Capítulo 11

66 8 0
                                    

Me levanté gracias a que sentí unas pequeñas manitos abrazarme por la cintura, sonrío pensando en mi hermano.

- ¿Cómo has dormido pequeñín? - le pregunto dándome la vuelta para verlo.

Se encoge de hombros.

- No pude dormir pensando en todo Sara.. - esa confesión me destruyó internamente.

Acaricio su cabello delicadamente.

- Cuando no puedas dormir, sólo tienes que venir conmigo ¿si? Estaré aquí para ti Nico.. siempre. - sonríe mientras asiente en respuesta.

Unos minutos más tarde entra mi abuela a la habitación.

- Pequeñitos, iré al hospital por las noticias de su madre, ¿ustedes vendrán? - no terminó de decirlo que ya los dos estábamos de pié agarrando cualquier cosa para vestirnos.

Media hora más tarde estábamos todos en el auto rumbo al hospital.

Prendo el celular que desde anoche lo tengo apagado y tenía varias llamadas de Alexa, Oliver y Connor, lo ignore y guardé el celular.

Veo como las manos de Nicolás se movían con nerviosismo, acuno sus manos con las mías y le sonrío.

- Va a estar todo bien, no te preocupes. - asiente sin mirarme y así estamos hasta que llegamos.

Entramos prácticamente corriendo al hospital buscando al doctor cuyo nombre no conocía.

Lo vemos que estaba charlando con lo que parecía ser una enferma con papeles en manos, nos acercamos y esperamos a que termine para no interrumpirlo.

- Buenos días, ya se por lo que vienen, acompañenme. - lo seguimos por el pasillo, subimos el ascensor en silencio hasta llegar a la habitación 434.

Nos abre la puerta y ahí estaba mamá, acostada, más pálida de lo normal, tenía golpes en su rostro, brazos y cuello, se veía tranquila, ajena a lo que pasaba a su alrededor.

- Bueno, su madre al parecer recibió un golpe demasiado fuerte en su cabeza lamentablemente y quedó inconsciente al instante. Tratamos de hacer lo que tuvimos en nuestras manos para hacer que reaccione, pero nada funcionó. Su madre está en estado de coma, no se cuando va a despertar, si mañana o pasado, o dentro de un mes o un año, eso se sabe según pasen los días. La dejaremos internada aquí ¿si? Para que tenga atención médica y profesional, podrán venir a visitarla según los horarios de visita y.. siento mucho esto, pero sé que su madre es una guerrera que saldrá adelante por ustedes..- con eso dicho se da la vuelta para irse.

Nosotros estamos estáticos en nuestro lugar, en shock.

Reaccione unos segundos despues y corrí por el pasillo hasta llegar al doctor.

- Doctor - el se voltea a verme - necesito que me diga si ella me escucha como en las películas, necesito tener esa mínima esperanza. - le digo sintiendo las lágrimas caer.

Aprieta mi hombro delicadamente.

- Puedes hablarle porque ella te va a escuchar, quien sabe, escuchandote tenga las fuerzas necesarias para no darse por vencida, ahora es cuestión de ella despertar o no ¿si? - asiento - la esperanza es lo último que se pierde señorita Brown.

- Eso es lo que dicen - contestó desanimadademente.

El me da una pequeña sonrisa.

- Cuidese. - y sin más se va una vez más.

Cuando estoy llegando a la habitación una vez más veo como mi abuela discute con alguien a través del teléfono.

Extrañada me acerco y mi abuela me hace una seña de que guarde silencio.

- No lo se, haz lo que creas necesario para no perder nada - espera a que le contesten del otro lado, se la veía enojada de verdad - No pueden quitarle todo lo que les queda a ellos, son unos niños [...] está bien, hablaré con ella y te llamaré.

Corta la llamada y guarda el celular, me mira por unos segundos en silencio.

- Abuela, ¿Qué ocurre? - le pregunto acercándome.

- Tu-tu padre le debía dinero a mucha gente Sara, y una buena cantidad de dinero a cada uno - cuando dice eso recuerdo la charla de mamá y papá el viernes por la mañana.

- Si, lo sabia. Los escuché hablar por la mañana y papá le decía que iba a tratar de arreglar todo.. por nosotros - digo recordando con tristeza.

Ella toma mi brazo.

- Si, ahí se dirigían el viernes por la noche, a una cena con uno de ellos pero bueno.. pasó lo que pasó - contesta con la cabeza gacha - Pero, a lo que quiero llegar es que, son tantos a los que le debe que, quieren vender la casa y sus cosas dentro para poder pagar todo Sara - mí cabeza prácticamente hizo una explosión.

¿Vender todo? ¿dónde viviríamos? Crecí en esa casa, esto era un gran cambio que iba a costar asumir.

- Sé lo que piensas, donde se quedarán o que pasará con sus vidas, bueno esto es lo que haremos; se irán a vivir conmigo a las afueras de la ciudad, no cambiarán de colegio porque no queda tan lejos pero si cambiarán las cosas para ustedes, pero se que podrán lograrlo.

- Pe-pero, ¿no puedo sólo trabajar y pagar todo? Prometo conseguir un trabajo, y si tengo que conseguir dos trabajos por días no me importa pero, que no nos quiten nuestro hogar abuela, por favor haz algo. - le digo rogandole prácticamente.

Ella me ve con tristeza.

- Es mucho lo que se debe cariño y lamentablemente los tipos con los que a metió tu padre son peligrosos, hemos recibido varias amenazas y yo prometí cuidarlos a los dos, no me perdonaría perderlos a ustedes por algo material, lo siento. - sin más ella entra a la habitación.

Me siento en el suelo pensando en todo lo que ha ocurrido en menos de dos días, mi vida cambió todo en un abrir y cerrar de ojos y duele.

Primero perdi a mi padre, luego mi madre en coma y ahora perder todo e irme a vivir al campo, ¿qué sigue? ¿qué mis amigos me traicionen?

Me levanto del suelo y limpio las lágrimas. Voy a la habitación y veo como la abuela y Nico le hablan a mamá mientras ríen por algo que contaron.

Y pensé, no me perdonaría que algo le pase a mi hermano por un capricho mío de no perder la casa. Lo material va y viene, la vida de un hermano no.

Frase del capitulo: En un cielo. En un cielo lleno de estrellas, ahí te vi.

Viviendo Mi Mentira ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora