y viven felices para siempre.

Yo no tendría ese cuento.

Soy la chica del pueblo, la invisible, rodeada de princesas hermosa. Lucas no era un príncipe que le gustan las campesinas, él solo quiere princesas.

Derek me presento a Henrie, era muy simpático y un hombre perfecto. Yo no lo veía perfecto para mí pero si era el prototipo de perfección. No me moleste en negar su invitación a salir. Tampoco me negué a que me llevara a mi apartamento.
Mucho menos me negué cuando me beso afuera del salón, donde Lucas venia pasando con Alissperra. Henrie se separo sonrojado, algo tierno, dijo que iría por algo de agua para ambos y se fue dejándome en el pasillo. Lucas se acerco, dejando a la perra suelta, quien entro al salón algo enojada.

-Vaya, Lucia. Eres rápida.

Bufe molesta y me dispuse a irme cuando me beso. Como si lo "nuestro" siguiera ahí. Me cargo en brazos y me llevo al baño.

Me sentó en el lavabo y subió mi vestido hasta mi cintura, quito mis bragas con desesperación para luego meter tres de sus dedos. Me aferre a sus hombros con fuerza mientras la cabeza me daba vuelta por el placer. Luego sentí su lengua acariciando mi zona sensible...

Follamos ahí, en el baño. El día de la boda de Dimi, con su prometida a unos metros de nosotros y mi posible futuro ligue.

-Esto es algo que él jamás podrá darte. -jadeo mientras movía sus caderas haciéndome gritar de placer- Solo yo puedo satisfacerte así, linda. Eres solo mía...

Hizo que me pusiera de pie enfrente de él. Se separo de mí, me dio un beso fugaz en los labios para luego darme la vuelta. Apoye las manos en el lavamanos, jalo de mis caderas y me follo por atrás.

Porque eso hacíamos, follarnos con desesperación. Estaba siendo rudo pero no me importaba en absoluto.

Cuando terminamos solo me dio un suave beso en los labios. Salió del baño dejándome agotada pero muy satisfecha. Solo él podía hacerme tantas...maravillas.

Luego de eso, no volvimos a vernos....