Ponle título a lo prohibido [TERMINADA]

S E S E N T A Y D O S

Estaba sentada en la mesa del comedor, seguía histérica, pegada al teléfono, esperando una llamada, una señal, algo que me indicará cómo o donde estaba Aiden. La Policía tomó mi denuncia y se retiró del lugar, dejando una patrulla en la calle por las dudas, y según ellos seguirían el caso desde la estación. Claro esta, que yo no les creía una sola palabra.
En ese momento golpearon la puerta, corrí frenética y abrí de un tirón.
-Corazón, amiga-dijo Rodrigo abrazandome y yo me deje caer en sus brazos, llorando como una bebé. Descargando todos los sentimientos que se arremolinaban dentro de mi.
-No sé qué pasó-susurré-Tengo tantas sospechas y tan pocas certezas-reclame en su hombro.
-Tranquila, ya se van a comunicar-me dijo acariciando mi pelo, estaba logrando dejar de llorar o al menos de hipar y ensuciarle la remera a mi amigo, cuando en eso se abrió la puerta principal y Aiden entró por ella, tenía la cara conmocionada.
-Vicky-dijo y se desplomó en la entrada. Con Rodrigo corrimos a socorrerlo, lo colocamos en el sillón y vimos el golpe que tenía en la cabeza, justo en el mismo lugar donde se había golpeado en el accidente.
-Amor... Estas acá, estas a salvo-susurré acariciando su frente. Bese suavemente sus labios-Rodri, llama a la ambulancia, tiene que verlo un médico-dije sin moverme de su lado.
-Vi-dijo Aiden, intentando abrir los ojos, parecía qué no podía. Se notaba el esfuerzo que intentaba hacer.
-¿Qué pasa? ¡No te esfuerces!-lo regañe, una leve sonrisa escapó de sus labios
-Fue Mariana-dijo poniendo su mano derecha en su frente presionando.
-Lo supuse, ¿Cómo te libraste?-pregunté
-No lo sé, es confuso. Creo que me tire del auto, eso explicaría porque se me parte la cabeza-dijo entrecerrando los ojos
-Descansa, y todo va a estar más claro-añadí levantándome, camine hacia donde estaba Rodrigo con una super taza de té.
-Sé que la necesitas-dijo sonriendo. Pasó su brazo por mi espalda, y apretó mi hombro-Tranquila, ya está acá-dijo mi amigo para calmarme. Pero mi mente sólo pensaba en porque y para que lo dejaron escapar, y si Aiden habia hecho algo más que sólo huir del lugar. Pero mis cavilaciones tendrían que esperar a que mi futuro marido cobrará conciencia, porque por el momento se hallaba sumergido en un profundo sueño.