ł Amenazas ł

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Naruto logró acostar a Sasuke en su cama. Al notar que ardía, le colocó un paño frio en la frente tratando de calmar un poco la fiebre.

-Ire a prepararte una sopa...

-¡Nno! ¡Qqquedate conmigo -aferro el brazo del rubio con sus pocas fuerzas

-¿No tienes hambre?-elevo una ceja.

-Quiero estar contigo.

-Ya deja de decir tonterias. -Rio-. Me quédare un rato contigo y luego ire a prepararte la comida.

-Ven, acuestate... -Sasuke tiro de el hasta que lo acostó a su lado.

-¿Y que se supone que hacemos ahora? -murmuró a la vez que era abrazado como un cohala a su madre.

-¿Que se supone que quieres hacer? -Le miro de reojo.

-No lo se. -dijo-. ¿Cuando vuelve tu familia?

-En tres dias... Se fueron ayer de la cuidad, despues de que yo llegará. Dijeron que era temas de trabajo.

-¿Quieres que te visite hasta entonces? -murmuró-. Asi no te sientes solo.

Naruto sabía que sus padres le dejarían más si estaba solo y enfermo, confiaban mucho en Sasuke.

-¿Algo así como un enfermero personal?

-Algo así... Creo...

-Me parece perfecto. -Sonrió para luego depositarle un besó en la naríz-. Ahora.. Vámos a abrazarnos hasta quedarnos dormidos. -Se dió vuelta pasando sus brazos por la cintura del menor para así poder abrazarle y pegarlo a él.

El tiempo pasó, Sasuke ya se había dormido, pero Naruto no, él observaba al azabache descansar. Le hacía sentir relajado, tranquilo, hasta que luego de unos minutos en aquel esto, sus párpados comenzaron a pesar, sin poder retenerlos más, cayo rendido en los brazos de morfeo.

Horas despues, despertó Naruto y el sol ya se estaba escondiendo sobre el horizonte, tronando el cielo de un color anaranjado.

El menor se escabulló entre los brazos del azabache hasta salir de la cama.

Le sorprenderia con una sopa.

Minutos pasaron en los que Naruto estuvo en la cocina hasta que la gran sopa curativa estuviera lista.
Al servirla, la coloco en una bandeja junto a un vaso de agua, la cuchara, y una rodaja de pan.

Camino todo el living hasta llegar a las escaleras dónde, con cautela y delicadeza comenzó a subir. Años cuidando de Deidara dejaban enseñanza..

Abrio la puerta con el codo provocando que la sopa se derrame un poco, nada grave. Sasuke ya estaba despierto, mirando hacia la nada, y posiblemente pensando en todo.

-Te traje la sopa. -Sonrió.

-¡Oh! ¡Gracias! -susurro una vez el rubio dejo la bandeja en las piernas de Sasuke-. Se ve delicioso. Como siempre.

-Bueno, era lo mínimo viniendo de mi. -Elevo una ceja fingiendo ser egocéntrico.

-Claro que si. -Le siguió el juego.

Naruto se sento en el borde de la cama observando al azabache con ternura.

-Esta tibia, puedes comerla sin sufrir.

Al decir esto, Sasuke se llevo una cucharada a la boca sintiendo una explosión de colores en su cavidad bucal.

-¿Que tal?

-¡Delicioso!-sonrió-. ¿Tu no comerás?

-Comere en mi casa.

-Te daria de mi cuchara pero te enfermaria -realizo una mueca de desagrado.

-No hay problema, la hice para ti, solo tu debes tomarla. -Rio.

Luego de un rato en el cuál Sasuke termino de tomar su sopa y Naruto llevo la bandeja hacia la cocina lavando los trastes. A Naruto le llego un mensaje de su madre.

"Querido Naruto, en unos minutos nuestro guardaespaldas personal pasará a buscarte. Reunión familiar"

Naruto bufo por lo bajo, a la vez que guardaba su celular en el bolsillo trasero y terminaba de secar sus manos con la servilleta.

Una vez termino, estuvo un tiempo más junto a Sasuke hasta que el guardaespaldas tocó la puerta. Entre refunfuños por parte del azabache, se despidieron con un beso en la frente y una promesa de que mañana estarían juntos, cuidándose mutuamente.

Al rubio se le hizo extraño que enviaran a el guardaespaldas en vez de al taxista pero de igual manera obvio el tema.

El viaje hasta la mansión fue bastante relajado, observando las casas y arboles pasar a gran velocidad sobre la ventana, con Somewhere in neverland- All time Low. escuchándose atravez de sus audifonos.

Al pasar por las rejas y entrar a su hogar,no sin antes quitarse los audifonos y guardarlos junto a su celular en el bolsillo de su chaqueta. Vio como Deidara, Kushina y Minato esperaban pacientemente en el gran comedor.

-¡Hasta que alfin llegas Naruto! Me tenias preocupada -chillo Kushina.

-¿Preocupada? -hablo sin creerle a la vez que era abrazado por la pelirroja.

-Ven, sientate.

Como dijo, se sento al frente de su hermano, manteniendo su total atención a lo que sus padres dirían.

-Bien, hace un par de dias, recibimos amenazas en la empresa. -hablo Minato-. No pudimos locarlizar de donde estaban siendo enviadas. Nos dimos cuenta que no querian nada, solo provocar un daño, o tal vez miedo. Poco a poco, comenzaron a enviarnos información personal de su madre, de ustedes, de mi, y de otros familiares amenazandonos a muerte. Hoy dia una de nuestras cocineras fue apuñalada camino aquí. Por suerte esta fuera de peligro. Con esto podemos saber que están dispuestos a todo. Por eso, apartir de ahora, ustedes llevarán guardaespaldas. -Terminó de decir.

-¿Como sera eso? -Murmuró Naruto-. ¿Nos acompañarán a todos lados? ¿Hasta a el baño?

-No, solo cuándo salgan de casa seran acompañados. En casa abra policias cuidando. -Explico Kushina.

-Entiendo... ¿Y si quiero ir solo a algún lugar? -volvió a hablar.

-No podrás

-¿Tienes algo que esconder hermanito? -Habló por primera vez Deidara.

-¿Y tu? -desafío-. ¿Tu tienes algo que esconder?

-¡Vamos, son hermanos, no peleen por idioteces! -Les regaño Kushina.

-El empezo. -Murmuró Naruto mientras se cruzaba de brazos-. Idiota.

-Estupido adoptado.

-¡Detenganse! ¿Que les sucede? -Exclamo Minato.

-Pregúntale A Deidara.

-Pregúntale a Naruto. -Exclamó Deidara al mismo tiemp que Naruto.

Ambos se miraron con odio para que luego Deidara se levantará de la mesa y corriera hasta las escaleras sin detenerse por los llamados de Minato.

Naruto rodo los ojos, captando la atención de Kushina y Minato.

Aqui vendrian los sermones y preguntas.

El Amigo De Mi Hermano (Sasunaru)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora