Ponle título a lo prohibido [TERMINADA]

D I E C I S É I S

Esperaba la moto en nuestro punto de encuentro, entonces estaciono el auto negro.
-¿Señorita Victoria?-preguntó el chofer, asentí con la cabeza y entonces descendió para abrirme la puerta del auto
-¿Y Aiden?-pregunté mientras subía
-El señor se retrasó en una junta, por eso me pidió que la pasará a buscar-comento el chofer.
-Gracias señor..-me quedé pensando en que nunca me había dicho su nombre, pareció leer mi pensamiento pues dijo
-Lorenzo
-Un gusto-añadí y le envíe un mensaje a Aiden. <No me gustan que me cambien por el trabajo> no tuve respuesta, llegamos a un hotel de cinco estrellas, mundialmente reconocido.
-¿Señorita?-alce la vista y Lorenzo me indicó por donde ir-Pregunté por la suite que está reservada a nombre del señor Lanned.
-¿No lo espero a él?-pregunté tontamente y secretamente decepcionada
-Él llegará pronto, mientras relajese-me sugirió antes de irse dejandome en ése imponente hotel, hice lo que me dijo Lorenzo y me dieron la tarjeta de la habitación 669 no pude evitar retener una sonrisa al ver el número.  Llame por teléfono a Aiden mientras esperaba el ascensor, y nada. Me empezaba a inquietar, entre a la habitación, era enorme con mesa de pool, con sala de estar, con ducha escocesa, con hidromasaje, con cocina, con una amplia cama de dos metros, pero ni un rastro de Aiden, decidí darme una ducha hasta que llegará, tome la bata y entre al baño, era todo vidriado, el vapor del agua caliente empaño todo enseguida, mientras me me terminaba de lavar el pelo sentí una corriente de aire, y me dí cuenta que habían abierto la puerta de la ducha.
-Me encanta verte mojada y desnuda, es como mejor te ves-comento Aiden acariciando ni cintura, el llevaba el boxer y la camisa todavia, al entrar se mojo y su imagen era realmente sexy.
-Me empezaba a preguntar si iba a tener que divertirme sola-dije mordiendo mi labio inferior provocandolo, me giro y apoyo mis manos contra la mampara de vidrio, se agachó y beso mis muslos, mi vientre y finalmente empezó a devorarme, su lengua jugaba hábilmente sabiendo donde lamer, donde entrar, donde morder suave estaba gritando de placer, pidiendo por más no me dejaba sacar las manos de la mampara y eso me enloqueció, llegué alucinada al clímax me costaba mantenerme en pie, cuando el finalmente se paro y puso sus manos junto a las mías, respiro en mi cuello.
-Repito, eres deliciosa por donde te pruebe-dijo besando suavemente mi cuello, empecé a mover mí cola contra su miembro.
-Aiden te necesito-susurre agitada
-Lo sé, pero todavía no-dijo metiendo un dedo en mi, lo movio suave, yo no me podía aguantar, quería más, él lo supo porque saco el dedo y metió dos juntos comenzó suave subiendo la velocidad hasta que estaba en el borde del precipicio, saco la mano y metió su miembro, estaba más que preparada, lo recibí gustosa y en pocas embestidas me hizo gritar.
Nos quedamos sentados en el piso de la ducha con el agua cayendonos encima, cerré los ojos y se lo dije.
-Voy a pedirle el divorcio-