Gran Cambio

Capítulo 9.-Elías vs Adren

—Me cuesta creerlo —dice el canoso.

—¿Hm? ¿Por qué? —cuestiona la ahora chica.

—Quiero decir, incluso tu personalidad ha cambiado por completo —comenta Gilbert.

Ambos guerreros se encuentran en un balcón, Elías recargada de espaldas sobre el barandal y Gilbert apoyado con sus brazos mientras sujeta su frente.

—¿Mi personalidad? Nunca la mostré en primer lugar —dice Elías—. La creé para lidiar con el estrés de ser un general, pero, incluso comencé a actuar así en casa....por lo que podría decirse que esto es un respiro.

—Aunque no deja de parecerme extraño, tú, pareciese como si te hubieras resignado a vivir como chica.

—Gilbert, ¿Tiene caso pensar sobre eso en todo momento? Sólo razona un poco, prefiero disfrutar estas "vacaciones" ya que eventualmente volveré a ser hombre y me encargaré de entrenarlos a fondo —Elías sonríe mientras extiende su mano.

—Sí.......

El canoso aprieta la mano de su general mientras ambos sellan su apretón de manos. Con eso, Elías se propone ir de regreso a la habitación.

—¿Te gusta Jisel? —cuestiona Gilbert directamente—. Llevo tiempo pregu-

—¿A qué viene eso? Supongo que ya sabes la respuesta después de todo —contesta la pelinegra para luego tomar un bocado de aire—. Efectivamente, me gusta Rin.

—Aunque, ya no tengas oportunidad con ella —declara Gilbert.

—Está bien, ganaste. No soy rencorosa...... ¿Eh? —Elias se tapa la boca al oír como respondió.

Gilbert mira a la Asmoth sin entender del todo su conducta hasta que llegó a una conclusión tras analizar la frase.

—T-Tú ¿Hablaste como mujer? —cuestiona Gilbert.

—Supongo que será cuestión de tiempo antes de que la maldición termine de hacer efecto —menciona la ahora chica.

—Eso significa......

—que habrá un momento dónde dejaré de poder resistirme —completa Elías.

Con eso dicho, ambos dieron por finalizada esta plática. Luego de eso, llegó la parte más difícil del día, pues rentaron una habitación para chicos y otra para chicas.

—¡No! —exclama Jisel cruzando los brazos.

—P-Pero, no es correcto que un hombre y una mujer duerman juntos —comenta la Asmoth.

—No hay problema, porque, ahora eres una chica —responde Jisel—. Pero, ¿Sabes? Siempre quise tener a otra chica para hablar, aunque soy la única en el Tzar.

Elías sintió como la primer frase de su subordinada terminó con su oposición, ya que aunque el se siga sintiendo como un hombre, no puede escapar de la realidad.

—Jisel, Elías no conoce nada de cosas de chicas —responde Gilbert.

—Jajaja, cierto —musita Rin.

Con eso zanjado, ambos grupos proceden a dormir en dos habitaciones, debido a que nadie estaba de humor para algo más que dormir, ninguno de los dos grupos puso atención a la habitación.

Elías tiende varias sábanas en el suelo, dado que tan sólo hay una cama en la habitación.

—¿No quieres que durmamos juntas? —cuestiona Rin algo decepcionada.

—¿Q-Qué dices? Aún si ahora soy una chica anteriormente fui un hombre y tu general —responde la pelinegra.

—Aunque pareces muy cercana al príncipe —dice la pelimorada con cara de satisfacción.