JACE.
Cuando comprobó que Alexander estaba dormido, se dedicó a preguntar, había descubierto que Isabelle, la estrella, era la hermana de Alexander.
— ¿Así que tú eres...?
No podía pronunciar aquella palabra, conocía a Alexander desde unos pocos años y lo que había sabido de él era que su hermana, la única que tenía, estaba muerta, había fallecido cuando había nacido y por eso todo se había desencadenado.
— Sí, lo soy— respondió— es difícil de imaginar, pero tuve una segunda oportunidad.
Tenía la ansiedad de despertar a su amigo y contarle todo, que esa chica que estaban compartiendo auto era su mismísima hermana.
— ¿Y estas aquí para...?
—Soy una guerrera, pero a la vez una hermana y vi que el mío está en apuros.
Miró a Magnus esperando a que dijera algo, pero a cambio de eso solo corrió su mirada.
— ¿Por qué aún no se lo dicen?
La chica apretó el volante mientras trataba de dedicar una sonrisa forzada.
—Alexander muy dentro de él me culpa por haber separado a la familia— dijo Isabelle— se lo diré cuando esto haya acabado.
Jace chequeó la lengua mostrando su desacuerdo en lo que iba a hacer la chica y Magnus.
—Conozco a Alec más que ustedes mismo y si quieren agradarle deben ser sinceros desde el comienzo— dijo Jace— si se entera a la últimas, entonces sufrirá un shock y cuando menos lo piensen, estará del lado de la luna negra y lo habrán perdido.
La chica suspiró y Magnus solo se tiró hacia atrás mientras colocaba sus manos en su cara y dejaba escapar un gritito de frustración.
—No te metas niño rubio— dijo Izzy— acaso tú has sido sincero con tus sentimientos a tu querido Alec.
Jace la miró de mala manera.
—Mis sentimientos están en dudas, cuando los tenga definido entonces le diré— contraataco Jace— en cambio tú eres su hermana y eso no es duda ¿O sí?
La chica bajo el ritmo del auto y volteó a mirarle.
— ¿Qué estás tratando de decir?
El rubio sonrió con superioridad a ver que había causado lo que quería.
—No quieres decirle a Alec que eres su hermana— respondió Jace— ¿Será verdad que eres realmente ella?
Alexander comenzó a moverse en su asiento y todos se callaron, Jace dirigió su mirada a la ventana despidiéndose de Idris, el lugar donde nunca habitaría, ni cruzaría como referencia para ir de visitas a países. Como el auto iba despacio Jace pudo ver entre dos árboles a Sebastián, se pegó más al vidrio de la ventana, el chico sonreía mientras le saludaba, sin poder evitarlo levantó su mano y la movió como un saludo.
Después de no verle más, golpeó su cabeza con el vidrio y cerró sus ojos con fuerza, Sebastián podría haberse salvado si hubiese tenido un pequeño cariño, pero no, el se había dedicado que la vida de aquel muchacho fuera un infierno en el orfanato después de que les descubriera a él y a Simón probando por primera vez la sexualidad en los baños.
"Lo siento."
Pero si hubiese sabido de esto, de lo que sucedería, él hubiera hecho todo lo posible para que no sucediera, que a su lado estuviera viajando sin estar separados, podrían haber sido amigos, intentar arreglar todas las diferencias, sus errores, los golpes.
Ahora que lo pensaba Sebastián había dicho que tenía un entrenamiento antes de ser dejado en los orfanatos, no entendía la razón de no defenderse cuando le golpeaba.
Se había comportado como un niño y ahora se estaba dando cuenta de todo lo malo que había hecho, después de que ya nada tuviera solución.
—Jace.
Volteó la mirada a ver cómo Alec medio dormido le miraba.
— ¿Estás bien?
Jace asintió para correr de nuevo la mirada.
— ¿Y tú Magnus?
Sabía que Alec tenía otro interés en otra persona, en el guerrero estrella que estaba sentado a su lado y eso le molestaba un poco.
ESTÁS LEYENDO
Pidiéndole a la luna. •Malec•
Fanfic||Malec|| Todo dependía de la luna, si quería cumplir el deseo de Alexander y no llevarlo a su propia muerte. Publicado en el: 2017