Una noche llena de sorpresas

1.5K 181 210
                                    

Hendrix Lovelance daba a conocer las puntuaciones hasta ahora de las candidatas:

Kerena tenía el quince por ciento de los votos. Julles y Amairani tenían los más altos porcentajes. No era de sorprender,desdé el principio eran las candidatas más fuertes,al pertenecer a los distritos más ricos,había más posibilidades de ganar las ternas,ya que sus adeptos tenían más facilidad para hacer sus votaciones.

Kerena se sorprendió al sentir esa espinita de desconsuelo por estar hasta el final en las  preferencias del pueblo.

Con el quince por ciento estaba pisándole los talones a  Vanessa con el veintidós, seguida de Julles con el veintiocho y en la cima Amairani con el treinta y cinco por ciento de los votos. Para ser tan engreída y déspota se había ido muy arriba.

Eso solo le confirmó a Kerena que todo eso había sido solo una charada. Una perdida total de su tiempo y la hizo decidirse finalmente. Ahora estaba más decidida a dar el último paso...

— Y ahora,con ustedes,la señorita ¡Kerena S Child! — anunció Hendrix, era su turno de subir una vez más al escenario.

— Bienvenida Kerena, cuenta nos ¿ Cómo han sido estos días después del atentado?

Involuntariamente Kerena miró a Erickson. Desde aquella noche,había evitado todo contacto y en cuanto Hendrix preguntó, Kerena recordó esa noche:

Lo que había comenzado cómo un inocente beso por parte de Erickson, se salió de control cuando la excitación comenzó a rebasarlo y entonces... Estaba encima de ella, perdido en un río de sensaciones. La besaba con hambre,mientras sus manos encontraban el camino hasta sus muslos. Y ella protestó. Débilmente, tan solo un gemido,tan bajo que él, no le prestó atención.

Erickson continuó acariciándola, deslizando sus manos por todo su cuerpo, perdiéndose entré sus piernas...

Era un terrible error dejarse llevar por sus caricias,por sus besos. Kerena no estaba lista. Más sin embargo, le resultaba demasiado tentador.

Para Erickson en cambio, se sintió atraído por ella desdé el primer día, y después de aquel beso,era incapaz de pensar en otra cosa qué no fuera poseerla.

Los dedos hábiles y fuertes de él rasgaron la tela de su vestido dejando al desnudo sus pechos.

El sonido de la prenda al rasgarse, pusieron en alerta todos sus sentidos, parecía qué aquel sonido era el de una bomba estallando en sus oídos; arrastrando recuerdos que pretendía olvidados pero que continuaban vivos.

— NO. — protestó Kerena,como pudo lo hizo a un lado. Se levantó, preguntándose qué demonios le había pasado.

— Ker... — su voz sonó tan sexy...

— ¿Qué creés que haces? — murmuró asustada.

— ¿ En verdad no lo sabés? — se levantó él y de nuevo fue a besarla.

— ¡Sueltame! ¡Alejate! — le espetó Kerena.

— ¿ Por qué? No te entiendo, por un segundo creí que lo disfrutabas, ¿Creés qué un hombre no intuye eso?

— ¿De qué hablas?

— De que mí boca se muere por la tuya,y mis manos se queman porque tienen ganas de tocarte. Y tú te sientes igual.

— N... No...

Cuando alargó una mano para acariciar su mejilla, ella se estremeció y retrocedió.

— No sé qué esperabas al traerme hasta aquí engañada,pero se acabó.

Kerena salió de la habitación sin hacer escándalo, dejando a Erickson confundido y excitado.

EsclavaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora