°•39•°

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Ghimena paso una tarde agradable con su padre, Carlota y su hijo no aparecieron nunca.

Sentía que su padre estaba siendo olvidado por todo el mundo, incluso hasta por ella.

Se sintió pésima ante el hecho que era toda aquella situacion.

Llegaron de vuelta a la casa de su padre.

Todas las luces estaban apagadas.

En el interior había una fría corriente,  los empleados ya se habían ido. Se sorprendió al no ver la cena en la en la mesa.

Ya eran las 20:00 aproximadamente.

Ghimena: Papá no hay nadie en casa..

Esteban: jamás hay nadie en casa, Carlota siempre viene por el medio dia. -- sonrío ante su respuesta -- tenemos que ir a un último lugar, lo último que haré para reparar mi error contigo.

Ghimena: con todo esto ya es suficiente Papá, no necesito mas nada.

Esteban: mi niña, siempre tan tú... anda ven -- la toma y se fueron para le segunda planta.

La chica se dirigió a una pequeña habitación, sobre la cama había una caja color rosa bebé con un pequeño lazo Fucsia.

La caja contenía un vestido negro, con pequeños detalles en plateado.
Era un vestido hermoso, le llegaba hasta un poco más arriba de las rodillas.

Dejo su cabello suelto e hizo un par de bucles. 
Para completar su vestimenta, remató con unos zapatos altos de color negro.

Sus ojos era lo que más resaltaba.

Bajo a la sala donde se encontró a su padre vestido con un traje negro con una camisa blanca.

Esteban: eres igual a tu madre...

Ghimena: Gracias..

Ambos salieron y se fueron a uno de los restaurantes cinco estrellas de la zona.

Un lugar muy lindo, ya en la entrada uno podía distinguir el rango categórico del lugar.

En este lugar no podría comer una hamburguesa con papas.

Al llegar los recibió un banderín, que se encargó de llevar el auto a un estacionamiento privado del lugar.

Ghimena: Papá esto es mucho, vomanos en casa...

El padre hizo oídos sordos a las palabras de su hija.

El sabía que no tenía mucho tiempo y en cualquier momento él podría dejar de estar en la faz de la tierra.
No podía dejar a su hija sola.

Una gran sorpresa para Ghime fue ver que en la mesa que su padre había reservado, estaban un grupo de perosnas.

Al principio no le tomó importancia.

Pero luego se fijó en el chico que estaba jugando con su teléfono en la mesa.

Ella podría jurar que aquel individuo era la copia de Yoongi solo que este estaba de traje.

Un hombre muy bien parecido se levantó y estrechó la mano de su padre.

Esteban: Kiotho, tanto tiempo viejo amigo!!! -- exclamó con total felicidad. -- te quiero presentar a mi hija Ghimena, Ghimena él es Kiotho Min. Un muy buen amigo mío. -- al escuchar el apellido  quedó casi de piedra. -- hija??

Ghimena: ahh??ahh!! Lo siento, un gusto señor...

Kiotho: la haz educado bien Esteban... es una dulce niña -- sonrío ampliamente -- mira ella es mi mujer, Marta, y el mi hijo Yoongi...

Enredados (J-hope y tu)  (En Corrección)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora