¿Quién es el papá?

ONCE: 9 semanas

Kyungsoo empezaba a sentir dolores musculares, por lo que el doctor Jin le dijo que salir a caminar todos los días le haría bien. Cuando comentó esto en la cena, solo por decir algo, Baekhyun le propuso acompañarlo los mediodías. Jongdae en cambio se ofreció para hacerlo al atardecer, ya que el resto del día trabajaba, pero Kyungsoo inventó una excusa para aceptar la propuesta del chico que le gustaba.

—Podrían invitar a Minnie —propuso Jongdae, y cuando Baekhyun aceptó la idea con una sonrisa, Kyungsoo quiso clavarle el tenedor a su amigo, mientras éste se relajaba por imaginarlos acompañados.

Sin embargo, Minseok no estaba llevando muy bien la ansiedad de la espera por los resultados y prefirió no verlos esa semana, incluso a Jongdae. Las cosas volvieron a ponerse peligrosamente tensas entre ellos.

El primer día luego del nuevo acuerdo, Baekhyun le llevó un yogur de desayuno a la cama a Kyungsoo y lo alimentó como a un bebé. Se les estaba volviendo costumbre hacerlo, siempre y cuando Jongdae no estuviera con ellos. Kyungsoo volvió a quejarse de su panza mientras se vestía, solo para que Baekhyun lo endulzara un poco. Luego de que Jongdae se hubiera ido totalmente desganado, salieron a dar su primer paseo de la semana.

Baekhyun era muy caballeroso con Kyungsoo, y era a la única persona que le dejaba serlo, porque le gustaba sentirse importante, aunque fuera una ilusión. Le abría las puertas y lo dejaba pasar, le ofrecía la mano para bajar algún escalón aunque no estuviera tan embarazado todavía, e incluso dejaba la mano cerca de la suya cuando estaban por cruzar la calle, atento a cualquier posible accidente.

El parque al que fueron no quedaba muy lejos de donde vivían, pero era de una circunferencia amplia, así que rodearlo les llevaría un buen rato. Era un bonito lugar para hacer ejercicio y como era temprano en la tarde no había muchas personas haciendo ruido. Caminaron lento, tranquilos, disfrutando del paseo y el paisaje. Baekhyun se emocionaba con cada mascota que veía jugar.

Kyungsoo vio cómo de pronto le brillaron los ojos al captar algo y siguió su mirada. En una caja junto a un árbol asomaba un cachorro negro, de orejas puntiagudas, hocico largo y cara de lobo. Los miró con la cabecita inclinada, directo en el punto débil de Baekhyun.

—Kyung, ¿podemos ir a verlo? Parece que está abandonado... —El mayor tiró de su manga como si fuera un niño pequeño hablando con su mamá. Kyungsoo apretó los labios para no dejar escapar una risa.

—Claro —aceptó.

Baekhyun corrió a la caja y cargó al cachorro en brazos. Éste estaba medio asustado, pero con las caricias tomó confianza y le lamió la cara. Llevaba una placa con su nombre y en la caja había un cartel pegado cuya inscripción decía "llévame a casa", con una carita triste. Bajó al cachorro y éste jugó siguiendo su mano. Kyungsoo se puso en cuclillas cerca de ellos y admiró la sonrisa aniñada de Baekhyun el rato que éste estuvo distraído divirtiéndose con el animal.

—¿Deberíamos llevarlo? —murmuró Baekhyun sin mirarlo a la cara.

Kyungsoo recordó a Jongdae quejándose muchas veces en el pasado de lo insistente que era Baekhyun cada vez que veía un perro en la calle y lo difícil que se ponía cada vez que rechazaba la idea. Lo que nunca había entendido era el por qué del rechazo. No era su casa, pero aún así podría tomar la responsabilidad del cachorro si Jongdae hiciera mucho alboroto, por lo que luego de pensarlo bien respondió:—Llevémoslo.

Los ojos de Baekhyun brillaron de la emoción.

—¿En serio? Pero Jongdae...

—Yo me encargo de él.

A Baekhyun se le hinchó el pecho de la felicidad y saltó para abrazarlo, tirándolos al pasto. El cachorro se agachó y les ladró, pensando que jugaban. Baekhyun se rió, Kyungsoo tardó en hacerlo por la sorpresa del accionar del castaño.