Después de ti

Sorpresa

Bueno , como le comente a una lectora. yo estudio de día y trabajo de noche y a veces el día no tiene las suficientes horas, por eso mismo e decidido dejar de escri.... broma jejjje por eso mismo a veces me demorare en actualizar, pero quiero que sepan que la historia tendrá un final y la terminare :D saludos y disfruten el capitulo.

Cuando desperté estaba acostada en la cama con la cabeza entre las sábanas, podía adivinar que era mi cama por las sábanas lilas que me regaló Charlie, estaba sin pantalón y me habían puesto calcetines, apostaría a que Charlie fue el que me subió a mi habitación, pero ¿cómo no sentí eso? Saqué mi cabeza de entre las sábanas y se filtraba la luz por la ventana, eso era imposible no pude haber dormido tanto cuando llegamos de la cafetería estaba oscureciendo. Luego de la conversación con Mamá me quedé dormida y ahora estaba en mi habitación y por la ventana se veía luz solar. Quizás todo había Sido un sueño y Renée no había venido, eso explicaría por qué no sentí que me acostaran, en realidad llegue a la cama sola y todo fue un largo sueño. Miro el despertador y son casi las diez de la mañana, si definitivamente estuve soñando porque si no fuera así habría dormido casi doce horas, jamás he dormido tanto y menos estos últimos meses.

Decidida me levantó me enfundó un pantalón y bajó la escalera, a medida que voy bajando escucho unas voces que provienen de la cocina, veo que en la sala hay una cama improvisada y dejo de creerme que estuve soñando, Renée sí vino y si dormí casi 12 horas o quizás más. Al llegar a la cocina veo a mis padres, ambos sentados desayunando.

-Hola.

-Hola hija, te dejamos dormir para que descansaras bien ¿Tienes hambre? - Me preguntó mamá con una sonrisa en la cara.

-Un poco.

-Entonces siéntate yo te preparo el desayuno- se levantó de su asiento y yo me senté en el espacio libre junto a Charlie

- Bien. - miré a Charlie que me miraba con preocupación.

- ¿Te sientes mejor? Digo por lo de ayer en la camioneta. - Asentí.

- No te preocupes, solo fue demasiada comida- Le dije con una mueca.

-Está bien- Y volvió A su café.

- ¿Cómo llegué a mi cama?

- Te subí.

- ¿Enserio? Ósea ¿No es mucho? Ya no tengo cinco años y no peso 30 kilos.

- Jajaja Bells no pesas nada, eres muy liviana, lo que sí me costó fue hacer que cupieras por la escalera, no pesas mucho pero con tu porte no es muy cómodo subir por ella.

-Anoche a penas Charlie llegó te subió y te recostó, luego te quité ese incomodo jeans y te puse unos calientitos calcetines. - Dijo mamá mientras me acercaba un plato con cereal y leche.

- Yo no sentí nada de eso.

-Nos dimos cuenta, estabas casi inconsciente. - Dijo Charlie.

- ¿Cómo está Billy?

- Está bien, con un problema en su espalda pero bien. Tiene suerte de tener a Jacob, él lo ayuda mucho, es un gran chico.

-Si él es un gran chico. - Afirmé recordando que hace mucho no lo veía y que la última vez que lo vi fue el día de mi cumpleaños.

- Deberías ir a verlo. Billy comentó que tiene unos problemas en la escuela, con ciencias. Yo sé que eres buena con eso. Deberías ayudarle y distraerte un poco, ustedes se llevan bien.

- ¿Cómo sabes que soy buena en ciencias?

- Hija a Charlie le llega tu boletín de calificaciones ¿Lo olvidas? Aparte siempre ha sabido que estás en biología avanzada. Ambos sabemos que tu fuerte son las ciencias y la literatura. Come tu cereal. - Lo había olvidado, comencé a comer lentamente mi desayuno o al parecer parte de él porque Después de unos minutos Renée me acercó un plato con huevos fritos y tocino que asemeja una cara sonriente, sacando a la vez una sonrisa en mi rostro por la ocurrencia de mamá.