Mi amado yakuza [Makoharu-Sourin]

Capítulo 22: Tan hermoso como la luna.

He tardado bastante lo sé, espero que el capítulo sea de su agrado.

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Haruka se sintió extraño en la amplísima habitación que se le había asignado, pensó que por lo menos Makoto estaría con él.

Pero desde que habían llegado el castaño no había hecho mas que hacer sus pendientes.

No es que no estuviera acostumbrado a estar solo o por lo menos no lo tolerara pero no es lo mismo estar solo en tu propio y cómodo entorno a uno completamente desconocido y poco familiar.

Le había costado unas 100 vueltas en la cama dormirse y apenas lo había conseguido un par de horas, cuando una emocionada Gou prácticamente había tumbado la puerta de la habitación para echarle en cara su itinerario del día que comenzaba con un desayuno en el jardín de estilo japonés junto a su querido suegro en el que Haru no consiguió que el hombre le quitara la mirada de encima en toda la velada.

El pelinegro sabia que detrás de esa refrescante sonrisa había un hombre despiadado y sin escrúpulos, pero que se preocupaba por sus hijos, porque si el moreno consideraba a Makoto su otro hijo.

Haruka suspiro resignado cuando fue arrastrado con Gou a su día de Spa, intento negarse pero la persistente pelirroja argumento "A falta de hermanas, quedan tu y Rin, pero él no puede..."

El de los ojos azules sintiéndose culpable, la dejo hacer lo que quisiera después de todo era su día especial, no hubiera estado de más rehusarse a ciertas cosas.

Como cuando le depilaron el vello de sus partes íntimas y le había dolido como el demonio, ya se lo esperaba pero la chica insistió hasta el cansancio alegando que eso le gustaría a "Makoto-san" haciéndole sonrojarse hasta la raíz del cabello y aún así accedió a ello como un idiota.

Haruka se dejo caer en el suave colchón a eso de las 5 de la tarde, tenia por lo menos unas dos horas antes de comenzar a prepararse para la fiesta para recuperar el sueño perdido.

...

Rin observaba como Kisumi sonreía hablando con su hermano menor, parecía una persona completamente diferente.

Hasta que el pelirrosa menor toco un tema que desde la noche anterior cuando el chico de unos 18 años había ido a visitar a su hermano mayor tomándolo por sorpresa, se había vuelto tabú, Kisumi se había preocupado por nada porque el menor había congeniado de maravilla con Rin.

-Entonces, puedo acompañar a Rin-san a la fiesta de compromiso de su hermana? - preguntó por milésima vez Hayato.

-No- la respuesta de Kisumi fue escueta y contundente, pero el pelirrojo se dio cuenta que si el pequeño insistía un poco más tendría lo que quería.

-¿Por que no? Quiero ver a Makoto-niisan y Sousuke-niisan- se quejó Hayato, Rin también quería ver al moreno, era un masoquista.

-Porque no y que no se hable más del tema- ordenó Kisumi caminando a la cocina a servirse una taza de café, pero como imagino Rin el tema no iba a quedar ahí.

-No me importa lo que digas, voy a ir- retó el menor, haciendo que Kisumi detuviera la taza a mitad de camino de sus labios.

-¿Que dijiste?- empleo un tono letal, que hizo a Rin encogerse en su asiento.