Capítulo 9

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Oh oh.

- Simón, ¿me vas a contestar o vas a quedarte ahí parado perdido en tus pensamientos? - le dice Emma, mi vecina.

Yo incómoda, golpeo el brazo de Simón.

- ¿Qué? Ah, si. Sólo estábamos bailando Emma, no te interesa. - le contesta fríamente Simón.

Okey, incómodo.

- ¿Justo a la misma fiesta en la que estoy yo? - pregunta mi vecina - todos sabemos que viniste por mi pero lamentablemente me viste con ese chico y no tuviste más que hacer que irte con esta.. zorra.- dice riendo arrogante.

OH NO, ESO NO LO DIJO.

Cuando estaba por contestarle noté que Simón había quedado en silencio, perdido en sus pensamientos.

No iba a comenzar una pelea, ella es su ex novia y yo sólo una desconocida que intentó hacerle pasar un buen momento.

- Te equivocas Emma, no vine por ti ahora si me disculpas..- cuando sigue hablando no lo escucho ya que suena mi celular en el bolso.

Lo busco y veo una llamada de un número desconocido.

Extrañada atiendo y espero a que hablen, se escucha la sirena de la ambulancia.

- ¿Hola?

- ¿Habla la señorita Sara Brown?

- Si soy yo, ¿que pasa?

En ese momento siento la música de adentro subirse aún más así que me alejo un poco para poder escuchar.

- Disculpe, ¿que me ha dicho?

- ¿Usted es familiar de Will o de Melisa Brown?

- Si, ¿me puede decir que pasó con ellos? - digo ya con impaciencia.

- Acaban de tener un accidente automovilístico.

Accidente. Automovilístico.

Esas dos palabras se repetían en mi cabeza. Sentí como si el mundo cayera a mis pies, no escuché más nada a mi alrededor. Escuchaba esas dos palabras repetirse y mis pensamientos, mis miedos, mis preocupaciones.

Escucho cuando me dicen la dirección del hospital y sin importarme nada, me sacó mis zapatos y comienzo a correr.

Entro a la casa nuevamente y empujo a las personas para poder pasar. El aire me golpea fuertemente, pero sin importarme salgo a correr.

Corro, corro y corro por varios minutos.

Cuando menos lo pienso estoy preguntando a una enfermera por mis padres.

Me dicen que tenía que esperar en la sala así que, me siento en el suelo y espero.

Así estoy por varias horas, sola hasta que sale un doctor...

- ¿Familia Brown? - llama el doctor con una libreta en su mano, se saca los guantes mientras que yo me levanto rápidamente y me acerco.

No tenía ni voz para preguntarle como estaban ellos.

- ¿Usted es su hija? - asiento - Mira, el accidente todavía no se como fue, lo que si sé es que tu madre se golpeó fuertemente la cabeza, perdió el conocimiento y estamos esperando a que pasen 24 horas para saber de su estabilidad..- lo interrumpo.

- ¿Y si no despierta en 24 horas? - le pregunto con temor y con el nudo en mi garganta.

- Ella.. puede quedar en coma. - siento como miles de emociones recorren mi cuerpo.

- Y.. ¿mi padre? ¿Puedo pasar a verlo? - le pregunto con una pizca de esperanza.

Él se acomoda los lentes que tiene puestos.

- Tú padre se golpeó fuertemente la cabeza y no tenía puesto el cinturón de seguridad, lamentablemente él.. falleció. - silencio, me quedé en silencio - Lo siento mucho por su pérdida, ¿quiere pasar a despedirse? - solo niego con la cabeza, si voy a hacerlo va a ser cuando este Nico -¿hay algo más en lo que pueda ayudarla? - niego con la cabeza y el asiente lentamente y se va.

Me quedo ahí, parada y en shock.

Mi padre, el que compartí miles de momentos, el que varias horas antes había despedido con una sonrisa, se fue y ya no lo voy a volver a ver.

Ya no va a volver mi padre.

Caigo en la cruel realidad, la realidad en la que ya no va a estar sus buenos días por las mañanas, sus bromas, hasta voy a extrañar sus malas caras.

Te voy a extrañar.

Grito con todas mis fuerzas, grito tratando de sacar este vacío de mi pecho, grito tratando de que se me vaya la voz, grito tratando que de alguna forma mi padre vuelva.

Camino hacia el baño, no se donde está, pero mis piernas sólo caminan como si ellas me guiaran.

Mis pies están en la tierra, pero mi cabeza está en otro lado muy lejos de aquí.

Entró a lo que parece ser un baño y me miro al espejo, veo mi reflejo y sólo veo una chica con su maquillaje perfectamente corrido gracias a las lágrimas, el pelo perfectamente desprolijo y el vestido sucio.

Me quedo mirando mi reflejo por varios minutos pensando en lo que voy a hacer después de esto.

¿Qué va a ser de mi vida después de esto? Y la única respuesta clara es; nada.

No puedo ver tristeza ni alegría, no puedo ver nada.

Veo que comienzo a llorar nuevamente así que mojó mi cara dejando mis ojos hinchados y rojos a la vista.

En otro momento me hubiese importado mi apariencia, pero ahora no me importaba nada, sólo estar con mi familia nuevamente.

Golpeó la puerta fuertemente, ¿porqué tiene que pasar esto?

Cuando estaba feliz, cuando estaba tratando de cambiar para bien, está noticia me destruye y me parte en miles de pedazos.

Veo mis pedazos en el suelo y no se como recogerlos y tampoco tengo las fuerzas necesarias.

Salgo del baño caminando lentamente y vuelvo a la sala en la que ahora había algo diferente.

Estaba mi hermano y Connor.

Sentí que los pedazos se volvían a romper volviéndose aún más pequeños.

- ¿Sara? ¿Qué ocurre? - pregunta Nicolás con los ojos llorosos.

A punto de soltar esas lágrimas que sin saber me dolía aún más todo lo que estaba pasando, está horrible pesadilla.

Miro hacia Connor y él me estaba mirando atentamente, directo a los ojos.

Forma con sus labios en silencio "¿Todo bien?" Y ahí fue cuando me derrumbe, más de lo que llegué a pensar.

- Papá se fue. - digo cayendo al piso sin fuerzas.

Me agarro el pecho con fuerza, ese vacío seguía estando y estaba segura que con nada en el mundo podría llenarlo.

Siento unos brazitos rodear mi cuello con fuerza y apretarme contra él, huelo su perfume y tiene el mismo perfume que papá. Recuerdo que decia que poniéndose ese perfume sería "más hombre".

Aprieto mis ojos con fuerza mientras lo abrazó escuchando sus sollozos.

Siento que nos envuelve unos brazos aún más fuertes y me quedo tranquila cuando siento que acarician mi cabello.

- No me dejes tú también Sara, no lo hagas por favor. - dice mi hermanito llorando.

No puedo estar más destruida.

Pero sin saber que otra cosa contestar..

- Siempre voy a estar aquí Nico, siempre..- le contesto.

Y así nos quedamos por minutos y hasta por horas, abrazados, reconfortandonos y tratando de juntar nuestros pedazos rotos.

Frase del capitulo: Siempre serás mi estrella favorita, aunque decidas iluminar otros cielos.

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