Aquelarre.

7 minutos en el cielo.

-No estoy completamente seguro de cuan recreativa sea esta actividad... - Ishimaru, sentado al lado de su novio en aquel círculo recientemente formado por otros de sus compañeros e integrantes de esa fiesta preguntó.
-Ay, es recreativo, deja de preguntar y disfruta del juego...- Junko respondió, ella sentada a lado de Mukuro, quien "por coincidencia" había quedado al frente del monitor de pasillo... Tal vez no tanta coincidencia, pues al escuchar lo proporcionado por su hermana menor parecía sonrojarse un poco, apenas un poco desviando la mirada.
-Enoshima tiene razón...- Celestia agregó, aún si nadie le había preguntado. Ella de una manera casi elegante con las piernas cruzadas estaba sentada encima de Yamada, a quien parecía sólo había invitado a "participar" para que sirviera de su silla (¿O trono?) personal, vistiendo como siempre hacía era indescifrable saber si llevaba un disfraz o no, que al final de una u otra manera ella parecía una muñeca de porcelana... Aunque bueno, nadie había podido notar esas pequeñas piezas dentales que había mandado a hacer especialmente y servían como sus colmillos para su intento de disfraz de Isabel Báthory, Hifumi por su parte y sentado debajo de ella teniendo que resistir todo su peso (que ni era mucho) vestía con un muy incómodo cosplay de Miku Hatsune, eso a la vista de los demás, quienes hubieran preferido no mirarlo. -... Toda actividad que incluya a diferentes y variadas personas es recreativa...- concluyó con una sonrisa calmada y las manos delante de su pecho, dándole esa apariencia tan neutral y tranquila.
Ella, por su parte había quedado sentada al frente de Gundham, eso al estar al lado de Mondo, quedando, así como si esta sonrisa fuera en realidad para él... El Dark Overlord con su brazo levantó su capa para cubrir la parte inferior de su rostro, mirar a otro lado y así evitar el mirarla.
-Sí, sí, sí, sí, sí... - Hifumi abrió su boca para hablar -... Por eso considero que yo debería sentarme al fren...-
-No... - La muchacha de cabello negro y piel pálida lo interrumpió.
-Bu... Bueno... Yo sólo consideraba que...-
-No... -
-Creí que usted había mencionado que eran actividades recreativas, mi la... -
-¡¿Y quién dijo que tú tienes el derecho de hablar?!- girándose sin ningún aviso le tomó por el mentón forzándolo a mirarla mientras en un sentido completamente literal le estaba gritando en la cara -¡No tienes derecho a dirigirme la palabra, cerdo! ¡No vuelvas a hacerlo!- lo soltó, todavía mirándolo con su ceño fruncido y casi después de haberle marcado su anillo en el rostro.
-... Iiiiiihhhhhj- Yamada lloriqueó, cualquiera que lo hubiera visto se hubiera preguntado porqué seguía hablando con ella si se comportaba así con él... Cualquiera, así como los presentes hacían -Sí, mi Lady, lo siento mi Lady... - Apenado agregó bajando la mirada, con eso ella volvió a sonreír y se giró a los otros nuevamente.
-¿Comenzamos?- poniendo ambas manos debajo de su rostro preguntó, sus ojos cerrados con aquella sonrisa que resultaba perturbadoramente tierna mientras ladeaba su cabeza.

Los demás participantes tragaron saliva, personas como Makoto que vestido como muñeco de trapo con todo y sus mejillas con rubor que no entendía cómo había acabado por participar en ese juego... Quizás era sólo porque allí estaban Maizono y Kirigiri, una sentada al lado de la otra, vistiendo esta última como policía de nuevo explotando el cliché de lo sensual, pues esta muchacha incluso llevaba sus esposas y todo ¿Tal vez Naegi tendría una noche interesante?
Sentados a lado del muchacho de cabello castaño estaban Leon y Togami, siendo este último alguien que ni se había molestado en disfrazarse tachando a esas actividades de "Infantiles y sin sentido"... Aunque claro que había ido... Al frente suyo Touko sujetando un par de tijeras... Probablemente el llevar su lengua de fuera con esa tan diferente personalidad ni siquiera era parte de su disfraz, pero era algo que nadie se atrevía a preguntar y parecía tampoco querían descubrir.
... Sentada por allí estaba Mikan, a quien parecía sólo habían llevado allí para equilibrar el número de participantes... Aunque no era como si le molestara estar allí, no si Junko también estaba allí y le habían dado un papel tan importante como "girar la botella" (bueno, a ella le gustaba creer que con eso era útil).
-... Comenzamos- Junko sonrió dando una mirada a la enfermera cubierta de vendas que ni corta ni perezosa se inclinó sobre la botella para girarla, sus enormes pechos sobre el suelo, sus caderas en el aire, su espalda arqueada y sus brazos extendidos... No podía evitar el siempre terminar por verse así... Ella simplemente era así.

Giró la botella y volvió a su posición inicial con las manos encima de su regazo, todos los participantes mirando atentos a la botella mientras giraba y giraba apuntando a todos y cada uno de ellos... Nadie hubiera creído que Tsumiki tenía la fuerza como para hacer que diera vueltas por tanto tiempo.
Mondo se aferraba a la tela de sus pantalones mientras la observaba girar y detenerse poco a poco, temiendo que terminara por apuntar a Kiyotaka y alguno o alguna de los que estaban al frente... Lo mismo era con Souda, que mordiéndose el labio no podía esperar a que se detuviera, ciertamente estaba celoso de que a Gundham le tocara encerrarse en el armario durante 7 minutos con alguien... ¿En eso consistía el juego, o no? El muchacho de cabello rosa no estaba muy contento de que Celestia le hubiera estado sonriendo por tanto tiempo a su novio... Mucho menos porque nuevamente ellos parecían tal para cual.
Finalmente, la botella se detuvo, el motociclista y el mecánico mirando atentamente siguiéndole con la mirada hasta darse cuenta de que había caído con la "pareja" menos probable... O la que quizás lo era más...
... Byakuya Togami y Fukawa Touko...
La chica del par de trenzas despeinadas se puso de pie junto a un sonido de alegría, sus ojos actualmente rojos ardiendo en la emoción mientras sin ningún aviso tomaba al rubio por el cuello del saco y lo llevaba hacia el armario de abrigos que se encontraba en la planta baja de la casa, los dos desapareciendo aquí antes de que los demás participantes siquiera pudieran darse cuenta...
... Vaya que iban a ser unos siete minutos largos e incómodos para todos aquellos que estaban allí presentes y cerca del armario...

En el primer minuto no dejaban de escuchar quejas por parte del rubio como "aléjate" y "no me toques" mientras de parte de ella había otros sonidos que delataban se moría por tocarlo, así pasaron los próximos 5 minutos, parecía que Byakuya estaba evitando bastante bien el ser tocado hasta que un estornudo se escuchó y después de eso todo se quedó en silencio...
... Hasta que el último minuto llegó a su fin y Mikan se puso de pie para abrirles la puerta...
... Revelando así a Togami con las ropas perfectamente acomodadas a diferencia de lo que se creía y a la chica tímida que siempre era Fukawa chocando las puntas de sus dedos índices.
-... Mi príncipe me dejó tocar su cabello... - La muchacha de cabellos oscuros muy satisfecha además de sonrojada con eso aseguró, cierto o falso Togami no aseguraba nada tan indiferente como siempre.

... Y cuando ellos volvieron a ocupar su asiento llegó el turno de nuevamente girar la botella, repitiendo exactamente lo que Mikan había hecho de nueva cuenta estaba girando, Kazuichi y Mondo nerviosos mirando cómo tras haber girado comenzaba a detenerse, cada vez más despacio y cada vez más despacio hasta que por fin paró...
... Los ojos lavanda y los rosas siguieron la forma de la botella, subiendo por el contrario hasta darse cuenta de que... Tal como parecía los siguientes a encerrarse eran ellos...
...
... Los que más asustados estaban de lo que les fuera a tocar a sus parejas... Y habían terminado por quedar así.
-N... No, no, no... No... No...- Kazuichi titubeó con las mejillas ruborizadas que apenas se comparaban con sus ojos y cabello.
La botella había quedado justo apuntando a ambos, no había error, no había manera de decir que había apuntado a otra persona...
... Eran los segundos en hacer eso...
Debía haber manera de "escapar" de eso, ¿O acaso no?
-¡Vamos Mondo! ¡No seas un cobarde! ¡Es un gatito lindo!- exclamó Leon... Inoportuno o no había roto el silencio que se había formado entre esa tensión, así como Junko y Celestia habían reído... Eso debía ser una broma.
-Sí, Oowada, no seas un cobarde... - Con una sonrisa demasiado "agradable" para ese comentario Junko agregó.
... Estaba atacando a un punto demasiado débil en el chico de exagerado tupé...
-Sólo serán unos minutos Oowada, tú puedes con eso...- a lo anterior Celestia dijo, tal vez era la imaginación de Souda pero ella lo estaba mirando desafiante con una sonrisa ladeada... Eso no ayudaba en nada a sus celos e inseguridad.
Ambos chicos se miraron y seguido de esto tragando saliva miraron a sus respectivos novios... Quienes a diferencia de lo que hubieran creído no estaban mirando hacia ellos... Sino a Leon.
-A... Apuesto a que a So... Souda le gustaría tocar a... A Oowada... - Touko sin dar previo aviso dijo, mordiendo la punta de su pulgar mirando hacia abajo -Se... Sentir sus músculos entre sus dedos y... Y mirar su pecho descubierto cubierto por el sudor de... De la lu... Lujuria con sus jadeos... Llenando to... Todo...-