El Amigo De Mi Hermano (Sasunaru)

† Al conocerlo. †

Flashback:

En un evento de anime fue la primera vez que lo vi, en ese entonces, el tenia 7 años.

Se mantenia atras de su hermano, sosteniéndole del pantalón, con un leve sonrojo que se expandía desde sus mejillas hasta sus orejas. Llevaba puesto un disfraz de zorro de nueve colas.

Sonreí enternecido al verlo.

Sin titubear me acerque a su hermano y le sonrei, este sonrió un poco extrañado.

-¿Un abrazo? -Mostre el cartel que minutos antes me había dado Karin. En lo personal no me gustaba, pero admito que me ayudo mucho aquel dia. Este cartel decía "Abrazos gratis" algo muy popular en los eventos.

Aquel rubio miro el cartel para luego mirarme a mi y asintió con la cabeza.

Pronto, enrrolle mis brazos sobre su cuerpo y le di un abrazó, un tanto cortó.

Al separarnos, dirigí mi mirada al pequeño quien me observaba con sumo de detalle desde detras de su hermano.

-¿Tu también quieres un abrazo? -Le dedique una sonrisa mientras estiraba mis brazos hacia el. Acto seguido el niño miro a su hermano en busca de una aprobación.

-Esta bien Naru, puedes hacerlo -Sonrió.

¿Se llamaba Naru? Bonito nombre.

El pequeño salio de detras de su hermano y se acerco avergonzado hacia mi.

Me arrodille frente a el y abri mis brazos a lo que el pequeño rubio respondió con una sonrisa seguida de unos pequeños brazos rodeando mi cintura.

Me enterneci nuevamente ante tal gesto y atiné a abrazarlo de igual modo.
Era gracioso ya que al abrazarlo, mis brazos volvían a tocar mi cuerpo.

-Ya Naru, puedes soltar al chico. -rio el rubio a lo que el pequeño respondió con un vaivén rapido de izquierda a derecha con su cabeza dando a entender que no queria soltarme.

-Vamos Naru, de seguro el chico tiene cosas que hacer.

-Oh no te preocupes, si quieres puedo cargarlo hasta que el pequeño se tranquilice. -Sonreí.

-¿Estas seguro? -sonrió apenado-. Cuándo a Naru se le mete algo en la cabeza no puede olvidarlo...

-Estoy seguro, no hay problema. -Sonreí inspirando confianza a lo que el rubio me respondió con una sonrisa de igual modo.

-¿Y cuál es tu nombre?

-Sasuke, Sasuke Uchiha y el tuyo?

-Bueno, yo me llamo Deidara Namikaze y el, es mi hermano Naruto Namikaze.

-He oido hablar sobre su empresa. Nunca imagine cruzármelos por aqui. -Sonrei mientras comenzábamos a caminar por el lugar.

El pequeño Naruto se acurruco en mi pecho pretendiendo dormir.

-Oh, esperemos a que se duerma y cambiamos.

-Te escuche. -Chillo Naruto inflando sus mofletes.

Creo en ese instante me dio diabetes.

-Es extraño, casi nunca se deja con nadie... Al parecer le inspiraste confianza. -Sonrió.

FIN DEL FLASHBACK :

Al final de todo, me hice amigo de Deidara. Siempre saliamos juntos y lo mejor de todo era que cada vez que saliamos, el rubio llevaba a su hermanito menor, quien había conectado conmigo una gran confianza y afinidad.

Mentiria si dijera que aquel rubio no me provocaba algo en mi estomago... Era demasiado bonito y ni hablar de personalidad.

No obstante, una noche el la cuál yo me había quedado a dormir en la casa de los Namikaze's. Naruto se acerco en la habitación en la cuál yo dormia y me preguntó si podía dormir conmigo. Yo acepte pero de igual modo pregunte por que no le preguntó a Deidara. El respondió que su hermano al dormir se movía mucho y a el lo tiraba de la cama, podia corroborar eso, El rubio era un maldito campeon de taekuondo mientras dormia. . 

Naruto se recosto a mi lado 

El pequeño he inocente rubio, se pego a mi dándome la espalda y comenzó a frotar por arriba del pijama con su trasero mi hombría. Eran apenas pequeños movimientos de pelvis pero no tardo para que mi falo estuviera enarbolado.

-Na... Naruto... ¿Podrías dejar de hacer eso? -Susurre con la voz entrecortada.

-¿He? ¿Hacer que? -Respondió con un tono inocente mientras detenía sus movimientos.

-Moverte...

-¿No te gusta? -Repitió su tono inocente.

-No...

-Perdona... Es que yo me relajo realizando esos movimientos... No los volveré a hacer... -Se pudo notar su voz apenada.

-No hay problema pequeño. -Sonreí.

Trate de levantarme pero su pequeña mano me lo impidió.

-No me dejes solo. -De dio vuelta para mirarme a los ojos. -Por favor.

-Solo serán unos minutos... Necesito ir al baño... 

Ese fue el principio de todo...