21

486 47 9
                                    


Ambos estábamos vestidos y sentados a un lado de la mesa de madera, habíamos terminado ya hace unos minutos y nos encontrábamos perfectamente bien, el problema era que no pudimos salir del salón. Si, este estaba cerrado con llave, supuse de inmediato que los guardias que habían pasado mientras estábamos ocupados fueron los que nos encerraron. No teníamos nada que hacer, bueno, ambos sabíamos cuál era la última opción que teníamos.

Ya era tarde y el edificio estaba completamente inhabitado, por más que gritásemos nadie vendría en nuestra búsqueda. Tampoco había otra salida más que esa puerta, no a menos que deseásemos rompernos algunos huesos y lanzarnos por la ventana enorme.

Definitivamente solo teníamos una opción. Aunque a ninguno de los dos le agradaba la idea.

Tome mi celular y lo mire dudoso, lleve mi mirada hasta Sawamura, el me la devolvió y soltó un suspiro antes de hablar.

- Solo llámalo, no tenemos de otra – dijo

- Jamás nos dejara olvidar esto

- Lo sé, pero no tenemos opción

Y marque el número de Kuramochi. Entonces, se avecinó otro gran susto, el idiota no contestaba el celular, ¿y ahora qué? Fue lo que pensé rápidamente. La otra solución sería pasar la noche en este lugar, idea que a ninguno de los dos nos agradaba demasiado. Corte la llamada y solté un suspiro, es bastante extraño que él no conteste su celular, en especial si aún no es tan tarde, para nada.

Decidimos esperar unos minutos antes de volver a llamarlo.

- Miyuki, recuerda que dentro de poco es mi exposición fotográfica – dijo distraídamente Sawamura, él estaba de pie frente a la ventana mirando por esta, era una gran vista a todo el campo, en especial al diamante

- Lo sé – dije abrazándolo por su espalda, repose mi mentón en su hombro y mire por la gran ventana ante nosotros, definitivamente era una gran vista – tu recuerda que tengo un partido bastante importante dentro de poco y quiero que vengas ese día

- Lo sé – me imito – aunque aún no confirman la fecha

- Estas bastante informado – dije burlonamente

- Claro que si – contesto él y la verdad es que me tense un poco – después de todo puede que me pidan a mí el venir a tomar las fotografías para un artículo – entonces me decepcione un poco, lo admito, me gusta sentirme como algo sumamente importante y vital para él. y al parecer todo lo sucedido en mi cabeza fue notado de inmediato – además, mi novio es el gran cátcher del equipo que jugara, no puedo perdérmelo – dijo en voz baja, sabía que se avergonzaba de decir todo esto.

Y pensé en besarlo, pero el sonido de mi celular mando a un lugar lejano estos planes, claramente era Kuramochi. Solté un suspiro de alivio al contestar la llamada, pero no me sentí tan aliviado en el minuto en que escuchaba su risa al contarle todo, además de la de Ryosuke que lo acompañaba, entonces, empezaron a trazar un verdadero plan para sacarnos de aquí.

Me sorprendió bastante el hecho de que esos dos supieran con lujo de detalle los puntos ciegos de las cámaras de seguridad y algunos datos importantes para cometer un perfecto allanamiento de morada.

- Kuramochi-san, Aniki, de verdad son increíbles – dijo Sawamura, podía notar el brillo de sus ojos que muestra cuando de verdad se encuentra impresionado

- No es para tanto – escuche que decía Kuramochi

- ¿Cómo saben todas estas cosas? – pregunto Sawamura, entonces fue mi turno para reír en voz alta

Creo que es graciosoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora