°•10•°

2.6K 260 47
                                    

Todas las miradas iban dirigidas al nuevo estudiante, quien esbozó una sonrisa de esas que dejan mucho por pensar.

Suho: Hola un gusto mi nombre es Suho Jung... espero llevarnos bien -- la última frase fue dirigida a (___), como si le estuviera hablando a ella.

Profesor: ohh!! Es pariente del alumno Hoseok?? -- todos voltearon hacia él esperando alguna respuesta por parte de ambos, pero ninguno logró responder.

Suho: Si, Hoseok es mi queridisimo primo.

Esa arrogantes palabras causaban un cierto enojo en (___) y Hoseok, quienes observaban expectantes al chico que se encontraba al frente. Ambos sabían quien era Suho, en especial Jung, él conocía las mañas de su primo. Por su parte (___), sabía claramente que Suho no era quien aparentaba ser.
Si no lo hubiera visto en el callejón, las cosas abrían sido distintas, pera nadie puede cambias los echos. Él no era lo que aparentaba ser.

(___), seguía muy concentrada en la presencia  del chico. Luego volteo su vista a su compañero de Banco quien mantenía una mirada sería, más de lo común, sus puños se cerraron ejerciendo mucho presión, se lograba distinguir perfectamente las venas de su cuello.

" esto no es nada Bueno "

ese pensamiento paso como Flash en su cabeza. 

Profesor: por favor tome asiento al lado de la señorita Selhu.

Una sensación de alivio fue lo que sintió  (___) al ver que el tal "Suho" estaba a una distancia considerable de ella.

Las primeras horas fueron terrible, ninguno lograba llegar a tener sus pensamientos al 100% .

Algo les molestaba, algo les preocupaba.

Toda las siguientes horas estaban cargadas de tensión. El solo respirar era motivo de nerviosismo.

" vamos, tú no has hecho nada malo, no hay por qué temer "

Esa frase no ayudaba a que su sentido común volviera al igual que su alma.

El día transcurrió algo así como normal.
En todas las horas siempre había cruces de miradas tanto de Hoseok  con su primo o de ella con su primo.

Un revoltijo en el estómago produjo que ella palideciera más.

Los nervios muchas veces suelen hacerte una mala jugada.

El final del día llego, todos salían despavoridos del Instituto, muchos con ganas de volver a la calidez de sus hogares. Otros simplemente por que ya no quería permanecer ahí dentro.

Una sorpresa fue lo que tuvo al encontrarse con Suho en la entrada.

Suho: hasta que al fin sales!! -- exclamó este con algo de sorna.

Para estas instancias (___) ya sufría un paro cardíaco.

Como era posible, ni siquiera conocía a aquel sujeto, sólo lo había visto golpeando brutalmente en un callejón junto a sus matones a su vecino de al lado.

¿¿Por que habría de temer???

Suho: estas bien?? -- los sentidos de la joven aún seguía desconcertados.

(___): si, con permiso, necesito irme rápido. -- sin darle tiempo a decir nada más, ella fugazmente desapareció por el largo camino.

Camino un par de cuadras y por fin liberó todo el aire contenido en sus pulmones.

Esté día estaba cargado de sorpresas.

No entendía la razón de nada.  Tampoco quería ser una entrometida en la vida de su vecino.

Las diferentes cuadras restantes hasta llegar a su destino se la paso pensando en lo sucedido ese viernes a la tarde.

(___): Mierda... por que fui por ahí. Si tan sólo hubiera seguido mi camino habitual.

Al llegar a su piso, la puerta de su vecino estaba abierta... un poco sorprendida y algo asustada asomo su cabeza por el margen de la puerta.

Se horrorizo al ver la destrucción total del lugar.
Los diferentes muebles estaban de cabeza, los diferentes cristales estaban echos añicos, varios floreros rotos, es como si alguien estuviera en busca de algo que no puedo encontrar.

Ella estaba dispuesta a realizar una llamada a la policía.

Pero ciertas manos taparon su boca de improviso.

Un pánico y una desesperación la consumieron a tal punto de hacer que su sistema respiratorio comenzará a fallar.

Para desgracia de ella volvió a tener ese ataque de asma que hace tiempos no tenía.

Esas manos impedian que una gran cantidad de aire pudiera entrar en ella.

Con el poco valor que le quedaba dio un pequeño giro encontrándose con los rasgos bien afilados de su vecino quien no caía en cuestas del daño que estaba sufriendo su vecina. Está, por su parte pudo relajarse solo un poco. Su vecino no era un peligro.

Jung con un pequeño gesto hizo señas para que está guardará el mayor silencio posible.

Ante estas muecas ella captó rápido que debía de estar lo más callada posible.

Hoseok: vete -- susurro muy bajo...

Sin darle tiempo a reaccionar La posicionó delante de su respectiva puerta de la chica y se alejó para poder ver quien había entrado a su hogar.



Las horas pasaban, ella caminaba de un lado hacia el otro intentando calmar un poco su ansiedad.

Que hacer???

(___): calma, él esta bien.... No es asunto tuyo... No, No te metas...

Por más que sus palabras tratarán de hacerla entrar en razón, ella era demasiado impulsiva.

Sin pensárselo dos veces ella desapareció por su puerta.

Al llegar adelante de la puerta de su vecino tomó una serie de suspiros que en lugar de tranquilizarla, la ponían más nerviosa, pues no sabía con lo que se encontraría del otro lado de la puerta.

Llamo a la puerta pero esta se abrió muy lentamente dejando ver una pequeñísima ranura. Sin pensárselo mucho entro por esta.

El lugar seguía igual, todo un lío, las cosas aun tiradas pero para su sorpresa un par de voces provenientes del cuarto del joven se hacían oir.

Con más cautela que antes encaminó sus temblorosos pasos hacia donde provenían los sonidos.

Al llegar quedó perpleja con la imagen ante sus ojos.

Hoseok estaba nuevamente en el piso sangrando, pero esta vez era peor, el chico estaba casi muerto.

Y al pie de la cama volvió a ver a su primo y a sus matones quienes desesperadamente buscaban algo entre las pertenencias del joven.

Suho: Donde  coños los guardaste??? -- con toda la ira del mundo sujeto la cabellera del caído y la agitó brutalmente, produciendo quejidos por parte de Hoseok.-- y encontraron Algo?? -- sus matones negaron aún revolviendo entre los cajones. -- Maldición -- bramo como más odio.

Toda aquella escena era precensiada por (___), quien dejaba escapar pequeñas lagrimas ante la escena tan lamentable de su vecino.

El muchacho guardaba total silencio ante todo.

Suho ya estaba en sus límites, no permitiría por nada del mundo que su primo obtuviera la herencia. De eso jamás.

Sin pensárselo mucho volteo su mirada.

Sus ojos estaban inyectados en sangre . 



Enredados (J-hope y tu)  (En Corrección)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora